El único superviviente. Peter Berg



Ficha técnica:

Título original: Lone survivor
País: Estados Unidos
Año: 2013
Duración: 121 minutos

Dirección: Peter Berg
Guión: Peter Berg,  basado en el libro "Lone survivor" de Marcus Luttrell yPatrick Robinson
Casting: Linda Lowi,c.s.a., John Brace
Director de fotografía: Tobias Schliessler, a.s.c.
Música: Explosions in the sky, Steve Jablonsky
Edición: Colby Parker, Jr.
Supervisor efectos visuales: Jesper Kjölsrud

Diseño de Vestuario: Amy Stofsky
Maquillaje efectos especiales: Gregory Nicotero, Howard Berger

Productores: Peter Berg y Sarah Aubrey; Randall Emmett y Norton Herrick; Barry Spikings, Akiva Goldsman; Mark Wahlberg, Stephen Levinson; Vitaly Grigoriants
Productores ejecutivos: George Furla, Simon Fawcett, Braden Aftergood, Louis G. Friedman; Remington Chase, Stepan Martirosyan, Adi Shankar, Spencer Silna; Mark Damon, Brandt Andersen, Jeff Erice
Diseñode producción: Tom Duffield
Universal, Emmett/Furla Films, Film 44/Spikings Entertainment/Single Berry Production, Spiking Entertainment/Single Berry Production/Herick Entertainment/Envision Entertainment Production, Glosest The Hole/Leverage Production


Intérpretes:


Mark Wahlberg: Markus Luttrell
Taylor Kitsch:  Michael Murphy
Emile Hirsch:  Danny Dietz
Ben Foster: Matt "Axe" Axelson
Eric Bana: Erik Kristensen
Yousuf Azami: Shah
Ali Sulliman: Gulab
Alexander Ludwig: Shane Patton
Rich Ting: James Suh
Jerry Ferrara: Hassiert
Sammy Sheik...


Sinopsis:


Adaptación de las memorias de Marcus Luttrell, donde relata sus experiencias en Afganistán durante 2005. A él (Wahlberg) y a otros camaradas (Kitsch, Foster, Hirsch) les fue encomendada la misión de liquidar a un líder terrorista, pero la situación se complicó cuando por azar encontraron a unos pastores, a los que perdonaron la vida y dieron el chivatazo a los talibanes.


Premios (Filmaffinity):


 2013: Oscar: Nominada a Mejor sonido y Mejor montaje de sonido
2013: Critics Choice: Mejor película de acción y actor de acción (Wahlberg)
2013: National Board of Review (NBR): Mejores 10 películas del año
2013: Satellite Awards: Nominada a Mejor guión adaptado (Lone Survivor)
2013: Screen Actors Guild: Mejores especialistas de acción
2013: Sindicato de Guionistas (WGA): Nominada a Mejor guión adaptado


Críticas:


La única crítica negativa, de las recogidas por Filmaffinity, es la de Keith Ulich de Time Out: "Puede que Berg se haya ceñido a los hechos básicos, pero el machismo infantil de su película es una vergüenza para todos los involucrados."

Javier ocaña (Bélico de tralla, Diario 'El País) se coloca en una posición intermedia, entre los críticos y los apologetas del film: "  El único superviviente, eso sí, sin una gota de análisis político ni de clase, es cinta para amantes del bélico de fuerza y estopa, de tensión y de liberación, y contiene la, seguramente, caída por una colina más espectacular que se haya rodado jamás."

José Arce ("El único superviviente": La barbarie. La Butaca. net) se muestra más crítico: "Drama bélico tremendamente espectacular en su puesta en escena pero incapaz de echar el freno cuando hace falta. Peter Berg opta por la exaltación del sacrificio hooyah en lugar de repudiar los horrores de la guerra. Lástima, aunque es digna de verse por su planificación técnica."

Quim Casas ("El único superviviente. Huesos, rocas y patriotismo". Dirigido por...febrero de 2014) busca las raíces en los clásicos: La última película del realizador Peter Berg mantiene vivos algunos de los principios esenciales del cine bélico tal como lo entendió y manifestó uno de sus mejores cultivadores, Sam Fuller, aunque él ambientara sus historias en la segunda contienda mundial y en la Guerra de Corea, y Berg lo haga en la Guerra de Afgsnistán. Pero más allá de determinados valores, patriotismos y configuración de paisajes bien distintos, El único superviviente se construye a partir de la premisa esencial del hombre en conflicto, el hombre en guerra, el individuo en estado de alerta, la sensación de que la guerra saca a relucir tanto lo mejor como lo peor de cada individuo, algo que por otro lado también ocurre en tiempos de crisis económicas."


Comentario:



Aunque haya quien pueda creer lo contrario, el cine no acabó en las décadas de los 70 y los 80, y las raíces del film hay que buscarlas en Kubrick, Coppola o Malik, antes que en Sam Fuller, Raoul Walsh, Rober Aldrich o Don Siegel, fijándonos en aspectos diferentes a su carácter viril y esencialista; pero las guerras, hasta ahora, siempre las han organizado los hombres y la presencia de las mujeres es insignificante. Desde el primer minuto del film de Berg el espectador conoce la diferencia entre un soldado que se enrolaba para combatir franquistas, nazis o fascistas, y un mercenario que recibe un durísimo entrenamiento militar, que la mayoría abandona, y que cobran un sueldo tan elevado que pueden comprar caballos árabes de quince mil dólares a sus novias, cuestión que ocupa un buen rato de la película en la que se exhibe una fotografía con dos magníficos ejemplares. Otros cambios tienen más que ver con la tecnología que con los entrenamientos físicos de los grupos especiales de acción directa, como los vehículos en que se desplazan, en este caso helicópteros que tienen nombre de tribus indias: blackhawks, apaches o cherokees, cuyas actividades se complementan en pro de la seguridad de las operaciones.

