Mutación asesina. Ficha técnica y crítica.




Ficha técnica:


Título original: The Borrower.
País: Estados Unidos.
Año: 1991.
Duración: 90 minutos.

Dirección: John MacNaughton.
Guión:  Mason Nage &  Richard Fire, basado en una historia de Mason Nage.
Casting: Jaki Brown.
Dirección de Fotografía: Julio Macat, Robert C.New.
Música: Ken Hale, Steven A.Jones, Robert McNaughton.
Edición: Elena Maganini.
Dirección artística:
Coordinador de especialistas: Doc Duhame,
Director artístico: Jan Bergstrom.

Diseño de producción: Theda Deramus.
Maquillaje: William Sheally; maquillaje de efectos: Kevin Yagher Productions.
Departamento de peluquería: Ron Pipes II

Productor: R.P.Sekon E, Steven A.Jones.
Productor ejecutivo: William H. Coleman.
Productor en línea: Elliot Rosenblatt.
Diseño de producción
Compañías productoras: Canon Group/ Visión Pictures Inc.


Intérpretes:


Rae Dawn Chong: Diana Pierce,
Don Gordon: Chasles Krieger,
Tom Towles: Bob Leney,
Antonio Fargas: Julius Caesar Roosevelt,
Neil Giuntou: Sctuy,
Larry Pennell: Capitan Scarcelli,
Pam Gordon: Connie,
Tony Amendola: Dr. Cheever.: Borrowen/Human.

Sinopsis: 


Un alienígena, condenado por sus crímenes en su planeta natal, es enciado a la Tierra. Pero, después  de una explosión se transforma en un ser humano, aunque sin cabeza.


Crítica:


John MacNaughton. se enfrenta a un proyecto con vocación de culto y bajo presupuesto, aunque no tanto como parece, de terror. Un cine undergroud que va dirigido a un público muy especial, que llena las sesiones golfas, especialmente en Estados Unidos, a las que acude a reventar la noche con imágenes bizarras y diálogos idiotas, que no buscan, en ningún momento la verosimilitud. Más tan pronto la proyección comienza su recorrido el espectador observa que no llevan malas cámaras, que gozan de una ficha técnica respetable, y de algunos actores con caché en su elenco, generalmente desconocido. En este caso, la actriz 'invitada' es Rae Dawn Chong, que que debutó en  1985  en la película que dirigió  de Jean Jacques Annaud, 'En busca del fuego', trabajó en 'El color púrpura' (1985) de Steven Spielberg, y contaba con una bagaje de más de veinte películas en su haber; también ha trabajado en varias series de éxito de la televisión estadounidense.

Dicho esto ¿a qué se enfrenta el espectador? a un film que deliberadamente no tiene pies ni cabeza, (sobre todo lo segundo), y estos es precisamente lo que caracteriza al cine de exploitation, alguno de cuyos realizadores  ha recibido sendos homenajes de dos cineastas destacados: Ed Wood, a cargo de Tim Burton, y Tommy Wiseau de James Franco, en la reciente 'The disaster Artists' (2017), que divulgó este fenómeno a un público más amplio. Una y otra han sido un éxito de público.

Nada de lo que ocurre en torno al alienígena condenado a convertirse en humano sin cabeza, tiene lógica; ni lo que hace, ni lo que le hacen, ni la indiferencia con la que transeúntes y colegas que van tan zumbados que apenas advierten que, al lado de este personaje, el monstruo de Frankenstein presentaba el aspecto reluciente de la Barby. Como elemento cohesionador de este barbarídad subyace un thriller con policías, que nunca se acaban de enterar de nada, ya que, como dice uno de ellos la sociedad se encarga de fabricar tantos despojos humanos descerebrados, que, a pesar de que se reunen, a veces, a veces, en grupo para dormir, donde encuentran un pequeño cobijo, pasan desapercibidos. Incluso, en demasiadas ocasiones, los viandantes ni siquiera miran cuando han quedado en un pre-coma etílico en medio de las aceras,  brodeándolos sin prestar atención para seguir caminando. No es extraño que no se percaten de su apariencia. Este es el hilo conductor de esta historia, que probablemente también pase despaercibido.





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