La vida secreta de Walter Mitty. Comentario

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Ficha técnica.

Título original: The secret life if Walter Mitty
País: Estados Unidos
Año: 2013
Duración: 113 minutos

Dirección: Ben Stiller
Guión: Steven Conrad, basada en un relato de James Thurber
Casting: Rachel Tenner
Director de Fotografía: Stuart Dryburgh, a.s.c.
Música: Theodore Saphiro; supervisor: George Drakoulias
Edición: Greg Hayden
Supervisor efectos visuales: Guillaume Rocheron
Coordinador de especialistas: Tim Trella
Supervisión decoración artística: David Swayze
Decorador del set: Regina Graves

Diseño de Vestuario: Sarah Edwardsse-AllisonResponsabñe de maquillaje: Paul Gebbia
Responsable de peluquería: Suzy Mazzare

Productores: Samuel Goldwyn, Jr., John Goldwyn, Stuart Conrnfeld y Ben Stiller
Productores ejecutivos:Gore Verbinski, Meyer Gottlieb, G.Mac Brown
Diseño de producción: Jeff Mann
Red House Entertainment, Truenorth Productions, Twentieth Century Fox Films Corporation


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Intérpretes:

Be Stiller: Walter Mitty
Kristen Wiig: Cheryl Melhoff
Shirley MacLaine: Edna Mitty
Adam Scott: Ted Hendricks
Katheyn Hahn: Odessa Mitty
Patto Oswalt: voz del programa de internet
Adrian Martínez: Hernando
Ólafur Darri Ólafsson: Piloto de helicóptero
Sean Penn: él mismo


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Premios: 

2013: National Board of Review (NBR): Mejores 10 películas del año
2013: Satellite Awards: Nominada a mejor fotografía y banda sonora

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Sinopsis:

Ben Stiller hace un remake de ‘La vida secreta de Walter Mitty’ (‘The Secret Life of Walter Mitty’), dirigida por Norman Z. McLeod en 1947, un film magnífico sobre el complejo de Edipo y sus derivadas, como el nacimiento de un amor platónico en la imaginación de un joven cuya madre ocupa todo su espacio emocional, y que a base de mentir y fingir historias, pierde la credibilidad. Samuel y John Goldwyn, descendientes de aquel otro que produjo esta historia han decidido financiar un remake, dirigido por Ben Stiller.La historia se basaba en un relato de James Thurber que giraba en torno al tímido empleado de una editorial que consigue evadirse de su gris existencia imaginando que es el héroe de grandes aventuras; un día, su sueño se hace realidad cuando conoce a una misteriosa mujer que le implica en una peligrosa misión.

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Críticas:

Según Tonio L. Alarcón, basándose en el neurólogo V.S. Ramachandran, los arranques imaginativos del protagonista de la novela de James Thurber, Walter Mitty, (1939, vísperas de la Segunda Guerra Mundial), podrían ser la descripción de alguna de sus alucinaciones, debido al síndrome de Charles Bonnet, padecido y no diagnosticado en el escritor, una afección neurológica que provoca la aparición de percepciones visuales falsas en personas que han sufrido algún tipo de daño en la vista, ya sea a través del ojo o del cerebro, que les provoca una ceguera total o parcial, como la que sufrió el escritor. Este análisis sería el resultado de aplicar un punto de vista pragmático, físico a las alucinaciones del personaje, que reemplazarían la realidad que ha perdido en su vida. De este modo se evitaría el conflicto maternofilial que produciría un escapismo hacia lo virtual, sustituyendo esta necesidad de huir de lo real por una manifestación mucho más positiva del espíritu humano: su capacidad de crear. Este es el sentido que le quiere dar Tonio L.Alarcon (es hora de abandonar la cápsula.Tonio L.Alarcón. Dirigido por..., enero 2014), que ve un intento de "elaborar una hermosísima reflexión sobre la creación cinematográfica" . 

