Las confesiones. Crítica.





Ficha técnica, sinopsis, críticas, cartel y trailer. (Pinchad aquí)



Crítica:


De manera confusa, el director de 'Viva la libertà' (2013), una película mucho más lúcida que no deja indemne a los electores que se sienten atraídos por las ideas más poéticas y para muchos más locas, vuelve a insistir en este aspecto utópico que anima el espíritu de los hombres y mujeres de formación humanística, artistas de toda clase, escritores, poetas, religiosos, que, imbuidos de una no aceptación del mundo con sus imperfecciones y la búsqueda de un ideal, los arrastra con frecuencia a la desesperación y, en ocasiones extremas, al  suicidio. Las contradicciones entre hombre fríos, pragmáticos, que buscan el beneficio a cualquier precio, y aceptan las fallas del sistema, (la pobreza y el sufrimiento ) explotan en la superficie cuando se suicida un magnate, el Presidente del Fondo Monetario Internacional,  en la reunión de un hotel de Alemanía de la Cumbre del G8 en 1986, en un medio reducido, claustrofóbico, en el que la exhibición de los zapatos en el pasillo de la institución hotelera favorece las relaciones entre este grupo de gestores del dinero de todos y una escritora de cuentos infantiles, un músico y un monje cartujo italiano, interpretado por Toni Servilio: Roberto Salus, que cambia la norma no escrita seguida hasta el momento y que destruye uno de los principios que rigen la economía: la certidumbre, por mucho que se base en augurios sin fundamento.

Frente a ellos unos políticos, que han dejado de ser tales para ser sustituidos por empresarios alejados del pueblo y sus aspiraciones y esperanzas, que se reúnen en estas cumbres en las que participan muy pocas personas y actúan como gurús, lanzan rumores y augurios que desplazan los capitales de un lugar a otro del universo, llenando y vaciando los bolsillos de la gente de forma arbitraria. Humo que responde a cuentas no incluidas en los balances, paraísos fiscales, apalancamientos, etc. El suicidio de uno de estos grandes hombres desconcierta al resto, destruyendo, como hemos dicho antes, las reglas del juego, a pesar de que todos son conscientes de que este grupo reducidísimo de hombres y mujeres lanzan los rumores, las valoraciones de las agencias de calificación y otras medidas para dirigir la economía en un sentido u otro, hundiendo unos países y favoreciendo a otros, algo que está en la agenda de los que forman parte del G8, y que puede arruinar la ruptura del mencionado principio de incertidumbre.

Llama la atención la decisión del Presidente del Fondo Monetario Internacional de introducir en el grupo a un religioso  italiano como su confesor, rompiendo con la tradición de  esta pequeño grupo de ejecutivos que dirigen las altas fianzas mundiales, acostumbrados a que esta función fuera realizada hasta el momento por pastores alemanes, más pragmáticos y que no sienten repugnancia ante el hecho de revelar los secretos que les han confiado cualquiera de los miembros en confesión, un detalle que el público desconocía hasta el momento. La introducción de un elemento de extrañamiento,- la poesía y la religión, la moral y ética, y el tratamiento cíclico del tiempo en un bucle sin solución de continuidad- es decisiva en en un relato que  caracteriza la forma de contemplar la política de Roberto Andó, bastante peculiar y poco convencional. Una pieza más del puzzle para entender no el funcionamiento de la economía en la crisis del 2008 que el sector financiero ha dado por concluida, sino del estallido de las siguientes burbujas que se están hinchando y que pronto romperán sus costuras.






Comentarios

Entradas populares