En lo profundo del océano. Ulu Grosbad

 

Ficha técnica:

Título original: The deep end of the ocean

País: Estados Unidos

Año: 1999

Duración: 106 minutos

Dirección: Ulu Grosbad

Guión: Stephen Schiff

Casting: Lola Kennedy, Anna Liza Recto, Kristy Sager...

Dirección de Fotografía: Stephen Goklblatt

Música: Elmer Bernstein

Edición: John Bloom

Dirección artística: Philip Toolin, William Hiney

Decorador del set:

Vestuario: Susie DeSanto, Amanda Chamberlín, Deborah Hall, Dennis McCarthy, Eileen Sieff Stroup, Jennifer Morriso Holyfield, Susan Kistler, Tyra Youland.
Maquillaje: Candace Neal, Julia L.Walker, K.G.Ramsey,  Michael Germain, Rick Sharp, Ronnie Specter,  Violet Ortiz.

Producción: Kate Guinzburg y Steve Nicolaides
Diseño deproducción: Dan Davis
Productor ejecutivo: Franz Kapra III
Compañías. Producción: Columbia Pictures Corporation, Tripictures, Mandalay Entertainment, Via Rosa Productions; distribuidora: Sony Pictures Entertainment


Intérpretes:

Michelle Pfeiffer :Beth Cappadora,
Treat Williams: Pat Cappadora ,
Whoopi Goldberg : Candy Bliss,
Jonathan Jackson : Vincent Cappadora,
Cory Buck : Vincent Cappadora  alo 7 años,
Ryan Merriman : Sam Karras / Ben Cappadora,
Alexa Vega :  Kerry Cappadora,
Michael McGrady : Jimmy Daugherty,
Brenda Strong : Ellen,
Más información sobre el reparto en Imdb
 
Sinopsis:

Unapareja burguesa bien situada, ella fotógrafa de oficio y el propietario de un restaurante pierden a unhijo en un hotel y lo recuperan cuando esyaun pre-adolescente.

Comentario:

A pesar de que, en su momento, el crítico del diario El País calificó eta película como la mejor obra de Grosbad y el mejor trabajo de Michelle Pfeiffer, nadie  pareció percatarse de que existía, a pesar de que partía con un presupuesto de 40 millones de dólares, que la equiparaba, en cuanto  a inversiones,  con películas tan espectaculares como Agora de Alejandro Amenabar. Con una puesta en escena televisiva, sin aventuras autorales, el director  hace una película de gran realismo  que pone este film de nombre tan largo al nivel de los reality shows que se empeñan en reunir familias dispersas que hace muchos años que han rehecho su vida y para las que supone una tragedia recomponer los pedazos rotos de la vida de otros.

Y esto es lo que sucede con  Sam Karras/ Ben Cappadora, un niño que se pierde en la multitud, es secuestrado y reaparece en una casa cercana a la de sus padres biológicos nueve años después. Al niño poco le importan los celos de su hermano, que posibilita el desastre, ni si la mujer que lo secuestró y después lo crió era su madre o no, ni si el padre que lo cuidó como si fuera su verdadero hijo era adoptivo o no. De pronto se ve incrustado en una familia extraña, con hábitos que no le son familiares y con tios, primos o abuelos que no significan nada para él. Y hay que reconocer que trata este tema tan melodramático con naturalidad y sin sensiblerías, como lo tratan los programas-espectáculo de las televisiones, que fomentan más la curiosidad morbosa que la empatía y solidaridad con quienes se ven inmersos en semejantes enredos de forma involuntaria.

Estas son las películas con las que las televisiones completan sus parrillas y hacen más llevadero  el verano a quienes deben permanecer en sus casas y no pueden disfrutar de unas  merecidas vacaciones.