Revolutionary road. Sam Mendes.

Ficha técnica:

Título original: Revolutionary road.

País: USA.

Año:  2008.

Duración: 114 minutos.

Dirección: Sam Mendes.

Guión: Justin Haythe, basado en una novela de Richard Yates.

Casting: Ellen Lewis y Debra Zane, C.S.A.

Música: Thomas Newman.

Director de Fotografía: Roger Deakins, A.S.C., B.S.C.

Producción: John N. Hart y Scott Rudin., Sam Mendes y Bobby Cohen.

Productores ejecutivos: Marion Rosenberg, David M. Thompson, Henry Fernaine.

Co-productores ejecutivos: Peter Kalmbach, Nina Wolarsky  y Pippa Harris.

Co-productores: Ann Ruark, Gina Amoroso.

Diseño de producción: Kristi Zea.

Edición: Tariq Anwar.

Vestuario: Albert Wolsky.

Paramount Vantage, Dramworks, SGK, BBC Films, Evamere Entertainment, Neal Street Production..

Intérpretes:

Leonardo DiCaprio:  Frank  Wheleer,

Kate Winslet: April Wheeler,

Kathy Bates:  Mrs. Givings.

Michael Shannon: John Givings,

Kathryn Hahn: Milly Campbell,

David Harbour: Shep Campbell,

Dylan Baker: Jack Ordway,

Richard Easton: Mr. Givings,

Zoe Kazan: Maureen Grube,

Jay O. Sanders: Bart Pollock,

Max Baker: Vince Lachrop,

Max Casella: Ed Small.

Premios:

 2008: 3 Nominaciones a los Oscar: actor de reparto (Shannon), dirección artística, vestuario

 2008: Globos de Oro: Mejor actriz drama (Kate Winslet). 4 nominaciones

 2008: 4 Nominaciones BAFTA, incluyendo mejor guión adaptado, vestuario.

 Sinopsis.

El film narra la historia de una pareja que vive en las afueras de Connecticut y deciden arriesgar todo por un sueño, dispuestos a romper con la rutina, pero  esta ilusión acaba separándolos.

Comentario.

 Leonardo DiCaprio y  Kate Winslet protagonizan un magnífico drama dirigido por Sam Mendes, una actualización de Madame Bovary de Flaubert   adaptada a la vida moderna, profundizando en la psicología de Frank Wheeler, en el fracaso de sus expectativas vitales y su inevitable pragmatismo. Su fracaso se extiende a  Mrs.Wheeler, una esposa insatisfecha, una aspirante a actriz que no admite su mediocridad y que  cifra todas sus esperanzas en la huida hacia el continente europeo. El problema no está  tanto en las condiciones externas, como en  ellos mismos : un joven desnortado, que se limita a seguir los pasos de su padre en una gran empresa en la que jamás había logrado destacar, sin sentir ningún interés por su actividad profesional ni por ninguna otra. Las situaciones de tensión entre ambos llega a hacerse insoportable en muchos momentos.

El film se ubica en 1955, en  Connecticut,y concretamente en una calle de nombre significativo, Revolutionary road, incrustada en un barrio de pequeños trabajadores autónomos, fontaneros, electricistas..., de casitas prefabricadas que dan un perfil específico a muchas poblaciones de la clase media baja  norteamericana. Las  primeras imágenes de la cinta muestran la  marcha  al trabajo de miles de hombres que  utilizan el ferrocarril como medio de transporte para llegar a sus puestos en las diferentes empresas, en las  que la figura de alguna mujer, entre tanto sombrero masculino, pone una ligera nota discordante. En  las oficinas, constituidas por grandes espacios y pequeños paneles que  separan las actividades de los empleados,   las féminas realizan labores de apoyo de sus compañeros, de secretariado, sin ocupar puestos de responsabilidad. La justificación de la insatisfacción de Mrs. Wheeler le viene por el discurso visual, que no sólo muestra el   insignificante papel de la mujer  en el sistema productivo, fuera del ámbito del hogar, sino  que se materializa en el gesto osco de la mujer y sus  brutales enfrentamientos con el marido. Al final podrán más sus contradicciones que el amor que se profesan; la casera que siempre los ha considerado 'especiales' y con más clase que el resto de vecinos, les denostará finalmente, en una sociedad que no admite el fracaso y en la que las revoluciones se quedan en nada. Los hombres, representados por el vecino de los Wheeler, atraídos por la independencia y actitud rebelde de April que invita a su marido a soñar, la desean, pero, desencadenado el drama, se sentirán reconfortados y seguros en  su  fortaleza, acompañados de  su débil y sumisa mujercita.