Noches en la ciudad. Bob Fosse.





LAS AVENTURAS DE UNA CHICA QUE DESEABA SER AMADA


Ficha técnica:



Título original: Sweet Charity
País: Estados Unidos.
Año: 1969.
Duración: 148 minutos.


Dirección: Bob Fosse.
Guión: Peter Stone, basado en 'Nights of Cabiria' de Federico Fellini, Tullio Pinelli y Ennio Flaiano.
Casting:
Dirección de Fotografía: Robert Surtees, A.S.C. Tecnicolor; filmado en Panavision.
Música: Cy Coleman; letras: Dorothy Fields; supervisor y director: Joseph Gerhenson.
Editor: Stuart Gilmore.
Directores artísticos: Alexander Golitzen & George C.Webb.
Decoración del set: Jack D.Moore.

Diseño de Vestuario: Edith Head.
Maquillaje: Bud Westmore.
Estilista de peluquería: Larry Germain.
Cosméticos: Cinematique.
Peluquería Miss MacLaines: Sidney Guilaroff.


Productor: Robert Arthur.
Productores musicales: Fryer, Carr & Harris.
Compañías productoras: Universal Pictures.


Intérpretes:


Shirley MacLaine: Irma,
John McMartin: Oscar, 
Chita Rivera: Nicky,
Paula Kelly: Helene,
Stubby Kaye: Herman,
Barbara Bouchet: Ursula,
Ricardo Montalban: Vittorio,
Sammy Davis Jr.: Big Daddy,
Suzanne Charny: Dancer,
Alan Hewitt. Nicholsby, 
Dante D'Paulo: Charlie,
Bud Vest; Bailarín,
Ben Vereen: Bailarín,
Lee Roy Reams,
Al Lanti: Bailarís,
John Wheeler, Leon Bing...


Sinopsis: 


Shirley McLaine da un auténtico recital interpretativo en este espectáculo musical basado en el gran éxito de Broadway de Neil Simon. El director Bob Fosse. el director nos cuenta la historia de Charity Hope Valentine, la azafata de  music hall, una chica de alterne que sueña con vivir un romance a la antigua usanza pero que le entrega su corazón a un hombre equivocado detrás de otro, MacLaine se une a un reparto de estrellas del musical como Chita Rivera, Sammy Davis Jr., Ricardo Montalban y Stubby Kaye en esta película llena de vibrantes números musicales.


Crítica:



El director de 'Cabaret' (1972), hijo de un actor y cantante estadounidense y de una irlandesa, debuta tras las cámaras con este film, 'Noches de la ciudad', un 'remake' de 'Las noches de Cabiria' de Fellini (1957), en la que Shirley MacLaine da la réplica a Giulietta Masina en el film dirigido por su marido, que recibió múltiples premios y el aval de los top critics occidentales y de los creadores de opinión de los periódicos españoles. Mas la americana no está a la altura de la italiana, a pesar de números musicales con bailarines de primer orden, que no pueden impedir que la puesta en escena no se desgarre con el paso del tiempo, ni logre la intemporalidad de los filmes de 'Un americano en ParísMelodías de Broadway (1953)de Vincent Minnelli (1951); 'Cantando bajo la lluvia(1952), o '7 Novias para 7 hermanos' de Stanley Donen (1954). 





 Shirley, que soñaba de niña con ser bailarina, demuestra que de algo le sirvió la formación infantil, y a pesar de sus escurridizas formas, destaca en medio de un elenco de actrices mayores, caducas, que huelen a sudor y a perfume barato y que entretienen en un antro de poca estofa a unos clientes maduros que no disponen de cash para frecuentar escenarios más elegantes. Pero la juventud de la estrella, entonces de 33 años, no es decisiva para ayudar al espectador a superar el ambiente oscuro y turbio de todo lo que rodea esta historia distópica  de la caída reiterada  de un ser humano y su deseo de levantarse y seguir luchando. No hay happy end, sino un reconocimiento de la dureza de la vida y de la condición del ser humano y sus prejuicios que pesan más que su deseo de amar y ser amado; duele más ser depreciado , marginado y ninguneado.




El personaje de Charity emula a Cabiria , una prostituta que ejerce como tal en uno de los barrios más pobres de Roma, y que sueña, sin embargo, con encontrar el amor verdadero, un hombre que la aparte de la calle y a quien pueda entregarse en cuerpo y alma. Su bondad y su ingenuidad la convierten en víctima propiciatoria de sucesivos vividores que se aprovechan de ella, le roban y la golpean. A pesar de sus fracasos, recobra la esperanza una y otra vez. Todo parece cambiar cuando abre su corazón a un tímido contable que le propone matrimonio.Esta es la sinopsis del film de Fellini, que podría ser perfectamente la del de Bon Fosse. No es la primera vez que Shirley McLaine interpreta un papel parecido, -recordemos Irma la Dulce ´ de Billy Wilder,  1963, casi trece años después-, pero el personaje de Fosse  está dotado de mayor ignorancia y vulgaridad, a la vez que de una inocencia que roza la estupidez, aunqe todo ello la convierte en un ser vulnerable que se gana la simpatía del espectador. Años más tarde Woody Alle repetiría el esquema de una mujer desempoderada, un ama de casa capaz de levantarse del suelo cada vez que le rompen el corazón y se da de bruces contra él, con un resultado más digno de ser recordado: 'La rosa púrpura de 'ElCairo'.

Quien esté interesado por ver descender bellas y perfectas vedettes por una escalera, rodeadas de las plumas que hicieron famoso al director, y un publico envuelto en pieles, destilando glamour, esta no es su película. Ni números brillantes, n mujeres espectaculares, sino pobres perdedoras.


Comentarios

Entradas populares