Desde el primer momento, Ben Stiller nos pone en la piel de su Walter Mitty, subrayándose que la película es una " descripción subjetiva de su vida, la proyección del universo personalísimo, caótico y extrañísimo de su protagonista principal' y considera un error 'una inconmensurable torpeza o una genialidad humorística' la comparación que hace la Fox entre la cinta con Forrest Gump (Id.; Robert Zemeckis, 1994). Ben Stiller advierte de "lo innecesario de mantener los pies sobre la tierra a la hora de narrar una historia en imágenes, y de la flexibilidad, de la capacidad de jugar con los límites de la ficción, que sigue ofreciendo el cine, pese a que demasiado a menudo de lo neguemos". (Tonio L.Alarcon). Un análisis metalingüístico en el que, como sucede muy a menudo, seguimos dando vueltas al lenguaje cinematográfico y su capacidad de crear belleza por sí mismo, sin necesidad de ponerse al servicio de ninguna causa; en esta dirección el crítico sigue dando vueltas al tema, incidiendo en la fotografía del neozelandés Stuart Dryburgh, la composición de la imagen... Peter Debruge (Variety) da un paso más cuando sostiene que : "Aunque Stiller ha demostrado que puede ser mucho más divertido, al final la dimensión emocional hace que la película resulte más trascendental." (extracto de Filmaffinity) 

José Arce (La Butaca.net) se queda en un terreno intermedio, entre el análisis formal de un film y su puesta al servicio de algo más que tomarse como referente a sí mismo: "Curiosamente, la película más floja de Ben Stiller tras las cámaras es también la más agradable y candorosa. Un cuento mágico de encuentro y superación personal por el que dejarse llevar con

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Comentario:

Ben Stiller sitúa su historia en el marco de la crisis actual y especialmente en la que padecen los medios de comunicación de papel,  en concreto la revista Life,  que se reconvierte en un punto-com. Los empleados de la prestigiosa revista van a padecer un ere (expediente de regulación de empleo) que va a dejar a la mayor parte de la plantilla en la calle, y, aunque Walter Mitty no corre en principio ningún riesgo. el hecho de perder una fotografía, la número 25 de una serie, que debe figurar en la portada del último número que va a salir a la calle, su situación cambia peligrosamente. A partir de ese momento debe soportar el escarnio del equipo de crisis, que ignora el background cultural de la revista y confunde el lema de la publicación con el de una cadena de fast food. A la pregunta de Walter: "¿Sabes nuestro lema?" " Si: Life, "I'm lonvin'it". "  No ese es de MacDonalds. Esto es lo que pasa, Ted,  cuando llegas a un sitio y echas a la gente que ha trabajado duro para construir esta revista. Vivían su lema. Tú tenías tus ordenes y debías cumplirlas, pero no hay por qué  ser un cerdo."

Lo que hace Ben Stiller es actualizar la historia y ponerla en consonancia con la época actual, en la que las famuilias monoparentales son casi hegemónicas por razones diversas, en muchas oasiones presididas por las mujeres y  en las que no sólo su madre tuvo que desempeñar el papel de mater familias, sino su propia compañera, de la que se enamora platónicamente Cheryl Melhoff (Kristen Wiig), debe educar en solitario y cuidar de su hijo preadolescente. Pero en ambos casos se cumplió un objetivo: educar a los hijos en un hogar feliz, en el que desarrollaron su imaginación y adquirieron unas destrezas que, aprendidas de modo lúdico, les fueron útiles en su madurez. Esto es algo que no les perdona quien parece tenerlo todo claro, pero jamás ocuparán la portada de una revista porque carecen de imaginación. Sus lapsus imaginativos no son ni caóticos ni extraños en la versión de Ben Stiller, sino un modo de escapar de una realidad que le disgusta y una forma de buscar refugio en una época en la que fue feliz (alusión a Benjamin Button). No todo el mundo tiene este refugio, y eso también es real.

Las secuencias más bellas del film no son precisamente las imaginadas, sino la que forman parte del discurso propio del realismo mágico que domina el film, enaltecidas por una música muy bien administrada, como el viaje que realiza por carretera montado en su skate, un objeto de gran valor proustiano, de búsqueda del tiempo perdido en el que fue feliz. La venta del piano que su padre regaló a su madre psts poder sobrevivir tras el despido es profundamente dolorosa para la reducida familia. El hijo de Cheryl conecta con el carácter mágico y creativo de Walter Mitty. Un film que puede ayudar a levantar el ánimo de quien se encuentre en la situación del protagonista y tenga su sensibilidad.