El Capital. Constantin Costa-Gavras.
Ficha técnica:
Título original: Le capital.
País: Francia-Gran Bretaña.
Año: 2012.
Duración: 114 minutos.
Dirección: Costa-Gavras.
Guión: Constantin Costa-Gavras, Jean-Clauide Grumberg y Karim Boukercha, según la novela de Stéphane Osmont.
Dirección de Fotografía: Eric Gautier. Color.
Dirección artística: Sophie Hervieu.
Montaje: Yannick Kergoat y Yorgos Lamprinos.
Productor: Michèle Costa-Gavras.
Compañías: K.G.Productions, France 2 Cinéma, Cofinova 8, CNC, The Bureau.
Intérpretes:
Gad Elmaleh: Marc Tourneuil,
Gabriel Byrne: Dittmar Rigule,
Natacha R´rgnier: Diane Tourneuil,
Liya Kebede: Nassim,
Céline Sallette: Maud Baron,
Hippolyte Girardot: Raphael Sieg,
Daniel Mesguich: Jack Marmande,
Bernard Le Coq: Antoine de Suze,
Philippe Duckos: Jean Rameur,
Olga Grumberg: Claude Marmande.
Sinopsis:
Costa-Gavras contempla la evolución de un ejecutivo que asciende meteóricamente en el mundo de los negocios, y que, llegado a la cumbre, comienza a experimentar la soledad en que se libra la lucha por el poder.
Críticas y comentario:
En la adaptación de la obra de Stéphane Osmont, pseudónimo de Stéphane Dottelonde, economista tecnócrata que trabajó para diversos ministerios ministerios franceses y expresidente de la UPE (Unión de la Publicité Extérieure) Costa-Gavras anuncia que el 'capitalismo degradante para el hombre' se basa en las espectaculares desigualdades entre ricos y pobres, en el despotismo que promueve el poder de la riqueza, en la explotación intensiva de los seres humanos y de los recursos naturales, en el creciente carácter represor del Estado. Es decir, en realidades del mundo actual sobre las cuales el marxismo reflexiona desde hace ya ciento cincuenta años. Los serios apuros por los que pasa el actual sistema capitalista nos indica que podría morir en cualquier momento, como predijo Marx, víctima de su codicia desatada . (El baile de los vampiros. Antonio José Navarro. Dirigido por... número 427. Noviembre 2012).
El economista David C.Korten advierte que "los mecanismos empleados por el capitlismo financiero para hacer dinero a partir del dinero, sin que sea necesario encarar una actividad productiva, permiten a aquellos que tienen dinero incrementar sus pretensiones en contra de la reserva real de la sociedad sin contribuir a su producción.
Era previsible que, cuando el cine norteamericano está inundando el mercado de películas de gran didactismo sobre las causas de la crisis económica actual y las trampas, estafas y manejos de todo tipo que han conducido por el camino de la avaricia a incrementar el dolor humano, se oyera ya la voz del cineasta marxista por excelencia, Costa-Gavras. Antonio José Navarro destaca un hecho de gran trascendencia y que generalmente queda desdibujado entre problemas muy serios de superviviencia, y es el principio que rige la educación superior: la productividad económica y no la reflexión intelectual.
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