Firewall. Richard Loncraine
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Ficha técnica:
Título original: Firewall
País: Estados Unidos
Año: 2006
Duración: 105 minutos
Dirección: Richard Loncraine
Guión: Joe Forte
Casting: Mary Gail y Artz y Coreen Mayrs
Dirección de Fotografía: Marco Pontecorvo, a.i.c.
Música: Alexandre Desplat
Edición: Jim Page
Coordinador de especialistas: Bill Ferguson
Director artístico: Helen Jarvis
Decorador del set: Johane Hubert
Diseño de Vestuario: Shuna Harwood
Responsable de maquillaje: Victoria Down
Reponsable de peluquería: Ian Ballard
Productor: Armyan Bernstein, Jonathan Shestack/Basil Iwanyk
Productores ejecutivos: Brent O'Connor/Charlie Lyons, Dana Goldberg y Bruce Berman
Co-productor: Tobin Ambrust
Diseño de producción: Brian Morris
Warner Bros Pictures asociado con Village Roadshow Pictures/ Beacon Pictures/ Jon Shestack, Thunder Road Production
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Intérpretes:
Harrison Ford: Jack Stanfield,
Paul Bettany: Bill Cox,
Virginia Madsen: Beth Stanfield,
Mary Lynn Rajskub: Janet Stoe,
Robert Patrick: Gary Mitchell
Carly Schroeder: Sarah Stanfield,
Jimmy Bennett: Andy Stanfield,
Robert Forster: Harry Romano,
Alan Arkin: Arlin Forester
Vincent Gale: Willy
Kett Turton: Vel
Nikolaj Coster: Liam
Waldau/Vince Vieluf: Pim
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Sinopsis:
Jack Stanfield (Harrison Ford) es epecialista en seguridad informática. Ha diseñado los más efectivos sistemas antirrobo para defender al banco en que trabaja. Pero alguien observa todos sus movimientos y tras conocer hasta el mínimo detalle de la vida de Jack, toma a su mujer e hijos como rehenes. Los secuestradores tienen un plan: obligar a Jack a robar 100 millones de dólares rompiendo su propio sistema de ultra-seguridad. Harrion Ford demuestra una vez más todo su carisma, fuerza y talento interpretativo que lo han convertido en uno de los héroes mas atractivo de la pantalla. Paul Bettanny co-protagoniza este inquietante thriller junto a Virginia Madsen.
Los secuestradores creen que su plan es perfecto, pero no han tenido en cuenta algo importante: nada es más peligroso que la desesperación de un hombre que puede perderlo todo.
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Comentario:
Se ha criticado mucho a Harrison Ford por el hecho de que, desde la plataforma de lanzamiento que supusieron para él franquicias como 'La Guerra de las Galaxias' o 'Indiana Jones', haya accedido a protagonizar películas de acción, de entretenimiento básico y familiar. Un cine que no exige grandes planteamientos y que sólo precisa de un buen sofá, un recipiente relleno de palomitas y unas pocas ganas de tensar todos los músculos del cuerpo en los momentos en los que el héroe, el prototipo del salvador individual americano, se enfrente a unos enemigos muy peligrosos, eludiendo la cooperación de unas instituciones políticas, policiales y judiciales corruptas, en las que el ciudadano no confía, pensamiento muy en boga en la actualidad.
Harrison Ford representa, tanto por su físico como por su forma de trabajar, un actor algo diferente a otros expertos del género, como Denzel Washington y muy alejado de Jason Statham. Su aspecto de hombre cultivado (realizó un anuncio publicitario de una marca de un coche que representaba al Presidente del Gobierno español Felipe Gonzalez), y bondadoso, aunque no tanto como James Stewart, lo convierte en un hombre capacitado para representar al honrado padre de familia, que sea cual sea su situación laboral y posición económica, está dispuesto a darlo todo por su mujer y sus hijos; un hombre estoico que "encuentra el valor para sobreponerse a alguna desesperada situación, en películas con argumentos demasiado blandos y realizadas sin ambición narrativa alguna." (Pablo del Moral. La Butaca.net). La valoración de duro o blando es muy subjetiva; depende con qué comparemos para fijar nuestro criterio: si imaginamos esta situación en la vida real es de una gravedad escalofritante, pero si establecemos la comparación con personajes de ficción como los que encarna Jason Statham en Safe, (2012) , Parker (2013) o la saga Cranck, cuya violenta bizarría roza a veces con la hilaridad, es cierto que las películas que protagoniza Harrison Ford son sensibleras y blanditas. Es una cuestión de elección de la forma en que estemos dispuestos a perder la tarde sufriendo: ver como un hombre salva a su familia de unos villanos, o como otro se somete en repetidas ocasiones a las descargas eléctrícas de alto voltaje, en zonas industriales, para recargar su batería que funciona a modo de corazón.
