Terraferma. Emanuele Crialese.





Ficha técnica:

Título original: Terraferma.
País: Italia/Francia.
Año: 2011.
Duración:  88 minutos.
Dirección: Emanuele Crialese.
Guión: Emanuele Crialese yVittorio Moroni, según un argumento de Emanuele Crialese.
Dirección de Fotografía: Fabio Cianchetti. Color.
Música: Franco Piersanti.
Dirección artística: Paolo Bonfini.
Montaje: Simona Paggi.
Productores: Marco Chimenz, Fabio Conversi, Giovanni Stabilini y Ricardo Tozzi.
Compañías. Cattleya, Babe Film, France2 Cinéma.

Intérpretes:

Filippo Pucillo: Filippo,
Donatella Finocchiaro: Giulietta,
Beppe Fiorello: Nino,
Mimmo Cuticchio: Ernesto,
Timnit Tezare: Sara,
Martina Codecasa: Maura,
Filippo Scarafia: Marco,
Claudio Santamaría: El ejecutivo,
Pierpaolo Spollon: Stefano.

Premios:

2011:  Gran Premio del Jurado del Festival de Venecia.
2011: 3 Nominaciones David di Donatello: Mejor película, director y actriz (Finocchiaro)

 Sinopsis:

El fin contempla el éxodo masivo de ciudadanos tunecinos provocado por la revolución de  la Primavera Árabe hacia las islas del archipiélago siciliano  a cuyas costas llegan con frecuencia pateras procedentes de Libia y otras naciones subsaharianas. Las nuevas oleadas procedentes de Oriente Medio y Norte de África generaron intensos debates sociales en Italia a mediados de 2011. El protagonista, un joven de 19 años llamado Filippo, vive con su madre viuda y su abuelo, que ha abandonado la pesca y alquilan  habitaciones a los turistas para sobrevivir, hasta que un día encuentran en la playa una patera con inmigrantes a punto de naufragar.

Comentario:

No parece casual que coincidan en la cartelera dos películas como Alps (Giorgos Lanthimos, 2011) o Las nieves del Kilimanjaro (Les neiges du Kilimandjaro. Roger Guediguian, 2011) que, cada una a su manera, pretenden  reflejar una cierta deriva de la conciencia europea contemporánea. Terraferma tampoco es ajena a estas reflexiones (...) Crialese invoca un tímido humanismo que brota del fracaso de las ideologías, de la deriva de un mundo sin valores. En Terraferma la elección de ese camino implica un futuro tan incierto que se desdibuja como una barca en mitad del océano. (Roberto Alcover Oti. Terraferma. ¿Hacia una nueva conciencia (europea)?.Dirigido por...Junio 2012).

Nada resulta molesto en esta película concienciada, humanista y sentimental, pero tampoco hay nada que apasione, sostiene Carlos Boyero en el  Diario El País. (Filmaffinity). En la misma línea Fotogramas (número 2.025)  se afirma que en el film conviven dos películas a las que les cuesta caerse bien. La primera es  el retrato documental  de la vida de los pescadores sicilianos, un poco como si ' La terra trema' (1948) de Visconti hubiera sido filmada hoy mismo, azotada por las mareas negras de turistas que amenazan con convertir  a los hombres de mar  en guías turísticos de pacotilla. La segunda sigue el libro de estilo del cine social paneuropeo que denuncia la precaria vida de  la inmigración ilegal, y está a punto de caer en los típicos errores que cometen los que confunden la responabilidad ética con la mala conciencia.

Afirmaba Savater en Política para Amador , libro dedicado a su hijo, que quien se pide un hamburguesa cuando el avión en el que viaja se está cayendo es un idiota. Algo así sucede en amplios sectores, representados por la famosa cantante de ópera Montserrat Caballé que promocionaba  a su hija en La Casa de Campo en Madrid,  riendo a carcajada batiente, pletórica de toda la felicidad que cabe en su inmenso cuerpo, mientras el ministro de Economía anunciaba el rescate/secuestro de los españoles por parte de las instituciones financieras europeas. Este hecho demuestra las grandes diferencias con realizadores como Joe Cornish o Emanuele Crialese, cuyos filmes serán un testimonio impagable en el futuro; no importa el lenguaje elegido, más poético y surrealista en el inglés y más realista y acorde con el cinema verité europeo en el italiano, pues  uno y otro saben captar la esencia del sufrimiento humano que albergan las víctimas de los sistemas económicos y la infelicidad que les embarga.
 
El film parece fundamentarse significativamente sobre el  de Luchino  Visconti de 1948, cuyo título La terra trema posee cierta concordancia fonética con el actual y  parece haber inspirado el de Crialese. La obra de Visconti es la primera parte, el episodio del mar,  de una trilogía sobre Sicilia,  que  narra la historia de la lucha de un pescador  y su familia para liberarse de la explotación de los mayoristas de la pesca. Terraferma cambia la coyuntura económica y sitúa su historia en un momento de crisis global que se extiende a la pesca y la emigración del hambre hacia el todavía próspero continente europeo.


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