El grito II






Ficha técnica:


Título original: The Grudge II. 
País: Estados Unidos.
Año: 2006.
Duración:  95 minutos.

Dirección: Takashi Shimizu,
Guión: Stephen Susco . Personajes de Takashi Shimizu.
Dirección de Fotografía: Katsumi Yanagijma.
Música: Christopher Young .
Montaje: Jeff Betancourt.

Producción: Sam Raimi, Rob Tapert  y Taka Ichise.
Diseño de producción: Iwao Saito.
Compañía: Sony Pictures.






Intérpretes:


Amber Tamblyn :Aubrey Davis,
Arielle Kebbel :Allison,
Jennifer Beals :Trish,
Edison Chen :Eason,
Sarah Roemer :Lacey,
Sarah Michelle Gellar :Karen Davis,
Teresa Palmer :Vanessa,
Jenna Dewan :Sally,
Matthew Knight :Jake,
Takako Fuji :Kayako,
Ryo Ishibashi :detective Nakagawa,
Ohga Tanaka :Toshio.



Sinopsis:


Karen Davis (Sarah Michelle Gellar) es una joven norteamericana atrapada por la maldición de una terrorífica casa en pleno corazón de Tokio. Su hermana Aubrey (Amber Tamblyn) viajará a Tokio para buscar a Karen y tendrá también que enfrentarse a los fantasmas de Kayako y Toshio, que vienen desde el más allá para vengarse de los vivos. Pero no serán las únicas que se enfrentarán a la maldición… (Filmaffinity).


Comentario:


El carácter universal del mal profundo, la ira, que afecta a toda la humanidad se materializa en un colegio universitario de élite, de carácter internacional, en el que el rostro de la maldad tiene pelo muy oscuro, como el de los orientales, y ojos muy redondos que emulan los de los occidentales, a los que los nipones llaman 'futae',  típicos de los dibujos manga y anime ;  mezcla de ambos caracteres da una imagen muy inquietante. La perversidad de quien va extendiendo el rencor, la ira y el resentimiento no tiene el  rostro propio de una etnia , y la casa encantada,  en la que se originaron los hechos que destilan  la perversidad  que  se va extendiendo, pierde protagonismo.

Esta mezcla de protagonistas y espacios, que sólo adquieren carácter plenamente japonés al final del film, te hace dudar del país en que se produce la acción, hasta que nos sumergimos en el mundo rural donde perviven las tradiciones, el misticismo y la religiosidad del pueblo ancestral, que tiene sus propios demonios, gurús y exorcistas; el film es poco explícito sobre el hecho que desata los monstruos. Las imágenes nos hablan de violencia de género, de parejas que acuden a que se eliminen las causas de sus desavenencias, extendiéndose incluso a la práctica del sexo, lo que le acerca al slasher sin cuchillos, sino utilizando la fuerza del espíritu de Kayako y Toshio.





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