Borsalino. Jacques Deray.







Ficha técnica:

Título original: Borsalino.
País: Francia. Coproducción franco-italiana.
Año: 1969.
Duración: 125 minutos.

Dirección: Jacques Deray.
Guión:  Jean Cau, Claude Sautet, Jacques Deray y Jean-Claude Carrière; diálogo: Jean-Claude Carrière.
Director de Fotografía: Jean-Jacques Tarbès; Fotógrafo : Pierre Manciet.
Sonido: Jacques Maumont.
Música: Claude Bolling.
Montaje: Paul Cayatte.

Vestuario: Jacques Fonteray.
Maquillaje:: Michel Deruelle.

Productor: Alain Delon.
Director de producción: Pierre Saint  Blancat.
Productor delegado: Pierre Caro.
Paramount, Adel Productions




Intérpretes:

Jean-Paul Belmondo, Alain Delon, Catherine Rouvel, Françpise  Christophe, Corinne Marchand, Laura Adani, Nicole Calfan, Hélenè Remy, Odette Piquet, Mario David, Lionel Vitrant, Denis Berry, Jean Aron, André Bollet, Pierre Koulak, Yvan Chiffre, Arnoldo Foa, Daniel Ivernel, Cristian de Tilière, Julien Guiomar, Michel Bouquet.

 Sinopsis:

Cuando Roch Siffredi (Alain Delon)  sale de prisión. mide sus fuerzas con el compañero de su ex-amante François Capella (Jean-Paul Belmondo), pero pronto se asocian y, siendo unos raterillos de poco monta,  que realizan pequeñas estafas y tongos  en carreras  de caballos y  combates de boxeo,  dan un salto y se enfrentan a los capos de la mafia marsellesa. Persecuciones,duelos, amenazas y represalias  se suceden en las pintorescas calles  de la Marsella de los años 80.

Comentario.

El filme de Jacques Deray ha trascendido a lo largo del tiempo gracias a la música de Claude Bolling, que lo ha singularizado en el recuerdo de los espectadores y cinéfilos. El guión es uno de los más flojos de las películas de cine noir protagonizadas por Alain Delon, aunque es una buena crónica del desarrollo socio-económico francés, con esa calle de la Madelaine llena de prostitutas, los cafés-concierto modestos, nada idealizados, y la corrupción que imperaba en todos los sectores sociales, (policía, abogados, emprearios...). La mafia está en el origen de las grandes fortunas que controlan los mercados del pescado o de la carne; una vez conseguido un status económico, los orígenes de la fortuna importan poco, y los gángsters son saludados como héroes por el pueblo.

Las mujeres fatales, unas más que otras, son la compañía de los mafiosos; unas se casan con los Bocacce, los Marello, los Rinaldi; otras son sus compañeras. Ninguna de ellas se caracteriza por su peligrosidad o incitación a la violencia de los varones. Sólo son un florero, al que se respeta según su estatus. Lola es tratada como un ser inferior por los  protagonistas de este body-movie francés, en el que  la tobelokedatness  es propiedad de dos hombres  con buen cuerpo, y uno de ellos especialmente atractivo: Alain Delon, que se sienten atraídos mutuamente desde que se ven por primera vez.


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