El caso Farewell. Christian Carion





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Ficha técnica:

Título original: L'affaire Farewell.
País:Francia.
Año: 2009.
Duración: 113 minutos.

Dirección: Christian Carion
Guion :Christian Carion y Eric Raynaud, basado en la novela de Sergei Kostine
Casting: Catherine Deserbais, Geneviève Acien
Fotografía: Walther Van den Ende.
Música: Clint Mansell.
Dirección artística: Jean Michell Simonet
Edición: Andrea Sedlackova

Diseño de Vestuario: Alison Forbes -Meyler
Maquillaje: Dominique Colladant

Productores: Christophe Rossignon, Philippe Boeffard, Bertrand Faivre.
Productor en línea: Stéphane Riga
Diseño de producción: Jean Michel Simonet
Compañias : Nord Quest Productors, Le Bureau France Ficha artística:

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 Intérpretes:

 Emir Kusturica: Sergei Gregoriev
 Guillaume Canet: Pierre Froment
 Ingeborga Dapkunaite
 David Soul : Hutton
 Dina Korzun :Alina
James Stewart: Ransom Stoddart (materiales de archivo)  Philippe Magnan : François Mitterrand  Niels Arestrup : Vallier  Yevgeni Kharlanov : Capitán de milicia  Christian Sandström : agente del FBI  Willem Dafoe: Feeney
 Aleksey Gorbunov : aduanero ruso  Mats Långbacka : agente del FBI  Alexandra Maria Lara: Jessica Froment  Lauriane Riquet : Ophélie  Timothé Riquet : Damien  Fred Ward : Ronald Reagan

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 Sinopsis: 

 En 1981, el coronel Grigoriev de la KGB (nombre auténtico: Vladimir Vetrov), se decepcionó con cuanto el ideal comunista había devenido bajo Brezhnev, y decidió cambiar el mundo por su cuenta…. Con discreción, contactó con un ingeniero francés que trabajaba para Thomson, en Moscú, y poco a poco le fue pasando documentos, en su mayor parte concernientes a Estados Unidos, que contenían información relativa a la que sería la mayor operación de espionaje de la Guerra fría hasta la fecha. A lo largo de dos años, el presidente francés, François Mitterrand, verificaría personalmente los documentos suministrados por aquella fuente de Moscú, a la que el Servicio Secreto francés puso el nombre en clave de "Farewell". Entonces, el amo de la Casa Blanca, Ronald Reagan, dejó a un lado su renuencia a trabajar con un francés socialista para sacar partido de aquella información inesperada que provenía directamente del mismísimo corazón de la KGB. De hecho, lo que hizo Farewell fue cercenar de cuajo la red que permitía a la KGB recibir información pormenorizada de toda investigación científica, industrial o militar de Occidente. Una vez que la URSS se vio desprovista de aquellas inapreciables fuentes de información, el anuncio de Ronald Reagan del nuevo programa militar "Guerra de las Galaxias" significó el toque a difuntos para la Unión Soviética. El Muro de Berlín cayó antes de que acabara la década de los 80… A su manera, puede decirse que Farewell logró cambiar el mundo evitando los métodos tradicionales de espionaje, demasiado conocidos para la KGB, y no exigiendo a cambio compensación económica de ninguna clase, demasiado capitalista para su gusto. Se limitó a seguir su destino, con el fin de que amaneciera un nuevo mundo para sus camaradas rusos, pero particularmente para su hijo.

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Comentario.

Film muy oscuro, austero en la forma para adaptarse a la imagen de una Unión Soviética en su época crepuscular, que no se  ha desvanecido con la transición del país a un sistema capitalista, en el que los funcionarios del degradado régimen comunista han sido sustituidos por las mafias y los nuevos ricos ostentosos que nadie sabe bien de dónde han salido. De hecho, y según la historia narrada por el guionista y director Christian Carion, una compañía norteamericana fue el vehículo para la realización de un sabotaje de enormes consecuencias en gaseoductos rusos, al proporcionar a las redes  dedicadas al espionaje industrial en Estados Unidos información defectuosa. La historia ha tratado a Vladimir Vetrov como un héroe, un agente decepcionado que se sacrificó por legar a su hijo un mundo mejor; su compañero de contraespionaje salió mucho mejor parado y pudo disfrutar de una vida cómoda con su familia en Manhattan; Ronald Reagan pagó bien sus servicios.

Algunos años después, Rusia devuelve la pelota, y , en la nueva era tecnológica protege en su país a uno de los protagonistas del espionaje cibernético, Edward Snowden, que hizo públicos en los periódicos The Guardian y  The Washington Post , documentos clasificados de alto secreto por la NSA, incluido el programa de  vigilancia PRISM, en el que han colaborado casi todos los paises occidentales, aliados de Estados Unidos,en cuyo marco han vigilado estrechamente a los líderes europeos, ya sea por intereses industriales, como denuncia el  film sobre el Caso Farewell, o por razones políticas que podrían afectar a estos intereses económicos. En la nueva era estos datos se proporcionan directamente a la sociedad para que sea ella la que juzgue, como ocurre en el film de Alfred Hitchcock cuando, descubierto el asesinato realizado por dos aristócratas en 'The rope', (La soga), abre la ventana de su apartamento y dispara al aire para atraer la atención de los transeuntes y no permitir que el asunto se diluya y desaparezca en el laberinto del poder y los pasillos de la judicatura. Sólo algo no ha cambiado: la persecución, con acusaciones de alta traición de los agentes protagonistas, que pueden conllevar la pena de muerte en EE.UU. El romanticismo de los aficionados conspiranoicos se ha debilitado, al menos hasta que se establezcan las conexiones de estos individuos relevantes, a los que las masas contemplan como los nuevos héroes de la era tecnológica. 

Críticas:

 Interpretada por cineastas como Guillaume Canet (Pequeñas mentiras sin importancia), que encarna el personaje de Pierre Froment, un hombre corriente francés, residente en la URSS, y Emir Kusturica que representa al moldavo Sergei Gregoriev, amante de la cultura francesa y comunista desencantado,, Christian Carion realiza un film que reivindica el papel de los actores anónimos y del papel de Francia en la disolución del bloque soviético, y su papel en un mundo sin guerra fría. Héctor G. Barnés (Dirigido por...) afirma que El caso Farewell retrata con cierto acierto el dilema entre lo cotidiano y la Historia, entre su responsabilidad familiar, el hombre que quiere construir un mundo mejor para su hijo, pero no es capaz de que él mismo sienta aprecio por él. Lástima que Carion se traslade a imágenes con un estilo tan conciliador y transparente como romo y mecánico.



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