En el resto de las valoraciones que se hacen en torno a la cinta se podrían encontrar también muchas diferencias de criterio. Dijo en su día Pablo del Moral que la película era pedestre en su ejecución porque los personajes carecían de ambigüedad moral. Nos viene a la mente los consejos que da aquel analista musical experto al joven Williams en 'Casi Famosos', de ser siempre despiadado, ya que los críticos son los verdaderos artístas, los rastreadores de la perversión, los complejos de culpabilidad, y de todo aquello que esconde el lado oscuro del alma; en este caso es difícil entender cómo podemos calificar a un personaje como el que interpreta Paul Bettany, que utiliza una argumentación tan parecida a la de los que dirigen el Banco en el que trabaja Harrison Ford, que se encarga de la seguridad informática, que los confunde y les hace pensar que es uno de ellos: si cogemos un poco de dinero de quienes tienen tanto que no son capaces ni de saberlo, podemos hacer una obra de caridad: hacer a uno solo inmensamente rico. Él ya se encargará de deshacerse de sus dos o tres socios, cuando todo acabe. Y está tan seguro de que la forma de trabajar de los ejecutivos financieros no es tan limpia como debiera, que actúa a cara descubierta, se prepara una perfecta coartada y los involucra a todos. ¿Es esto correcto moralmente? Es un villano con todas las de la ley.
El título no es en absoluto significativo en relación con el momento de revolución tecnológica en el que nos encontramos, ya que 'Firewall' significa 'Muro de Fuego' y hace alusión a cualquier programa que proteja a una red de otra, una herramienta de seguridad que impide que ciertos comandos o paquetes de datos considerados 'anormales' penetren en nuestro sistema y lo hagan vulnerable. Y esto que ya es muy antiguo , (Richard Lester planteaba una jugada parecida, con un pícaro de tres al cuarto, en Superman III), no dota al film de ninguna característica futurista en relación con la ciencia, sino que va muy pegado al suelo; un film de temática similar a la que planteaba Phil Alden Roberson en 'Los Fisgones ( The Sneackers, 1992), protagonizada por Robert Redford, aunque mucho más brillante y divertida.
Firewall es una película para aquellos a los que les guste sufrir viendo padecer a un padre de familia, al que se le suponen virtudes extraordinarias, y que siente curiosidad por ver cómo resuelve el conflicto. Quien disfrute del terror y la violencia extrema, de la acción desenfrenada e intensificada por los nuevos medios de tratamiento de la imagen puestos al servicio de este objetivo, quedarán defraudados. Pero los géneros melodramáticos, románticos y de acción son muy conocidos por el gran público, que tiene suficiente criterio para elegir entre estas opciones. Un film palomitero, como alguno disfruta llamando a estas películas.
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Comentario:
Se ha criticado mucho a Harrison Ford por el hecho de que, desde la plataforma de lanzamiento que supusieron para él franquicias como 'La Guerra de las Galaxias' o 'Indiana Jones', haya accedido a protagonizar películas de acción, de entretenimiento básico y familiar. Un cine que no exige grandes planteamientos y que sólo precisa de un buen sofá, un recipiente relleno de palomitas y unas pocas ganas de tensar todos los músculos del cuerpo en los momentos en los que el héroe, el prototipo del salvador individual americano, se enfrente a unos enemigos muy peligrosos, eludiendo la cooperación de unas instituciones políticas, policiales y judiciales corruptas, en las que el ciudadano no confía, pensamiento muy en boga en la actualidad.
