Paranormal Activity 4. Henry Joost y Ariel Schulman.

Ficha técnica:

Título original: Paranormal Activity 4.

País: USA.

Año: 2012.

Duración: 94 minutos.

Dirección: Henry Joost y Ariel Schulman. 

Guión: Christopher B. Landon,  según un argumento de Chad  Feehan, basado en los peronajes de Oren Peli.

Dirección de Fotografía:  Doug Emmett. Color.

Montaje:  Gregory Plotkin.

Productores.  Jason Blum y Oren Peli.

Diseño de  producción:  Jennifer  Spence.

Vestuario: Leah  Butler.

Productora y Distribuidora: Paramount Pictures Spain. Room 101, Manic Entertainment para Paramount.

Intérpretes:

Katie Featherston: Katie,

Kathryn Newton: Alice,

Matt Sheively: Alex,

Brady Allen: Robbie,

Alisha Boe: Tara,

Tommy Miranda:  Jackson.

Sinopsis:

Una nueva entrega de filmación del terror en webcam.

Críticas y comentario:

Es una tecnología realmente asombrosa que parece diseñada para una película de terror, afirma Joost. Cuando estás en un chat de vídeo con alguien, no puedes ver lo que hay detrás de tí, pero el público sí puede verlo. Es algo que juega un papel fundamental en la película. (Fotogramas. Estrenos. Septiembre 2012).

Es un film muy adecuado para aquellos que quieren sentir miedo en su propia casa y se colocan una webcam para percibir lo que sucede en ella cuando están en situación de inconsciencia que produce el sueño, o en el umbral de la conciencia y la subconsciencia. Supone una continuación de aquellos tiempos  en que se  rastreaba la  existencia de extrañas presencias en el hogar con cutres procedimientos (grabaciones en primitivos cassettes) de psicofonía, que favorece, para los aficionados, la transcomunicación  instrumental. Se lo pasarán fenomenal.

Es una quimera  esperar alguna novedad  que iría contra la esencia de la idea que rige todas las películas de la saga, ni de forma ni de fondo. La variantes, señala Tomás Fernandez Valentí  las ofrece que el relato esté contado principalmente desde el punto de vista de una quinceañera - Alex (Kathryn Newton -, y que las cámaras de grabación sean, en esta ocasión, las webcams de ordenadores portátiles estratégicamente colocados y repartidos por distintos  por distintos rincones del decorado para mostrarnos distintos ángulos del escenario donde transcurre la acción (...) . La serie Paranormal Activity se ha convertido en  una especie de infinito anillo de Moebius por obra y gracia de la  actitud exploitation de sus responsables."

Una de las críticas más negativas la realiza Jordi Revert en La Butaca, en su artículo títulado "Paranormal Activity 4: La secuela nula"  sostiene:  Quizá conscientes de esa nulidad, los responsables de la cinta juegan a divertirse mediante la inserción de guiños al género —la pelota roja de “Al final de la escalera” (Peter Medak, 1980), el triciclo de “El resplandor” (Stanley Kubrick, 1980), ese modélico niño diabólico — y a hacer a sus adolescentes de manual carne de cañón para demonios acechantes. Pero ni una cosa ni otra salva al conjunto del naufragio: lo primero, suena a una búsqueda de complicidad ya inútil a estas alturas de la serie; y lo segundo, acaba por conseguir una irritación tal que empuja a desearles su precipitación hacia un final cruel que, de paso, concluya la saga de una vez por toda.