La trampa del mal. John Erick Dowdle.













Ficha técnica:
Título original: Devil (AKA the night chronicles: Devil)
País:USA.
Año: 2010.
Duración: 80 minutos.
Dirección: John Erick Dowdle.
Guión:  Brian Nelson  basado en una historia de M. Night Shyamalan.
Música:  Fernando Velázquez .
Fotografía:  Tak Fujimoto.
compañía productora: Media Rights Capital/ Night Chronicles.

 Intérpretes:

 Chris Messina, Logan Marshall-Green, Geoffrey Arend, Bojana Novakovic, Jenny O’Hara, Bokeem Woodbine, Jacob Vargas, Matt Craven, Joshua Peace, Vincent Laresca .


Sinopsis.

Basada en una historia de M. Night Shyamalan. Un día cualquiera, cinco personas, que no se conocen, se quedan atrapadas en un ascensor de un gran edificio de oficinas. Muy pronto comienzan a suceder cosas extrañas y, poco a poco, se dan cuenta de que uno de ellos no es quien dice ser: es el mismísimo Satanás.

El film juega con los límites de la mirada del espectador, exprime la sugerencia y el fuera de campo y plantea una mecánica simple y seductora: varios personajes encerrados en un ascensor (lo que propicia la caída de las máscaras sociales ) y un rosario de apagones que alteran dicha coyuntura.(Alejandro Díaz. Cahiers du Cinema). Usa con brillantez la oscuridad total en pantalla y los personajes arquetípicos de los filmes 'B', y una tácita crítica a las prácticas del liberalismo capitalista, como la contratación de trabajadores poco cualificados temporalmente.

Comentario.

Dos interpretaciones entran en conflicto sobre lo que está ocurriendo en el pequeño receptáculo del ascensor: una metafísica de carácter religioso, versión satánica, y otra pragmático-policial, basada en unos acontecimientos ocurridos cinco año atrás. El  jefe del operativo policial, implicado en los acontecimientos del pasado,  va pidiendo una versión del posible relato de  lo que está ocurriendo a un guardia de seguridad del edificio, un sudamericano llamado Ramirez, defensor a ultranza del protagonismo demoniaco. Algo chirría en el guión y en la solución del conflicto, que no queda suficientemente explicado, del mismo modo que no está muy justificada la aparición de algún personaje secundario, como la novia de uno de los encerrados en el ascensor, que no aporta nada al desarrollo de la historia. La conclusión a la que llega  el agente es más incomprensible todavía: "Si existe el diablo también existe dios". Algún susto que pierde músculo por la repetición de situaciones; un espacio tan pequeño como un ascensor no da para mucho más.


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