Harrison Ford representa, tanto por su físico como por su forma de trabajar, un actor algo diferente a otros expertos del género, como Denzel Washington y muy alejado de Jason Statham. Su aspecto de hombre cultivado (realizó un anuncio publicitario de una marca de un coche que representaba al Presidente del Gobierno español Felipe Gonzalez), y bondadoso, aunque no tanto como James Stewart, lo convierte en un hombre capacitado para representar al honrado padre de familia, que sea cual sea su situación laboral y posición económica, está dispuesto a darlo todo por su mujer y sus hijos; un hombre estoico que "encuentra el valor para sobreponerse a alguna desesperada situación, en películas con argumentos demasiado blandos y realizadas sin ambición narrativa alguna." (Pablo del Moral. La Butaca.net). La valoración de duro o blando es muy subjetiva; depende con qué comparemos para fijar nuestro criterio: si imaginamos esta situación en la vida real es de una gravedad escalofritante, pero si establecemos la comparación con personajes de ficción como los que encarna Jason Statham en Safe, (2012) , Parker (2013) o la saga Cranck, cuya violenta bizarría roza a veces con la hilaridad, es cierto que las películas que protagoniza Harrison Ford son sensibleras y blanditas. Es una cuestión de elección de la forma en que estemos dispuestos a perder la tarde sufriendo: ver como un hombre salva a su familia de unos villanos, o como otro se somete en repetidas ocasiones a las descargas eléctrícas de alto voltaje, en zonas industriales, para recargar su batería que funciona a modo de corazón.
En el resto de las valoraciones que se hacen en torno a la cinta se podrían encontrar también muchas diferencias de criterio. Dijo en su día Pablo del Moral que la película era pedestre en su ejecución porque los personajes carecían de ambigüedad moral. Nos viene a la mente los consejos que da aquel analista musical experto al joven Williams en 'Casi Famosos', de ser siempre despiadado, ya que los críticos son los verdaderos artístas, los rastreadores de la perversión, los complejos de culpabilidad, y de todo aquello que esconde el lado oscuro del alma; en este caso es difícil entender cómo podemos calificar a un personaje como el que interpreta Paul Bettany, que utiliza una argumentación tan parecida a la de los que dirigen el Banco en el que trabaja Harrison Ford, que se encarga de la seguridad informática, que los confunde y les hace pensar que es uno de ellos: si cogemos un poco de dinero de quienes tienen tanto que no son capaces ni de saberlo, podemos hacer una obra de caridad: hacer a uno solo inmensamente rico. Él ya se encargará de deshacerse de sus dos o tres socios, cuando todo acabe. Y está tan seguro de que la forma de trabajar de los ejecutivos financieros no es tan limpia como debiera, que actúa a cara descubierta, se prepara una perfecta coartada y los involucra a todos. ¿Es esto correcto moralmente? Es un villano con todas las de la ley.
El título no es en absoluto significativo en relación con el momento de revolución tecnológica en el que nos encontramos, ya que 'Firewall' significa 'Muro de Fuego' y hace alusión a cualquier programa que proteja a una red de otra, una herramienta de seguridad que impide que ciertos comandos o paquetes de datos considerados 'anormales' penetren en nuestro sistema y lo hagan vulnerable. Y esto que ya es muy antiguo , (Richard Lester planteaba una jugada parecida, con un pícaro de tres al cuarto, en Superman III), no dota al film de ninguna característica futurista en relación con la ciencia, sino que va muy pegado al suelo; un film de temática similar a la que planteaba Phil Alden Roberson en 'Los Fisgones ( The Sneackers, 1992), protagonizada por Robert Redford, aunque mucho más brillante y divertida.
Firewall es una película para aquellos a los que les guste sufrir viendo padecer a un padre de familia, al que se le suponen virtudes extraordinarias, y que siente curiosidad por ver cómo resuelve el conflicto. Quien disfrute del terror y la violencia extrema, de la acción desenfrenada e intensificada por los nuevos medios de tratamiento de la imagen puestos al servicio de este objetivo, quedarán defraudados. Pero los géneros melodramáticos, románticos y de acción son muy conocidos por el gran público, que tiene suficiente criterio para elegir entre estas opciones. Un film palomitero, como alguno disfruta llamando a estas películas.
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