24Hours Party People.Michael Winterbottom.




El film 24Hours Party People de Michael Winterbottom recrea un momento de la vida y muerte (en algún caso) de los componentes de tres grupos británicos: Joy División, New Order y Happy Mondays, y de los cantantes Ian Curtis y Martin Hannet, cuyo telón de fondo es la Factory Records y los locales de conciertos, La Factoría primero y La Hacienda más tarde, bajo el paraguas del periodista de TV Tony Wilson.

Sinopsis.


En el año 1976, el presentador de Granada TV Tony Wilson descubre, tras presenciar un concierto de Sex Pistols, que su verdadera vocación reside en el mundo de a la música. Funda un sello discográfico, Factory, y un local para actuaciones, La Factoría, (en una segunda etapa La Hacienda) convirtiéndoe en cazatalentos y promotor musical. El film narra la historia del espectacular ascenso de la discográfica Factory Records de Manchester, con grupos como Joy Division, New Order y Happy Mondays,que dará notoriedad a esta ciudad . Las drogas y el espíritu de camaradería y libertad que inspiró el proyecto dieron al traste con el mismo.

Todos los músicos conocen la dificultad de abrirse camino y concentrar al principio un público que no pertenezca a su círculo de amistades, principio que inspiró a Tony Wilson que siempre quiso trabajar con gente que conocía y en la que confiaba. Cuando descubre a Sex Pistols no hay más de cuarenta personas en la sala, hecho que desprecia y compara con la última cena de Jesús o el asesinato de César, el Idus de Marzo, los hechos de más trascendencia de la Historia que apenas presenciaron una docena de personas. Eran otros hombres y otros tiempos en los que ninguna 'Operación Triunfo' había llegado para demoler la creatividad.

Stiff Kittens, que pronto serán Warsaw, Joy División (nombre nazi) y al final New Order, Martin Hannet...En ese momento dos o tres personas controlaban la música en Manchester y no les gustaba el punck, que sólo se emitía en su programa. Cuando decide abrir su negocio de la música decide dar completa libertad de creación a los artistas, repartiéndose con ellos el cincuenta por ciento de los beneficios, lo que muchos consideran el gran error de Wilson.: los excesos y la anarquía que reinaba en este colectivo llevó a Ian Curtis, cantante de Joy Division ( al que Wilson llamaba el Che Guevara de la música) al suicidió y acabó con la vida de Martin Hannet a causa de un infarto provocado por sus adicciones. Pero el periodista no quiso ver ésto y se aplicó el lema de John Ford: Si tienes que elegir entre la verdad y la leyenda, elige la leyenda.

Ni los grupos ni la empresa ganaron nada, ya que todos los beneficios se los llevaba el éxtasis , con el que llegó además la violencia y la amenaza de cierre de los locales de música. Wilson siuguiendo el consejo de Plutarco a los césares, -Ten cerca a tus amigos, pero más a tus enemigos- , colocó a los camellos en las puertas. Al menos consiguió sacar la venta de droga del interior del negocio.

Shaun Rayder (TheMondays) les dió algo de dinero a ganar, pero sus excesos con los estupefacientes acabaron por convertirse en un problema. A pesar del fracaso económico de su aventura Tony Wilson se sintió orgulloso de haber hecho de Manchester una nueva Florencia en la que reinaban la música y el baile y su local era la catedral de la cultura del rave, en la que no triunfaba la música ni el músico sino el Dj; se beatificaba el ritmo y triunfaba el dance. Había creado su Madchester, en la que ser joven era 'celestial'. Su gran defecto heróico, que en realidad era una virtud, fue su exceso de orgullo cívico, su amor a su ciudad. La Hacienda había muerto en plena gloria por dificultades económicas, y por ello nunca iba a envejecer.

Un detalle curioso es la invención por Tony Wilson de la leyenda de cómo se financio la saga de James Bond: con los beneficio del broccoli, inventado por su productor Broccoli.



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