El verano de Martino: Massimo Natale




Ficha técnica:

Título  original: L'estate di Martino.
País: Italia.
Año: 2010.
Duración: 90 minutos.
Dirección: Massimo Natale.
Guión: Giorgio Fabbri, basado en su libro "Luglio 80".
Dirección de Fotografía:  Vladan Radovic.
Música: Roberto Colavalle.
Montaje: Paola Freddi.
Diseño de producción: Sabrina Balestra.
Vestuario: Alessia Condò.
Productora: Movimiento Film. Distribuidora: Sherlock Films.

Intérpretes:

Treat Williams : capitán Jeff Clark,
Luigi Ciardo :Martino,
Matilde Maggio :Silvia,
Pietro Masotti :Massimo,
Simone Borrelli :Andrea,
Matteo Pianezzi :Luca,
Renata Malinconico :Serena,
Silvia Delfino :madre de Martino,
Marcello Prayer :padre de Martino.


Sinopsis:

El verano de 1980 fue trágico para Italia: en junio tuvo lugar el derribo de un DC9 en Usica, y en agosto las Brigadas Rojas perpetraron un sangriento atentado terrorista en la estación de tren de Bolonia. Estos dos episodios enmarcan la vida de Martino, un chico de 15 años; de Clark, un capitán del ejército de EE.UU. aficionado al surf, y de Silvia, la novia del hermano de Martino. En una hermosa playa, Martino aprende a conquistar las olas y el amor, el capitán se enfrenta a los fantasmas de su pasado, y Silvia se enamora de Martino. La vida de los personajes se entrelaza con la leyenda de “Dragut”, un príncipe que decide viajar más allá del arco iris y zambullirse en las profundidades del mar para encontrar una vasija mágica. Si lo logra, el mundo nunca más volverá a conocer el dolor ni la muerte.

 Comentario:


Un film plagado de lugares comunes , en el que se alternan imágenes  de una vida real poco satisfactoria en la que los habitantes de las costas italianas manifiestan su antiamericanismo, acusando a  los soldados asentados en la playa  del asesinato de más de ochenta personas, con la lectura del cuento de Dragut con el que una madre ayuda a conciliar el sueño a su hijo pequeño.

Una película sin nervio, encanto ni  romanticismo, a pesar de que tiene todos los ingredientes del cuento y la comedia romántica. Massimo Dalemo hace una película plúmbea, sin gracia ni interés. Y ya es difícil.



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