La bella y la bestia. Jean Cocteau





Ficha  técnica:


Título original:  La Belle et la Bête-
País: Francia.
Año de producción: 1946.
Duración: 96 minutos aprox.

Guión y dirección: Jean Cocteau.
Historia, diálogos y puesta en escena de Jean Cocteau, basado en el cuento de Jeanne -Marie de Beaumont..
Dirección de Fotografía: Henri Alekan. Operadores de las cámaras: Henri Foucard y Yiquet Letouzey; Fotografía: Aldo.
Música: Georges Auric.; orquesta bajo la dirección de Roger Désormières.
Montaje: ClaudeIbéria.
Ilustraciones: Christian Bèrard.
Consejero técnico: René Clément.
Decorados: René Moulaert.
Regidor: Roger Rogelys.
Sonido: Jacques Lebreton y Jacques Carrère.

Diseño de Vestuario: Escoffier y Castillo, jecutados en la 'Maison Paquin'.
Maquillaje: Arakelian.

Producción: Andrè Pauluè.
Director de producciónE Emile Darbon
Compañías: Studios de St. Maurice; Laboratoios: G.M.Film. Distribuciçon: Discina (París)






Intérpretes:


Jean Marais
Josette Day
Mila Parély
Nane Germon
Michel Aurclair
Raoul Marco
Marcel André

Sinopsis:


Érase una vez un mercader arruinado que vivía  con su hijo Ludovico y sus tres hijas. Dos de ellas, Felicia y Adelaida, son seres egoístas que explotan a su hermana pequeña Bella. Un día, el padre se perdió en el bosque y llegó hasta un castillo. Allí encuentra una preciosa rosa y decide cogerla para Bella, entonces aparece el señor del castillo que le impondrá un duro castigo por su osadía.


Comentario:


'La bella y la bestia'  es la segunda película del poeta, novelista, dramaturgo, pintor, oculista, diseñador, crítico y cineasta francés, (la primera la realizó en 1930:' La sangre de un poeta' ), concebida para su joven amante Jean Marais, que realiza en el film un doble papel. Antes de entrar en el análisis de ka película, hemos de realizar algunas matizaciones de interés que nos sitúan en un plano bien diferente de aquel en el que el director nos pide cortésmente que entremos, en una imagen en la que el que canta la claqueta nos anuncia que comienza la segunda secuencia de 'La Bella y la Bestia', mientras se alza el brazo de Cocteau ordenando el comienzo de la acción. Tras escribir unos personajes en una pizarra los créditos iniciales, el autor imprime su firma, acompañada de la estrella de David.

A continuación, tras reconocer que : " Un niño cree  todo aquello que se le cuenta. Cree que por coger una rosa una familia puede hundirse en la tragedia. Cree igualmente que las manos de una bestia humana que mata pueden echar humo y que después esa bestia puede sentirse avergonzada ante la presencia de una joven que habita en su casa. Cree otras mil cosas ingenuas." A continuación se dirige al público y le dice que: " Es un poco de esta ingenuidad lo que yo os pido y para que nos traiga suerte a todos dejadme que diga unas palabras mágicas, el auténtico "Ábrete Sésamo" de los niños: "Érase una vez..." Jean Cocteau. Hasta aquí todo nos invita a, cubrirnos con ese manto de ingenuidad, hasta que nos adentrarnos en uno de los relatos más oscuros  de cuantas adaptaciones se ha hecho del famoso cuento, que nada tiene que ver con el que ha popularizado Disney para los niños o escribió Jeanne Marie de Beaumont para los más pequeños.

El film fue realizado en 1946, un año después de la guerra más sangrienta que ha asolado a lo largo de toda su historia a la vieja Europa, un holocausto que arrasó la poca inocencia que quedaba en hombres y mujeres que habían sufrido una cruel depresión económica que los arrojó a la miseria y el paro,y luego a dos cruentas guerras mundiales. Recordemos el cine de Bergman, el teatro de  Bertolt Brecht, el cine de  Fritz Lang, los doctores malignos que imaginaron todos ellos, etc.. Al ambiente general se unen las reticencias que muchos muestran en relación con la actitud de la burguesía francesa y la intelligentzia parisina, que colaboraron con los invasores. Riding llama a Jean Cocteau "mariposa social", entre otras cosas porque en 1943 escribió: "A ningún precio debe uno permitirse ser distraído de cosas serias por la dramática frivolidad de la guerra." No sólo protagonizó escándalos, sino que puso en riesgo a su amante, el actor Jean Marais, Una actitud, al parecer, muy diferente a la de André Gide, que , terminada la guerra, se alejó de París y se arrepintió de haber publicado extractos de sus diario en la Nueva Revista Francesa de Drieu La Rochelle, en el que, entre otras cosas publicó: “Mi tormento es aun más profundo: viene asimismo del hecho de que no puedo decidir con seguridad que lo correcto está en este lado y lo incorrecto en el otro.” El escritor Jean Guéhenno y el periodista Jean Galtier-Boissière mostraron públicamente su indignación contra estos intelectuales.(1)

Albert Thibaudet escribió que, del mismo modo que hay seres que no salen del sueño cuando despiertan, los hay que no salen de la infancia cuando han crecido. Cocteau parece haber reconocido a unos y otros, según  afirma  en obras como  'Los Infantes Terribles'. Cuando entramos directamente en el film, nos encontramos con elementos   propios del cuento ejemplar y la literatura clásica de tintes góticos, que, a pesar de la indumentaria de auténtica princesa de la protagonista, al abandonar su hogar arruinado, en el que se hacinan cuatro hijos, de los cuales tres, dos chicas y un varón , son unos auténticos parásitos, deja a un padre  que lo ha perdido todo y cae en manos de los usureros, como el protagonista de 'El mercader de Venecia'. Un 'pacto con el diablo' (en este caso la bestia) a la que ofrece la mejor de sus descendientes, Bella, es la única esperanza de la familia.

La entrada en el territorio del monstruo está cargada de iconografía surrealista de carácter onírico, mas cercano a Dalí y Magritte que a Miró,  simbología freudiana y signos mistéricos de poderes atribuidos a los magos y por definición a cualquier movimiento secreto, como el espejo, la rosa, la llave, el guante y un caballo mágico llamado 'Magnífico', cuyo cuerpo, cuajado de brillantes adquiere un brillo especial. Estos elementos dotan de cierto carácter siniestro y gótico la adaptación de Bella al espacio del señor de las tinieblas que pierde su fiereza natural cuando se encuentra cerca de la joven, capaz de tornar al monstruo en un ser sensible a través del amor a la belleza que alterna con la satisfacción de sus necesidades e impulsos más sanguinarios.

Jean Cocteau se muestra como un magnífico adaptador del lenguaje escrito al audiovisual, logrando en este film un epitome de la sensibilidad cultural europea, manifiesta en la escritura, la pintura, el cine o la fotografía, una seria competidora de las artes plásticas. A lo largo del film se multiplican los referentes culturales del viejo mundo de antes, durante y después de la guerra. Un final más oscuro que el enigmático desarrollo  del film y que plantea muchas cuestiones que no debemos resolver aquí para no hacer el temido spoiler.



(1)El mito de la Fránce Résistante. Andrea Martínez Baracs.Letras Libres.
(2) Los Infantes terribles. Jean Cocteau. La Vaca mariposa.


Podéis encontrar la película entera en Youtube.






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