Buscando a Eimish. Ana Rodríguez Rosell.






Ficha técnica:

Título original: Buscando a Eimish.
País: España.
Año: 2012.
Duración: 85  minutos.
Dirección: Ana Rodriguez Rosell.
Guión: Ana Rodriguez Rosell.
Dirección de Fotografía:  Pau Mirabet.
Música: Antonio Escobar.
Montaje: Cristina Pastor.
Producción: Ana Rodriguez Rosell.
Diseño de producción:  Gustavo Ramirez.
Vestuario: Laura Renau.
Distribución:European Dreams Factory. Productora:  Jana Films.


Intérpretes:

Oscar Jaenada: Lucas,
Emma Suárez: Valeria,
Carlos Leal: Kai,
Jan Cornet: Roberto,
Manuela Vellés: Eimish,
Birol Ünel: Lupô.

Sinopsis:


Buscando a Eimish es, sobre todo, una historia de amor. El punto de partida es el conflicto que se produce cuando uno quiere dar un paso más y el otro no. Como desenlace de esta situación, Eimish (Manuela Vellés) se va de casa y Lucas (Óscar Jaenada) emprende un vertiginoso viaje en tren hacia el pasado de su novia, para recuperarla. Es una historia de amor, pero también de amistad, entendida como la familia que creamos a lo largo de la vida. De familia, como unidad básica de supervivencia. De personajes que luchan por lo quieren. Y es un viaje. Es el viaje físico de Lucas buscando a su novia por Berlín, Verona y Borguetto. Y el viaje interior de todos los personajes, pero sobre todo de Lucas, que descubre quién es verdaderamente Eimish... y quién es él. 

Comentario:

Con la falta de músculo y energía que caracteriza la estética indie, llega un film que José Arce (La Butaca.net) juzga de esta manera: " La escueta filmografía indie nacional engorda un poquitín con “Buscando a Eimish (...) La directora apuesta por reflejar los acontecimientos de un modo valiente en su presentación, con saltos temporales bien editados y pensados para plasmar en pantalla la lógica caótica del funcionamiento asociativo de la mente humana. Lástima que ese esfuerzo se estampe contra unos personajes poco atractivos, algunos de ellos planos incluso, sumidos en un marasmo sentimental que no engancha por un ritmo más bien aburrido, antipático en ocasiones..."

Lo peor de esta estética indie  es su falta de universalidad, que la convierte, como afirma José Arce incluso en un poco antipática, (aunque no sea precisamente  pasión lo que suscita), por su olor a club cerrado, a ghetto pijo , friki y a buenas formas. Goza de un público escaso  pero a la vez muy entregado. Lástima que cuando uno lee en varias críticas adjetivos como sensiblero, vacío o pretendidamente moderno (Cinemanía), escaso atractivo , etc. todo nos vaya conduciendo hacia la road movie indie.

Comentarios

Entradas populares