Rastros de sangre. Robert Krause
Ficha técnica:
Título original: Blood Trails.
País: Alemania.
Año: 2006.
Duración: 87 .minutos.
Dirección: Robert Krause. y Carrie Hilton.
Guión: Robert Krause y Florian Puchert, basado en una idea de Kay Schneppel y Robert Krause.
Casting: Tamara-Lee Notcutt
Dirección de Fotografía: Ralf Noack.
Música: Ben Bartlett.
Editores: Richard Krause y Wolfgang Böhm.
Productor: Oliver Simon. .
Diseño de Producción: Kurt Rauscher
Diseño de Vestuario: Ines Burisch.
Maquillaje: Birgit Neumaier.
Abnormal Pictures/K5 Films.
Intérpretes:
Rebecca Palmer: Anne,
Ben Price: Chris,
Tom Frederic: Michael,
J.J.Straus: Ranger.
Kurt Rausher: Trabajador Forestal 1,
Johann Daiminger: Trabajador Forestal 2.
Christian Heiner Wolf: Policía 1,
Maximiliam Boxrucker: Policía 2.
Sinopsis:
La mensajera Anne (Rebecca Palmer) jamás pudo imaginar los terroríficos
acontecimientos que iban a tener lugar tras su aventura sexual con un
desconocido llamado Chris (Ben Price). A la mañana siguiente siente
remordimientos por lo que ha hecho y propone a su novio Michael (Tom
Frederic) una escapada a las montañas .
Comentario:
Un film que te recuerda que para que haya unos pocos listos tiene que haber millones de imbéciles. Una mensajera atractiva, sin complejos, que sabe que tiene un bello rostro y un buen cuerpo, y dos chicos guapos para los que no se han creados caminos, valles o montañas que no puedan dominar y que recorren con sus bicis, incluso por sendas clausuradas, porque otros menos listos que ellos han perdido su vida en ellas.
Hay momentos en que cae en el ridículo más absoluto, con un análisis freudiano de máscaras, fingimientos, sexo salvaje y sin barreras, con unos asesinos cuyos superpoderes descansan en su 'inteligencia' privilegiada, que se lleva por delante al más avisado. Una evidencia de que de nada sirven los recursos tecnológicos si se carece de inteligencia para usarlos y si se ponen al servicio de una historia fallida que no convence.
Parece que el film es un gran spot publicitario para lanzar a la protagonista y vendérsela a un productor para protagonizar una película no se sabe de qué género, que por momentos cae muy gorda, un documental sobre el ciclismo de montaña en Alemania, algo para lo que está muy preparada la chica. No es fácil hacer un film de terror, un thriller con una historia creíble, cuando falta la base cultural y la tradición necesaria. Sexo, deporte, cuerpos cultivados y educación sin complejos constituyen el background de un film al que le falta sensibilidad, sagacidad e inteligencia, a pesar de que juega a hacernos creer que su imagen es altamente vanguardista.
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