Malefica. Robert Stromberg. Comentario

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Ficha técnica: 

Título original: Maleficent
País: Estados Unidos
Año: 2014
Duración: 97 minutos

Dirección: Robert Stromberg
Guión: Linda Wolverton
Dirección de Fotografía: Dean Semler, a.c.s., a.s.c.
Música: James Newton Howard
Edición: Chris Lebenzon, a.c.e., Richard Pearson, a.c.e. 

Diseño de Vestuario: Anna B.Sheppard Productor: Joe Roth

Productores ejecutivos: Angelina Jolie, Don Hahn, Palak Patel, Matt Smith, Sarah Bradshaw Diseño de producción: Gary Freeman y Dylan Cole
Compañías. Walt Disney Company, Moving Picture Company (MPC), Roth Films 

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Intérpretes:

Angelina Jolie: Maléfica,
Elle Fanning : Aurora,
Sharlto Copley : Stefan,
Lesley Manville : Primavera,
Imelda Staunton: Flora,
Juno Temple : Fauna,
Sam Riley: Diaval,
Brenton Thwaites : Príncipe Felipe

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Sinopsis: 

Maléfica es una bellísima joven con un corazón puro y unas asombrosas alas negras. Crece en un entorno idílico, un apacible reino en el bosque, hasta que un día un ejército de invasores humanos amenaza la armonía del país. Maléfica se erige en la temible protectora de su reino, pero al final es objeto de una despiadada traición que endurecerá su corazón hasta convertirlo en piedra.

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Comentario: 

Maléfica es una versión comercial de 'La Bella durmiente', un blockbuster veraniego en clave femenina, inspirado en el relato de Perrault y el de los Hermanos Grimm, cargado de símbolos que introducen la modernidad y quizás algo de desconcierto en quienes no aspiran a más que a una actualización del lenguaje audiovisual en el relato de un cuento tradicional, al que la profusión de símbolos la acerca a un público adulto. Robert Stromberg sitúa su cuento en un mundo dividido en dos espacios diferentes: uno en el que reina la pureza étnica, sometido a un rey avaricioso y cruel y otro en el que conviven los seres más diferentes, que,  escarmentados, evitan todo contacto con los humanos. Maléfica (Angelina Jolie) y Stefan (Sharlto Copley) desprecian esta prevención, cuando él se adentra en las tierras idílicas y paradisiacas y tras un breve encuentro con el hada, que todavía no es 'maléfica', al darle la mano observa que el hierro le hace daño, por lo que arroja lejos de sí los anillos realizados con este metal y le roba el corazón con este gesto. Pero también vconoce su 'talón de Aquiles'.

La deriva de Maléfica hacia el lado oscuro se produce después de que el pérfido Stefan, interpretado por  el actor fetiche de Neil Blomkamp, que peca de histriónico en este papel, arrastrado por un pecado tan común como la avaricia y aprovechando el sentimiento que había despertado en el hada siendo una niña, le corta las alas tras seducirla, con el objetivo de conseguir un reino y una princesa. Esta perversa acción desata el odio y el rencor del hada que, arrinconada en el lado oscuro por el amante, lanza una maldición contra la retoña del pérfido hombre que había conseguido su recompensa material a cambio de mutilarla. Pero la pérdida de sus alas no supone la desaparición paralela de sus poderes extraordinarios, que la joven, transformada en una elegante hada maligna, utiliza para defenderse y defender su mundo mulirracial y variopinto.

La experiencia de Stefan y Maléfica cuestiona la base en la que se sustenta el constructo sexista de la sociedad patriarcal: el amor romántico. Uno y otra saben que es difícil creer en este sentimiento, aunque no en el amor con mayúsculas que preside las relaciones entre los seres que pueblan la Tierra, humanos o no. Como hiciera Italo Calvino en su célebre obra 'El Vizconde demediado', Robert Stromberg concluye que la bondad y la maldad no están tan disociadas como planteamientos maniqueos quieren hacer creer, y que, con frecuencia, ambas cualidades residen en partes casi iguales en los líderes que evitan las catástrofes de la humanidad. En este caso una mujer.

La escritura audiovisual brilla con esplendor en la narración de los combates, en la exposición del lado oscuro de los personajes y las acciones que se derivan, pero decae en la representación del paraíso, rozando en ocasiones una cursilería que la aproxima al relato animado de Disney, aunque afortunadamente estos momentos son muy breves. A pesar de que Angelina Jolie no es una actriz aceptada por todos los sectores del público, no sólo ha sido caracterizada con una destreza que la aproxima al cómic, al cuento femenino de Disney, sino que la ejecución de su personaje es brillante y magistral. No obstante se podían haber evitado el aspecto de madre amorosa, una réplica de la imagen pública de su vida real. Un cuento que se deja ver y que aporta más de un argumento contra el constructo de género patriarcal, que no viene nada mal a niños y a sus acompañantes adultos, guiño realizado con discrección y elegancia al público por una actriz con carisma.