Peter Berg, director y guionista, no se molesta en explicar las causas que motivaron la Guerra de Afganistán, suficientemente conocidas por toda la humanidad, cuyas imágenes han penetrado en todos los hogares del mundo a través de la pequeña pantalla, y cuya justificación se ha defendido en la prensa mundial por el atentado contra las torres gemelas del World Trade Center. Lo que verdaderamente se convierte en un revulsivo contra la aceptación de la guerra, más generalizada de lo que parece, es la colocación del espectador en la disyuntiva de tener que aceptar que para salvar la vida de cuatro soldados bien entrenados haya que matar a un niño, dilema que ya planteó Stanley Kubrick en un film muy similar,  'La chaqueta metálica',  y justificó de algún modo. Aquí vamos a tener que ver, salvo que estemos todo el tiempo desviando la vista  de las imágenes, cómo cuatro marines de los U.S.Navy Seal (United States Navy Sea, Air and Land) ponen en práctica todo lo que han aprendido, entre otras cosas a tirarse por las laderas de montañas escarpadas y rocosas, destrozando sus miembros y desfigurando sus rostros, pero resistiendo el envite mucho más de lo que podría soportar un ciudadano normal.

Los cuatro soldados, expertos en operaciones especiales, van a 'matar' a unos líderes talibanes, y, en el camino se tropiezan al azar con tres pastores de cabras, pertrechados con un radio-teléfono, que les comunica con el campamento vía satélite. Dos de ellos son casi niños y el tercero es un viejo; una vez producido el encuentro el dilema es insalvable: si los dejan marchar los van a denunciar a los talibanes; si los atan a un árbol, sólo retardan el chivatazo y ponen las vidas de estos tres civiles en riesgo. La tercera está tan clara que no cabe la menor duda de que lo que se pretende al crear esta situación es forzar al espectador a decantarse en pro de un asesinato de guerra con el objetivo de salvar la vida de los marines, o respetar la legalidad a cualquier precio, a sabiendas de lo que comporta. Otra cuestión es el temor a las repercusiones en la prensa. A partir de ese momento la lucha feroz del hombre contra el hombre, narrada sin idealizaciones ni ocultamientos, hace preguntarse a más de uno qué razón puede existir para que individuos que ni se conocen participen en esa carnicería. El resultado no sólo es de gran fuerza física, sino altamente repulsivo para quien tenga algo de sensibilidad; afirma José Arce que Berg opta por la exaltación del sacrificio hooyah (grito de guerra de la élite de los Navy Seal), y efectivamente es el riesgo que se corre ante quien disfruta viendo cuerpos descuartizados, pero por otro lado evidencia la sinrazón de la guerra y afianza en sus posiciones a los que están en contra de ella.

Los últimos momentos compensa tanta violencia, que opera en contra del propio ejército,  con la exaltación del sentimiento de grupo de estos soldados, en el que encuentran su identidad: la dependencia de los camaradas entre sí. Y lo acaba de arreglar con la ayuda de los afganos al único superviviente, y el abrazo que le da un niño cuando se despide de él, ya libre y en manos del ejército norteamericano. Las guerras de finales del siglo XX y principios del siglo XXI han levantado serias dudas sobre su propia legitimidad y han incrementado la intensidad de las masacres, producidas por el uso de la alta tecnología y la intervención de estos grupos especiales, muy bien entrenados y mejor pagados, al menos según nos induce a creer Peter Berg, a los que rinde un homenaje final sin el que el film hubiera resultado inaceptable para amplios sectores de la opinión pública norteamericana, y de sus aliados en las guerras recientes.

Comentarios

  1. ¡Muy, muy entretenida! Un filme bélico basado en hechos reales dirigido con eficacia visual por Peter B. Un drama con una especie de estudio sobre la condición humana en una guerra, o sea, en una situación límite. Sin embargo, en manos del director Berg resulta lo que él mejor hace: cine de acción, de mucha faena, donde lo bélico es solo el paradigma de dicha acción. Dije que el filme se basa en hechos reales. Lo único es que están visualizados de tal manera que más parece un capítulo de Misión imposible en un campo de batalla, con cuatro soldados de Estados Unidos, diseñados como superhéroes, contra un montón de talibanes en Afganistán, estos tan torpes como crueles. Por otra parte El sobreviviente, tenemos un culto enfermizo a la guerra, deslizado aún entre sus situaciones más duras. Esto le da un espurio tono épico a lo narrado: la guerra nos da héroes cuya base se sustenta en matar y matar a más y más humanos. Solo falta portar un ábaco para llevar registro.

    ResponderEliminar
  2. Muy buen comentario. No cabe la menor duda de que el cine de acción es americano y de que así lo entendieron los mejores representantes de la Nouvelle Vague. La acción y la improvisación Es su máxima aportación a la cultura occidental en todas sus manifestaciones (jazz, el blues, el rock, la action painting, el cine...), y a ello suman un espíritu crítico del que muchos de nosotros carecemos. Siempre se busca algo que compense un discurso demasiado duro, y se produce con frecuencia una auto-censura del realizador, pero son pocos los países del área occidental en los que se haya hecho un seguimiento tan minucioso de las acciones de su ejército en acciones internacionales, desde todas las ópticas y perspectivas ideológicas. Peter Berg recibió la recompensa merecida a su esfuerzo por parte de los certámenes más prestigiosos.

    No sólo me alegra haber leído tu opinión, sino que esperaría verte más a menudo por aquí. Un saludo.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

¡Deja tu comentario aquí!

Entradas populares