Moulin Rouge. Baz Luhrmann.


Pablo de Santiago y Jesús Orte, en su libro El cine en siete películas, describen el expresionismo cinematográfico, movimiento inspirado en Die Brücke (El Puente), con el que Ernst Kirchner y Erick Heckel dieron un giro al arte plástico practicado hasta entonces, como un forma de representación en la que predominan los colores saturados, las formas afiladas y grotescas; es el estilo elegido por Baz Luhrmann para expresar la emoción de los personajes de la forma más impactante posible y apelar a los sentimientos del espectador.

El expresionismo no pretende ser una manifestación del alma, sino el alma misma; mostrar la realidad vista desde el interior del personaje, eliminando el naturalismo. Los escenarios no captan la realidad sino que buscan perspectivas imposibles, de gran efecto simbólico y muy inquietantes. La luz y la sombra chocan produciendo contrastes violentos, los cuales, junto con las posturas de los personajes, a veces muy teatrales y los escorzos del escenario, producen en pantalla una enorme sensación de irrealidad. En el expresionismo cinematográfico los hechos no son nada y la forma es todo: sólo existe el estado anímico de la persona. Esta descripción de ambos autores, realizada en un libro muy bonito y recomendable, nos sirve de base para analizar un film musical controvertido, admirado por unos y denostado por otros.





Desde que la cámara entra acelerada en Montmatre, barrio de Paris, y penetra en el Moulin Rouge, todos los medios técnicos y humanos se ponen al servicio de la representación de la gran comedia del mundo, focalizada en un pobre escritor y una cabaretera, personificados por Ewan McGregor (Christian) y Nicole Kidman (Satine) cuyos primerísimos primeros planos pocas actrices soportarían. El mundo de la farándula y de la bohemia se interfieren, ambos hijos de la miseria; en el primero se vive a base de absenta, fuente de alucinaciones; en el segundo reina el glamur, que esconde la misma depauperación, cuya manifestación reprimida es la tuberculosis. La bella corista, que vive en un fantástico elefante, tapizado de adornos y brillantes luces, es deseada por hombres ricos y elegantes con sombrero de copa y luce en las noches del gran cabaret, lleva en su interior el mal que va a acabar con ella.





Dos momentos de gran expresividad son aquellos en los que un bailarín de tango, de voz acazallada danza ese baile macarra y amarrado a la compañera (de tango, tocar en latín), sugiriendo todo el mundo que hay detrás de estos hombres duros a los que la vida ha desprovisto violentamente de todo; otro es la secuencia final, en la que Satine muere en el escenario abatida por el morbo, pero el público es incapaz de disociar la ficción y la realidad. Coristas del can-can, pintores (entre los que se encuentra el gran cliente del Moulin Rouge, Toulouse-Lautrec), deformados con ojos de buey y otras lentes, en escorzos barrocos e imposibles y giros bruscos de las cámaras, crean el entorno para este amor tan imposible como los planos cinematográficos. El impedimento no se encuentra en padres exigentes, ni en situaciones personales de incompatibilidad, sino en una plaga apocalíptica: el hambre, hija de la pobreza.

Resulta encantador oir cantar a Ewan McGregor, y verlo sufrir por un amor apasionado, cuyos sentimientos vuelca en un relato,cuyo texto sigue el espectador en su máquina de escribir. Su desgracia es su fuente de inspiración, su vida se transforma en su ficción. El film es una adaptación de la Ópera de Verdi, La Traviata, y rinde homenaje al cine musical norteamericano y sus números irrepetibles, como el ascenso por escaleras de humo de Julie Andrews en Mary Poppins; ópera, teatro, cine y literatura se conjugan en este film de Baz Lhurmann.
Compartimos la opinión de Pablo Kurtz (Filmaffinity) de que tributa en cada fotograma un goce para los sentidos. Lamentamos disentir en este caso de Carlos Boyero, cuya pose de enfant terrible y su actitud provocadora nos encanta, aunque a él le proporcione disgustos. Eso es lo que supone decir lo que uno quiere en cada momento.



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