Nueva vida en Nueva York.. Cédric Klapisch

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Ficha técnica:

Título original : Casse -tête chinois
País: Francia
Año: 2013
Duración: 117  minutos

Dirección: Cédric Klapisch
Guión y adaptación de diálogos: Cédric Klapisch
Dirección de Fotografía: Natasha Braier
Casting: Ann Goulder; París: Jeanne Millet
Montaje: Anne Sophie Bión
Decorados:  Roshelle Berliner; Paris: Marie Cheminal

Diseño de Vestuario: Anne Schote

Productor: Bruno Levy
Director de Producción: Sylvie Peyre
Director de Postproducción: Isabelle Morax
Productor ejecutivo: Raphaél Benoliel
Jefe de Producción: Carol Cudoy
Compañías. Productoras: Ce qui me meut, StudioCanal, France 2 Cinéma, André Logie Panache Productions & Gaetan David, La Cie Cinématographique, RTBF (televisión belga), productores
asociados CN2 Productions; distribuidora: A Contracorriente Films

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Intérpretes:

Romain Duris: Xavier Rousseau,
Audrey Tautou : Martine,
Cécile de France: Isabelle,
Kelly Reilly: Wendy,
Sandrine Holt : Ju.

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Sinopsis:

Xavier es un escritor de 40 años que todavía no ha sentado cabeza y más bien se le está complicando la vida. Tiene dos niños y decide instalarse en Nueva York para estar más cerca de ellos. Trata de labrarse un lugar como hijo, padre, y hombre, perdido en el bullicioso caos de Chinatown. La vida de Xavier es como un rompecabezas. Pero aunque adolezca de calma, como el propio Nueva York y la época en que vivimos, le proporciona una abundante fuente de material para por fin terminar su nueva novela.

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Críticas:

La crítica tanto norteamericana como europea ha recibido bien el film de Klapisch, con matices. Javier Ocaña no se muestra complacido del todo en su valoración: "Irregular tanto en la composición de las situaciones como en los diálogos, la película está compuesta a partir de un desorden narrativo que, al tiempo, se convierte en virtud y defecto. Virtud porque, junto a esas estupendas secuencias oníricas donde el protagonista habla con los filósofos Hegel y Schopenhauer, esa desestructura y sus casi continuos juegos de montaje la sacan de la discreción. Y defecto porque, al alimentarse de secuencias muy cortas y desiguales en interés, se produce un cierto desbarajuste por acumulación..." ( Otra vida inesperada. Diario El País)