Essential Killing. Jerzy Skolimowski

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Ficha técnica: 

Título original: Essential Killing
País: Estados Unidos
Año: 2010
Duración: 100 minutos

Dirección: Jerzy Skolimowski
Guión: Jerzy Skolimowski, Iwa Piaskowska
Presentación: Jeremy Thomas
Dirección de Fotografía: Adam Sikora
Música: Pawel Mikyetin

Diseño de Vestuario: Anne Maure
Diseño de maquillaje: Barbara Conway

Productor: Ewa Piaskpwska y Jerzy Skolimowski
Productores ejecutivos: Jeremy Thomas, Andrew Lowe, Peter Watson
Diseño de producción: Joanna
Skopia Film Production con Cylinder Production, Element Pictures MyThberg Films, co-producción con  Canal  + Poland, Syrena Films y co-financiado por Akson Studio, Task Films

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Intérpretes:

Vincent Gallo: Mohammed
Emmanuelle Seigner: Margaret

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Premios:

2010: Festival de Venecia: Premio especial del jurado, Mejor actor (Vincent Gallo)
2010: Festival de Mar del Plata: Mejor película, Mejor actor (Vincent Gallo)

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Sinopsis:

Un soldado afgano es prisioneros de los norteamericanos, acusado de matar a tres militares. Consigue escapar e inicia una dramática carrera por la superviviencia en la naturaleza helada

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Crítica:

La crítica norteamericana fue muy favorable al film; Rotten tomatoes , que consiguió un 85 % de aceptación; sin embargo la prensa española ha sido injustamente  dura con Skolimowski. Veamos lo que dijo Toni Garcia del diario 'El País': Así, la tocata y fuga de Gallo carece de la intensidad necesaria por mucho que el actor del método devoré -en nombre de la verosimilitud- insectos, pescado crudo y corteza de árboles, y finalmente acaba pareciendo un viaje rutinario a ninguna parte del que -obviamente- no saldrá bien parado. Lo mejor de la película resultan ser los ditirámbicos encuentros del protagonista con personajes de todo tipo y pelaje en el tramo final, una parte que parece mirar de reojo al cine de David Lynch. Si el director no se hubiera empeñado en seguir el curso del río quizás estaríamos hablando de una película totalmente distinta. Por cierto, que Gallo no abre la boca en toda la película excepto para gritar. Será que no le apetecía." Difícil hablar cuando se está solo.

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Comentario:

Duro y potente film de Jerzy Skolimowski, muy recomendable para situarse, aunque sea levemente, en los sufrimientos que padecen miles de hombres en situación límite, que optan por morir luchando por su supervivencia a  hacerlo como un perro torturado en una cárcel.

Una simbiosis de cine bélico, de terror y fantástico según  Desirée de Fez. José María Álvarez (El hombre deshumanizado en "Essential Killing". Extracine.com), afirma que el cineasta polaco, Jerzy Skolimowski, no precisa de palabras para contar su historia, al proceder del mundo de la pintura. Pero el cine es ante todo imagen, siendo el montaje el sujeto de la enunciación y esto se torna muy evidente en una cinta que pretende una mirada objetiva sobre los dramáticos acontecimientos en la zona caliente de Oriente Medio, Irak, Afganistan...,  que adopta la forma del mockumentary o falso documental, para mostrar de qué es capaz el hombre cuando lucha por su supervivencia. Breves flashbacks, filtrados en blanco, nos muestran al fugitivo rezando de rodillas y respondiendo a las llamadas de los religiosos talibanes, creencias que han llevado al que huye a la situación desesperada en que se encuentra, que lo ha reducido a la condición  de alimaña inadaptada que lucha por su supervivencia.

Los soldados que le persiguen, seres sin rostro, que avanzan pertrechados con las armas más modernas, vehículos blindados, perros adiestrados,  y apoyo en el aire de los blackHawks, se convierten en símbolos del poder y la opresión,  icono ligeramente matizado en la primera secuencia, que nos muestra a dos soldados norteamericanos con la cabeza descubierta, levantadas sus  chilabas, sonriendo, bromeando y mostrando su lado humano. A partir del momento en el que huye el preso y se adentra por el desierto helado, la cámara se convierte en un testigo  de su lucha por la subsistencia y del acoso de que es objeto, sin que importe de qué se le acusa y por qué se le busca, o si solo importa como posible fuente de información.

El inconformista  director polaco interroga a uno de los autores de culto norteamericanos  qué hay de esencial en el arte de matar. La respuesta es sencilla: "Solo esto: yo vivo y tu mueres". Este es el verdadero motor de la historia, su background,  en el que un "animalesco" Vicent Giallo encarna a este antihéroe silente dispuesto a matar para poder prolongar, aunque sólo sea un día, su atónita agonia antropológica, (Massimo Tria, www.nonsolocinema.com). El hombre que huye, con la mente ofuscada por el frío, el hambre y otras necesidades primarias se convierte en un riesgo para los demás, axioma universal que se hace explícito en  la  tremenda secuencia en la que el fugitivo, sin nombre, violenta a una madre que le está dando el pecho a su hijo, para poder tomar un poco de la leche materna. Según Tria, la ubicación del relato en un escenario de guerra concreto es sólo una excusa para mostrar que al hombre en la lucha descarnada y esencial   por  su propia supervivencia le vale todo, especialmente en un ambiente hostil  y al límite de lo soportable humanamente; supone una representación del fundamento de la vida humana al hacerle asumir la forma de su función cardinal: calor versus frío, comida versus carencia, salud corporal versus dolor.