Los Idus de marzo. George Clooney.











Ficha técnica:

Título original: The Ides of March.
País: USA.
año. 2011
duración: 101 minutos.
Dirección: George Clooney.
Guión: George Clooney, Grant Heslov.
Dirección de fotografía: Phedon Papamichael, en color.
Música: Alexandre Desplat.
Montaje: Stephen Mirrione.
Productores: George Clooney, Grant Heslov, Brian Oliver.
Diseño de producción: Sharon Seymour.
Compañías. Producción: Cross Creek Pictures, Exclusive Media Group, Smoke House, Crystal City Entertainment.

Intérpretes:

Ryan Gosling: Stephen Meyers,
George Clooney: Gobernador Mike Morris,
Philip Seymor Hoffman: Paul Zara,
Paul Giamatti: Tom Duffy,
Evan Rachel Wood: Molly Stearns,
Marisa Tomei: Ida Horowicz,
Jeffrey Wright : Senador Thomson,
Max Minghella: Ben Harper.

Sinopsis:

 El film narra la historia de un joven que escribe los discursos de un candidato, crea eslóganes, y expone con credibilidad las ideas que se pretenden vender a los futuros votantes; es idealista y mantiene una lealtad inquebrantable hacia el político para el que trabaja. Progresivamente espantado al ver que nada es lo que parece, que los comportamientos y que la maquinaria electoral se rige por una farsa abyecta que utiliza la mentira, la ocultación, los pactos más turbios y la traición con el único y sagrado objetivo de ganar y tomar el poder. El film cuenta con un reparto de lujo, entre los que se encuentran, ademas de Clooney, Philip Seymor Hoffman, Paul Giamatti, Marisa Tomei yel protagonista Ryan Gosling.


The Ides of March es un retrato implacable de la hipocresía, de lo que esconden las apariencias, de la inevitable corrupción y el cinismo arrogante que alimenta  la maquinaria política. Basada en una obra teatral, describe la batalla entre los dos candidatos del Partido Demócrata durante la campaña por las elecciones primarias en el Estado de Ohio, y cuyo resultado, debido a su trascendencia estratégica, puede ser indicativo de quién va a alcanzar en el futuro la presidencia de Estados Unidos. (Carlos Boyero, Diario El País).

Comentario.

George Cloony va avanzando discretamente y  se está convirtiendo en uno de los diretores más interesantes, un Juan Palomo, que en este caso se involucra  además como  actor ,carrera que no abandona, guionista y productor, que ha logrado que colaboren en su cinta los actores más consagrados del momento de manera casi gratuita. Fiel a su imagen de cineasta "comprometido",  nos propone con  Los idus de marzo  una cínica y realista mirada sobre los entresijos de la política americana, que bien puede verse como una metáfora sobre la trastienda de la política actual en las democracias occidentales. (Antonio José Navarro. Dirigido por...febrero, 2012).

El título de su  último film está cargado de significado histórico, pues señala el día en que Julio César fue asesinado por el partido de los optimates romanos, pasando a considerarse una fecha nefasta, que supuso el fin de la república romana y el comienzo del imperio tras dos cruentas guerras civiles. Antonio José Navarro considera la película oportuna y funcional, recuperando el auténtico significado del arte, llegando a la conclusión de que para ser político hay que ser actor, para no perder sectores de votantes y mantener al electorado unido como un sólo individuo. El candidato actúa como el héroe y debe ser potencialmente terrible, para su público, cualidad de la que se presupone imbuido especialmente al republicano,  sin importar la bondad de su vida privada, pero  los  protagonistas auténticos  de esta (a)morality play (A.J.Navarro) son el maquiavelismo, la astucia, el poder de seducción, la naturaleza confusa del honor, la vanidad, valores  representados por el auténtico director de escena, Setephen Meyers (Ryan Gosling), encargado de organizar la función y esconder los trapos sucios. El propio cartel que publicita la película define el espíritu de la venta del poder al ciudadano: un rostro dividido en dos: el hombre dotado de las virtudes que exige el electorado, como paradigma de efectividad, y el auténtico 'lobo' en la sombra, que realiza los trabajos sucios y trabaja en su propio provecho. George Clooney define su película como el  viaje personal de un hombre joven que aún mantiene su idealismo y muestra de qué manera está dispuesto a vender su alma con tal de poder ganar. Al mismo tiempo advierte de que la privacidad es  sólo una ilusión en la época de la expansión de las redes sociales y las videocámaras, cuya consecuencia es que todo lo que se escribe o se dice, tarde o temprano saldrá a la luz pública y será tergiversado, acabando con la sensación de impunidad de muchos políticos. Deja a la elección de la gente la decisión de quién es Bruto, Casio o Julio César. Si es Stephen Meyers (Ryan Gosling) quien ha ganado la batalla, su triunfo ha sido verdaderamente pírrico.

Pero si bien se considera  por ciertos críticos un filme muy exigente con el espectador, de ritmo lento e incluso pesado, ( a mí no me lo parece), dirigido a un público interesado en la lucha por el poder, los juegos malabares de los políticos  responden al desinterés de la mayor parte de la población, manipulada por grupos fácticos que  manejan a la perfección el consejo de Maquiavelo que elige el articulista: "En general, los hombres juzgan más por los ojos que  por la inteligencia, pues todos pueden ver, pero pocos comprenden lo que ven".El escándalo en torno al cual gira la trama es de tal complejidad y la madeja se enreda tanto, que es imposible desenmarañarla sin dejar profundas cicatrices en la fama de los implicados: becarias, hijas de hombres poderosos que mantienen relaciones con los miembros más prometedores de los equipos electorales, abortos, extorsiones, etc., en medio de una campaña electoral en cuyo epicentro se encuentra la religiosidad de dirigentes y votantes . Este es el caldo de cultivo de la manipulación y la consecuente corrupción, en la que valores como la honestidad, la integridad, la amistad o la lealtad ceden ante la ambición que  acompaña al poder. El film se abre con un primer plano de Stephen Meyers revisando el discurso del candidato, Mike Morris (George Clooney),  y   dando los últimos toques a la puesta en escena de un debate televisivo en el que interviene su jefe,  un  joven lleno de ilusión que comparte el ideario de hombre para el que trabaja. Cierra con otro primer plano que nos lo muestra con la triste expresión del que ha perdido la inocencia y la ilusión, precedido de una entrada en campo seguida  de una becaria a la que sigue la cámara hasta  que contacta con Ben Harper (Max Minghella), que anuncia que nada ha cambiado y que la historia se va a repetir con una víctima más que probable: él  propio Stephen. La periodista interpretada por Marisa Tomei es el paradigma de que el concepto de amistad no se puede relacionar con la prensa. Unas veces se gana y otras se pierde, y hay que saber aceptarlo.


 George Clooney interviene en el debate de manera inteligente y comprometida, como ocurrió  en  Buenas noches, y buena suerte, título en el que profundizaba precisamente en la denuncia de lo que ocurre en la trastienda de los medios de comunicación y las presiones de los grupos de poder. Si se le pregunta si algún dia piensa utilizar su popularidad para iniciar una carrera política,(no sería el primero; recordemos a Reagan o Schuasneger), el director  sabe que es más efectivo revolucionar el mundo desde la pantalla, con historias que lleven al debate o la reflexión, favorecida en este caso  por la creación de un candidato ficticio, que no aglutina a los votantes del partido o facción. Después de ver la película se entiende perfectamente la razón por la que George Clooney prefiere mantenerse en el lugar que ocupa: "Me encanta poder decir exactamente lo que pienso sin tener que darle explicaciones a nadie".


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