The lovely Bones. Peter Jackson. Comentario.


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Ficha técnica, sinopsis, comentario, carteles y trailer (Pinchad aquí)

Crítica:



The Lovely Bones es un film sobre la muerte, sentida como pérdida, frío, ausencia, terrible cuando se trata de una niña, Susie Salmon (Saoirse Ronan), narrada por la joven muerta. El amor de su familia los ata a su recuerdo, iniciando un viaje de venganza, especialmente el padre y la hermana menor, con consecuencias indeseadas. 

El asesino, un hombre creativo que construye casas en miniatura, un cazador en serie, que domina el arte de la ocultación, tiende trampas a sus víctimas a las que observa sin ser molestado por la policía por falta de pruebas contra él. El contacto entre ambos mundos, el terrenal y el sobrenatural, permite a Peter Jackson la introducción de imágenes surreales que pasan de un universo onírico que recuerda en ocasiones a Magritte, resplandeciente, luminoso y muy estético, a otros góticos e inquietantes. Un mundo de esperanza, de respeto de los comerciantes del morbo, se abre para los miles de niños cuyas vidas fueron segadas a temprana edad. 

Susie, comprobados los efectos devastadores del odio y la venganza, no puede descansar en paz hasta que se haga justicia, pero la vida debe continuar para los que siguen en este mundo. A veces el destino, o lo que cada espectador quiera imaginar, es el que salda las cuentas. 

La crítica ha sido desigual. En todo caso mantiene la tensión y hace un homenaje no siniestro a tantos niños y niñas víctimas de asesinos desaprensivos, sin apelar a los bajos instintos. En realidad el film contempla un crimen sin resolver, un cuerpo que nunca aparece y que genera las más negras conjeturas en el seno de la familia ; Peter Jackson, mediante el recurso a la ficción, al surrealismo de las imágenes, busca un objetivo cinematográfico: hacer partícipe al espectador a través de Susie Salmon de unos hechos que los protagonistas desconocen . La mayoría de las tristes víctimas, pre-adolescentes, son de gustos frikis, les encantan los colores vivos que les recuerdan a sus brillantes juguetes de plástico, los horrendos tules de colores, y lo más kitsch que un adulto pueda asimilar, por lo que no debe extrañar cómo imagina su universo después de su muerte; la visión cambian cuando penetra en el oscuro santuario del sociópata en el que pierde la inocencia y todo se torna gris con la llegada del odio y el deseo de venganza. 

Puede que muchos críticos lo hubieran hecho mejor, pero el film llena ese hueco, ese pozo profundo de desesperación en el que se sumergen los afectados por las desapariciones de niños que nunca se encuentran,y que gracias a la tele-basura y la prensa amarilla se convierten de pronto, no sólo en víctimas, sino en 'niños muertos', como dice Susie. Peter Jackson les da vida, y una voz, en la ficción, para comunicarse con el espectador. Todos esperan que cuando esa caja caiga por las paredes del sumidero, que va a ser tapado con tierra , se rompa y el asesino sea descubierto , pero ese no es lo que pretende el director, independientemente de lo que en su día escribiera Alice Sebold; si bien se venga del asesino, no lleva la paz al seno de la familia, que deberá aprender a vivir con esa incógnita.

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