Papillon. Franklin J.Schaffner.






Ficha técnica:

Título original: Papillón:
País: USA.
Año: 1973.
Duración: 150 minutos.
Dirección: Franklin J.Schaffner.
Guión: Henri Charrière, Dalton Trumbo, Lorenzo Semple Jr., basado en la novela "Papillon" de Henri Charrière.
Productor: Robert Dorfmann.
Música: Jerry Goldsmith.
Dirección de Fotografía: Fred J. Koenekamp.
Diseño de Producción : Anthony Masters.
Vestuario: Anthony Powell.
Maquillaje: Charles Schram.
Montaje: Robert Swink.
Producción: Robert Dorfmann y Franklin J.Schaffner.
Prouctor ejecutivo: Ted Richmond.
Compañías: Allied Artists,

Ficha artística:

Steve McQueen: Papillon
Dustin Hoffman: Louis Degà
Victor Jory:Indian Chief.
Don Gordon: Julot,
Anthony  Zerbe: Toussaint.
Robert Deman: Maturette.
Woodrow Parfrey:: Clusiot.


Sinopsis:

Condenado a cadena perpetua por un crimen que afirma no haber cometido, Henri Charrière (Steve McQueen), es enviado al exilio en las colonias penitenciarias de Guayana Francesa y la isla del Diablo. Conocido por su apodo de Papillon, debido al tatuaje de una mariposa que lleva en el pecho y que simboliza la libertad. Charrière dedica todo su tiempo y energía a escaparse con su amigo y compañero de cárcel Louis Dega ( Dustin Hoffman ). Tras 13 años de detención salvaje, su coraje y su fe indestructible lo llevarán a la libertad.

Comentario:


Franklin J. Schaffner construye la diégesis de un mundo sórdido, inhumano, creado por  hombres repetables, que construyen auténticos infiernos en los que recluir a aquellos otros que han infringido la ley, pero que la categoría de su delito (robo, falseamiento de documentos, y en algunos casos homicidio o asesinato ) no contemplan la pena de muerte. Estos presos se sacaban de Francia, país que usaba sus colonias, las Guayanas francesas, para aplicar castigos que no hubiera soportado el hombre civilizado europeo, como ocurre actualmente con Guantanamo.

El patio del penal estaba presidido por la terrible guillotina, que advertía que la muerte no estaba excluida de los castigos, ordenados por pulcros y aparentes 'hombres honrados', que gobernaban un mundo mucho más terrible que aquel al que querían proteger. La omertá y la ley del silencio protegían todos los robos y crímenes que se cometían dentro de sus muros. Entre los presos uno, Papillón, al que no se podía tener encerrado como tampoco a una mariposa. Condenado por un  delito que no había cometido, logró finalmente alcanzar la libertad, pero no  con procedimientos legales, que le estaban vedados, sino fugándose del penal.

Cuando las columnas de hombres partían hacia las colonias, en un viaje de dudoso regreso, el pueblo llano, la gente modesta, acudía a su paso y algunas mujeres exhiben imágenes de vírgenes y santos, rezando en silencio por los condenados. El final de muchos de ellos era la muerte en cámara lenta, un final precedido de todo tipo de ultrajes físicos y psicológicos, con el fin de arrebatarles cualquier sentimiento humano. Film muy duro, no apropiado para una tarde cualquiera.



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