Los cronocrímenes. Nacho Vigalondo

___________________________________________________________________________________________________________________

Ficha técnica:

Título original: Los cronocrímenes
País: España
Año: 2007
Duración: 88 minutos

Dirección: Nacho Vigalondo
Guión: Nacho Vigalondo
Director de Fotografía: Flavio Labiano
Dirección artística: José Luís Arrizabalaga y Arturo García (Biaffra)
Música original: Chucky Namanera
Montaje: José Luís Romeu
Diseño de sonido: Roberto Fernández; sonido directo: Asier González
Efectos digitales: Mentopia Visual Effects

Diseño de Vestuario: Estibaliz Markiegi
Maquillaje y peluquería: Susana Ibarretxe
Efectos especiales de maquillaje: Plan 9 FX

Productores: Javier Ibarretxe, Eduardo Carneros, Esteban Ibarretxe
Coproductores: Jorge Gómez y Santi Camuñas; Jordi Rediu y Norbert Llaràs
Productores asociados: Cormac Regan, Nahikari Ipiña, Sergio Barrejon; Soraya Lacaba, Dave Chariton, Todd Brown
Productores ejecutivos: Eduardo Carneros y Javier Ibarretxe, Esteban Ibarretxe
Director de producción: Eduardo Carneros; jefe de producción: William Welsh

Compañías. Karbo Vantas Entertainment, en co-proucción con Fine Productions y ZIO Films, asociado con Arsénico PC, con la participación de ETB, Telemadrid, Televisión Pública de Canarias, S.A. y Televisión Pública de Castilla-La Mancha, S.A. Con la colaboación y financiación de Eusko Jaurlaritza-Gobierno Vasco/Departamento de cultura, Audiovisual, s.g.r. ICO/Ministerio de Cultura y la colaboración del Gobierno de Cantabria.

___________________________________________________________________________________________________________________

Intérpretes:

Karra Elejalde: Héctor

Candela Fernández: Clara

Nacho Vigalondo: el joven

Barbara Goenaga: la chica del bosque
Ion Inciarte: Héctor ocasional

___________________________________________________________________________________________________________________

Sinopsis:

Un hombre descubre a través de sus prismáticos a una preciosa joven e intenta encontrarla en la profundidad del bosque. De repente, un individuo armado con unas tijeras y la cara vendada lo ataca por la espalda, a pesar de lo cual consigue huir y llega a un laboratorio científico situado en mitad del bosque. Allí, una máquina le ofrece la oportunidad de realizar un viaje extraordinario, un viaje en el que la posibilidad de encontrarse a sí mismo será la primera de una serie de catástrofes de consecuencias imprevisibles.

___________________________________________________________________________________________________________________

Comentario:

Todo suena a demasiado casero, a pesar de gozar de la implicación de varios gobiernos y televisiones autonómicas en la financiación del producto. La puesta en escena resulta cutre y todo, desde la secuencia que introduce el film, es poco creíble, ese travelling en el que un coche avanza por una carretera repleta de objetos de la cesta de la compra desperdigados, que se muestra engañoso cuando se abre el plano, o esa llamada de teléfono a un número del que nadie dispone, que después se intentará explicar mediante múltiples dimensiones temporales.

Para sentir la emoción de los viajes temporales el espectador ha de poner grandes dosis de entusiasmo y los únicos elementos del género presentes en el film que podían haber generado inquietud son el aislamiento de la, al parecer, segunda vivienda en el campo, y el voyeurismo del protagonista siempre pertrechado con unos prismáticos. A partir de ahí, el por qué un viaje en el tiempo pueda transformar a un hombre corriente en un asesino es una incógnita difícil de resolver, en ocasiones bastante risible; en su desplazamiento de unas horas en el tiempo, el hombre se ve obligado a reproducir una serie de acontecimientos  tal y como los  vivió al llegar a su residencia, para explicarse la razón de lo que finalmente vio.

Las críticas casan bastante bien con este análisis: ingeniosa y entretenida (Roger Ebert, Chicago Sun Times), (... ) rara inteligencia,( Jordi Costa, Diario 'El País'), (...) mola bastante ( Javier Cortijo, Diario ABC), (...) más que correctamente rodada (Alberto Luchini, Diario 'El Mundo'). Poca cosa para semejante implicación de los poderes públicos en la película, en la que Nacho Vigalondo juega un penoso papel de deus ex machina de esta historia, a un lado y otro de la pantalla, en la que el viaje en el tiempo tiene un efecto multiplicador, con una realidad física diferente pero la misma experiencia vital, modificada por cada una de las réplicas del individuo, que funcionan como un espejo que muestra las diferentes personalidades que se esconden tras la máscara del buen ciudadano, que goza de un buen estatus económico.