La casa de arena y niebla. Vadim Perelman.

Sinopsis oficial.

Dos personas arrastradas a tomar medidas desesperadas para apropiarse de una casa. Se trata sólo de un pequeño bungalow en el norte de California, pero para Kathy Nicolo, es el último vestigio de esperanza en una vida que casi pierde por su adicción a las drogas. Cuando un error burocrático le obliga a desalojar la propiedad por una orden de deshaucio, Kathy se queda en la calle, incapaz de impedir que la casa sea subastada por una fracción de su valor real. El nuevo dueño, Massoud Amir Behrani, ve la casa como la consecución del sueño americano que lleva persiguiendo desde que salió de Irán con toda su familia años atrás. Antiguo coronel de las Fuerzas Aéreas Iraníes, Behrani se ha visto obligado a trabajar en empleos muy modestos para poder mantener las apariencias. Ahora ha invertido hasta el último céntimo de sus ahorros en la compra de la casa que, por fin, devolverá a su familia la prosperidad que vivieron en el pasado. A medida que la batalla entre Kathy y Behrani por la casa se va encrudeciendo, Kathy encuentra un inesperado aliado en el funcionario que viene a desalojarla, el ayudante del sheriff Lester Burdon, que se convierte en un peligroso devoto de su causa. En medio del huracán están atrapados la esposa de Behrani, Nadi, y su hijo, Esmail. Lo que empieza como un conflicto sobre un pequeño y destartalado bungalow, degenera en un choque de culturas que acabará afectando de manera irreversible a todos los involucrados.


El cine pone rostro humano a las frías estadísticas económicas en las que nadie es responsable de las tragedias humanas, y en las que al final, como denuncia Louis Michel, el responsable último es un fondo de pensiones. En el film de Vadim Perelman entran en conflicto los intereses de una joven drogadicta, Kathy Nicolo (Jennifer Connely) y un antiguo general del Sha de Persia Rheza Pahlevi, que huido de su país tras la caída de la tiranía, emigra a los EE.UU. persiguiendo el sueño americano de un desarrollo individual y colectivo sostenible. Pero esto es así en la especie de las cifras macroeconómicas, pero al descender de la nube y poner los pies en el suelo, el militar comprueba que no puede hacer frente a los gastos que suponen mantener una vida digna, casar a su hija y dar estudios universitarios a su hijo, y se enrola en los ejércitos de especuladores, en los que se basan los beneficios del modelo americano, comprando casas en subastas por desahucio y revendiéndolas por un precio muy superior. La Ley está de su parte, otra cosa es la moralidad de estas actuaciones no comprendidas por la mentalidad oriental de la esposa de Massoud Amir Bherani (Ben Kingsley, norteamericano de procedencia india).





Ambas partes del conflicto tienen sus razones, unas morales, otras legales. Kathy quiere recuperar una casa que consumió los excedentes del trabajo de su padre durante treinta años, y ella perdió en tal solo ocho meses. El conflicto racial y económico surgirá con el amante de la muchacha, policía prepotente que sólo respeta las leyes cuando se aplican al hombre blanco, pero que abusa de su poder con los emigrantes extranjeros. Será el desencadenante de una tragedia que se ha cocido en las instituciones representativas americanas, que favorecen siempre al más poderosos, sea blanco o no. El agente pertenece a un colectivo cada vez más amplio de gente sin formación que siempre ve el riesgo para su bienestar en el extranjero y no en unas leyes injustas, que incluso apoya con su voto. Impulsado por la pasión ya que es incapaz de un pensamiento racional, también será víctima de un sistema, que ha tolerado sus abusos cuando le convenía, pero que no dudará en encarcelarlo cuando se exceda en el cumplimientos de la ley t el hecho trascienda a la opinión pública por medio de la prensa.

Film interesante, en el que el director busca la objetividad y atiende a los motivos sentimentales y de exigencia vital de ambas parte en pugna.