Comportamiento perturbado. David Nutter.

Cartel, fotografías, ficha técnica, sinopsis, trailer (Pinchad aquí)

Comentario:

David Nutter procede del mundo de la televisión en el que se hizo célebre por dirigir episodios de series televisivas, como The X-Files, pilotos y algunas entregas de sagas tan famosas como 'Hermanos de sangre' de la que dirigió la cuarta parte, trabajo por el que obtuvo un premio Emmy a la Mejor Dirección de Miniserie, Película o Especial Dramático, 'únete al club', un capítulo de Los Soprano' ; estuvo al frente de cuatro episodios de 'Enturega' para la HBO, etc. El único largometraje que ha realizado ha sido Disturbing Vehavior/Comprtamiento perturbado, en 1999.

Las dos crónicas que nos han llegado del film han sido de dos comentaristas de 'El País' que, aunque con matices, crean una opinión muy negativa de este título, que  siguen sus lectores. Miguel Ángel Palomo sentencia que : "Aunque un tanto inquietante, no explota a fondo tan interesante premisa argumental." Para Augusto M.Torres es simplemente una película disparatada, una sucesión de sustos torpes. Una crítica muy poco profesional que no se molesta en argumentar sus descalificaciones, por lo que la crítica queda reducida a la expresión del gusto de quien opina.

Con las opiniones que se expresan en los periódicos, ocurre como con las tertulias televisivas: que. en demasiadas ocasiones, quien opina desconoce no sólo el lenguaje visual al que se enfrenta, sino el tema que constituye el backgroun del film . Cualquier docente al que le interese verdaderamente su profesión, conoce las diferentes tribus que cohabitan en un aula, claro que no se puede pasar por alto la diferente idiosincrasia de los pueblos y su grado de evolución. Los skaters de Paranoid Park de Gus Van Sant, o los que practican el parkour, o los frikis y nerds son más abundantes en los países anglosajones que en los mediterráneos- La clasificación que realiza el rebelde Gavin Strick (Nick Stahl) es conocida por el público europeo, gracias, sobre todo a las películas.

"En este instituto"- dice- " hay un sistema de clases ": 'los motoracas' o moteros, cuyo mundo se reduce a los lubricantes y Lucky Strike. Su música preferida: los Allman, Springsteen , rock cláisco; droga: cerveza barata. Son gente poco exigente, gente que pierde aceite. Los microgenios o microchalados, son niños.prodigio y otros rastreros, Música preferida : el sonido del PC Apple al arrancar, droga favorita: Stephen Hawking y una taza de te el sábado noche. Los skaters llevan bombachos y gorros de lana; hacen equilibrios en plan suicida por tuberísas, muros y cantos verticales.Música preferida: el golpe de una lata vacía. Droga: Éxtasis. Los  franjas o robots azules constituyen el grupo de la comunidad, los niños buenos. Hacen ventas benéficas y le besan el culo a los adultos. La versión local de Manson o  J.O.Simpson,

Tras la primera secuencia, en la que se produce una presentación radical de los personajes, entramos en un instituto americano, más conocido por el público joven de cualquier parte, que incluso sus instituciones educativas propias: autobuses de transporte amarillos, largos y amplios pasillos populistas, muy frecuentados por los alumnos, cuyas paredes están cubiertas de las célebre taquillas, que se van imponiendo en todo el mundo. Poco a poco se van desgranando las características del género, drama o comedia juvenil ubicada en los centros educativos, donde se forjan la mentalidad y la personalidad de los jóvenes, un poder que todos se disputan desde las diferentes ideología y sectores laicos o religiosos. Quien controla la educación controla el futuro, como se encarga de demostrar David Nutter, con la mayor eficacia visual, en la última imagen del film.

Se puede discutir la oportunidad o maestría con la que maneja el director ciertas metáforas y usos trasladados del lenguaje audiovisual, con múltiples referentes de otras películas en las que es protagonista  la manipulación de las mentes, llegando a prácticas agresivas como la lobotomia, pero es evidente que no es un film juvenil que busca entretener a los adolescentes, sino que lleva implícita una denuncia de los padres y los profesores, que crean modelos de jóvenes ¡buenos¡ y sumisos, en el sentido latino y shakesperiano del término, (os boni. los optimates,a  cuyo estatus todos los adultos aspiran ) que van a ganar una batalla pírrica contra sus adversarios, aunque Nutter deja que sea el espectador quien saque sus propias conclusiones: una cinta sin final feliz, que abre muchas incertidumbres.