El cumpleaños de Ariane.

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Ficha técnica:

Título original: Au fil d'Ariane.
País: Francia.
Año: 2014.
Duración: 100 minutos.

Dirección: Robert Guédiguian.
Guión: Robert Guédiguian y Serge Valletti.
Diseño de Fotografía: Pierre  Milon.
Música:  Eduardo Makaroff, Christoph Müller.
Edición: Amelle Mahé, Bernard Sasia.
Director artístico: Michel Vandestien.

Diseño de Vestuario: Juliette Chanaud.
Jefe departamento de maquillaje: Mayté Alonso.

Productores: Marc Bordure, Robert Guédiguian.
Compañías. Productoras

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Intérpretes:

Ariane Ascaride : Ariane,
Jacques Boudet :  Jacques,
Jean-Pierre Darroussin : el chófer de taxi,
Anaïs Demoustier : Martine / La comediante,
Youssouf Djaoro : el vendedor de  souvenirs,
Adrien Jolivet : Raphaël,
Gérard Meylan : Denis,
Lola Naymark : Lola,
Más créditos en Imdb

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Sinopsis:

Hoy es cumpleaños de Ariane, pero ella se encuentra más sola que nunca en su casa. En su mesa hay un pastel con velas encendidas, pero le falta lo más importante: los invitados. En ese momento, decide iniciar una aventura que cambie su vida.

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Críticas:

La situación que estamos viviendo está despertando todos los fantasmas que dominan bajo sus tumbas y ahora se han puesto en marcha, da la sensación de que más que para ayudar, para tomar el poder que no consiguieron en su tiempos: los liberales, que han observado que la agresividad les favorece se visten de neocom, zombies posmodernos; los anarquistas, que llevan las de perder y andan como pollo sin cabeza, precisamente porque renuncian a un liderazgo y acaba cayendo bajo el peor de todos; los marxistas, que dominaron el mundo y se lo respartieron con el cristianismo, y los socialdemócratas, que convirtieron Europa en la envidia del mund con el 'welfare'o, mejoraron las condiciones de los europeos, que invirtieron en bolsa (como pequeños accionistas, sin voz ni voto, claro) y ahora los ciudadanos les dan la espalda. ¿La historia se repite? No, como ha demostrado la humillación de los griegos, por lo que ellos llaman la troika y antes se llamaban simplemente los capitalistas o dueños de los medios de producción, aunque los hechos parezcan los mismos, las condiciones en que se dan son muy diferentes. En este contexto cada uno se mantiene, inflexible, en su postura y el resultado es caótico y variopinto, mientras la lucha por el poder se extiende como una guerra sin cuartel, en la que un hombre que recoge cartones para soportar el frío  puede pertenecer a la casta, según a quien vote, mientras otro que invierte en Bankia y lleva a sus hijos a la escuela concertada puede ser más que un progre un quasi-revolucionario En este contexto los nostálgico se vuelven hacia un cine como el de Guédiguian. Hoy todo interesa y quizá no estaría mal arriesgarse y ver que nos cuenta el cineasta frandés.

Javier Ocaña saluda con cierta complacencia este film intimista de Guédiguian: "Deliciosa en su primera mitad, y algo dispersa en la segunda, donde las disquisiciones alrededor de la prostitución no acaban de captarse, El cumpleaños de Ariane acaba sin embargo con un giro que no por esperado resulta menos luminoso. Un desenlace de sonrisa de oreja a oreja que devuelve la vitalidad a un director que, incluso en una especie de Ariane en el país de las maravillas, con homenaje a las canciones de Jean Ferrat, sigue fidelísimo a sus convicciones. Sobre el cine, la sociedad y la vida." (La pandilla de Guédiguian. Diario 'El País', 24 de julio de 2015).

Jordi Batlle la considera una película naïf y  cursi, que será bien recibida por los fans del realizador:"Guédiguian avisa al principio que lo que veremos es una "fantasía". O un sueño. O una canción de amor, desgranada por sus actores fetiches, a las esencias de su propio cine: melancolía, gente común solidaria y currante". (El cumpleaños de Ariane: Fantasía marsellesa. Diario 'La Vanguardia', 29 de julio de 2015).

Oti Rodríguez Marchante modera bastante su entusiasmo, no sabemos si la razón es cinéfila o ideológica, pero es irrelevante en este caso: "La filmografía de Robert Guédiguian, que es también la de su mujer, actriz o musa Ariane Ascaride, es tan reconocible como la guitarra de Clapton (¿o era la de Knopfler?), y sus películas son una mezcla de aromas a barriada marsellesa, compromiso político y social, troupe de actores propios y un deje naïf. El cumpleaños de Ariane trata, como todas, de su mujer, gran actriz, que aquí interpreta a una mujer que, acorralada por la soledad el día de su cumpleaños, salta la valla de su vida previsible y burguesa para correr una aventura entre surrealista y vitalista." (El cumpleaños de Ariane: El clan de los marselleses. Diario 'ABC', 24 de julio de 2015).

Esta semana los estrenos son, como mínimo aceptables y dirigidos, como siempre, pero ahora más a los jubilados y los adolescentes, que huyen de los chalets de sus padres o permanecen en las ciudades, ya que, por mucho que los cines den facilidades y bajen los precios, éstos son inaccesibles para quienes están sufriendo directamente la crisis. Un matiz. lo que ahora muchos llamaban 'Naïf' antes se llamaba 'Utópico, hay que recordar cuando Fourier dividió la sociedad en falansterios y esperaba seducir a  un millonario para que financiase sus proyectos ¿Nos está ocurriendo ahora lo mismo?