Tierra prometida. Gus Van Sant





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Ficha técnica:

Título original: Promised Land.
País: Estados Unidos.
Año: 2012.

Dirección: Gus Van Sant .
Guión: Matt Damon y John Krasinki, basado en el argumento de Dave Eggers.
Casting: Francine Maisler, c.s.a.
Dirección de Fotografía: Linus Sandgren, f.s.f.
Música: Danny Elfman; supervisor: Brian Reitzell.
Editor: Billy Rich.
Coordinador de  espcialistas: Jason Silvis,
Director artístico: Greg Weimerskirch
Decorador del set:: Rebecca Brown.

Diseño de Vestuario: Juliet Polcsa; supervisor: Darcie Buterbaugh.
Jefe de Departamento de Maquillaje:  Kelley Mitchell.
Jefe de Departamentode peluquería: Kay Georgiou.

Productores: Matt Damon,  John Krasinski, Chris Moore.
Productores ejecutivos: Gus Van Sant, Ron Schmidt; Jeff Skoll, Jonathan King.
Co-productores: Mike Sablone, Drew Vinton.
Diseño de producción: Daniel B.Clancy.
Universal Pictures, Focus Features, Particiupant Media, Imagen Nation (Abu Dhabi); Sunday Night)Pearl Street/Media  Farm Production.

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Intérpretes:

Matt Damon: Steve Butler,
John Krasinski : Dustin Noble,
Frances McDormand : Sue Thomason,
Hal Holbrook: Frank Yates,
Rosemarie DeWitt : Alice,
Scoot McNairy: Jeff Dennon,
Titus Welliver: Rob,
TerryKinney: David Churchill,
Tim Guinee: Drew  Scott,
Lucas Black: Paul Geary,

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Sinopsis:

El vendedor Steve Butler (Matt Damon), junto a sucompañera de trabajo, Sue (Frances McDormand), han sido enviados al pueblo de McKinley, duramente golpeado por la crisis financiera de los últimos años, para hacerles una sustanciosa oferta a cambio de perforar pozos en sus granjas. Lo que en principio iba a ser un trabajo fácil pronto se complica cuando interviene un profesor de Instituto, Frank Yates (Hal Broock), en realidad unjubilado supernumerario, antiguo investigador y destacado experto  en I+D; cuando la cosa estámás tensa, llega al pueblo un ecologista, Dustin (Krasinski), justo cuando Steve empieza a interesarse por unamaestra de lalocalidad, Alice (Rosemarie DeWitt). Según van enfrentándose a una variedad de corazones abiertos y puertas cerradas, los forasteros van descubriendo la fortaleza de un pequeño pueblo americano en un momento decisivo.

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Comentario.

Matt Damon, autor del guión con elco-protagonista de  'Tierra prometida', John Krasinski, que en principio debía ser su opera prima como director, decidió pasar el testigo a Gus Van Sant, bajo cuya batuta protagonizó 'El indomable Will Hunting' (1996), cuando era un joven de algo más de veinte años. Al parecer, intenta seguir la estela de su amigo y compañero Ben Affleck, pero ha decidido hacerlo con ‘Father Daughter Time: A Tale of Armed Robbery and Eskimo Kisses’, que protagonizará también John Krasinki. La obra de Gus Van Sant se ha calificado de comprometida con el medioambiente y las consecuencias de la crisis, pero ambivalente, vacilante y dubitativa en su ejecución cinematográfica.

Antes de leer cualquier crítica ya sabemos que se va a acusar a la cinta de obvia y previsible, aunque hay quien ve también promesas incumplidas a nivel narrativo, y no es así. Ya, desde el mismo instante en que comienza el film con una vista panorámica aérea y sigue con un plano cenital, a través de campos y granjas, el autobús que lleva a Steve a la pequeña localidad de McKinley,  hasta que la cámara desciende y continúa su itinerario tan pronto como pone el pie en tierra y , con un sorprendente montaje se cruza con Yates en una de sus calles principales,  todos conocemos, -hasta quienes lo ignoraban antes de ver la película-, por los títulos de crédito que han desfilado ante nuestra vista, que Damon es autor del guión,y que es un actor comprometido con la defensa del medio ambiente, igual que otros famosos como Leonardo DiCaprio, que protagonizó  La última hora (The 11th Hour, 2007), poco después de que Al Gore ganara un Oscar con 'Una verdad incómoda'. Estos conocimientos extradiegéticos van a tener su peso en el espectador, a medida que se vaya posicionando ante los hechos que se se van desgranando en la pantalla.

A nadie le extrañaría la postura de un activista medioambiental como el que interpreta  Krasinski, incluso aunque utilice medios radicales para compensar su debilidad,  si no tuviera enfrenta a un personaje como el de Damon: un hombre honesto, que cree en el progreso, que sabe que la agricultura por sí misma no puede garantizar el bienestar de la gente y que, al final, la crisis se y a llevar por delante a unos aldeanos endeudados hasta las cejas. Y, desde luego, no es un discurso carente de lógica, pero hay algo que no concuerda con nuestras ideas previas. Todos sabemos, como hemos dicho ya, que el actor/guionista y guionista/actor, es ecologista y ha elegido para representar personalmente  en la ficción al empleado de la empresa de gas natural, un hombre amable que se gana a todos, a un lado y otro de la pantalla,  frente a un activista que se hace antipático desde el primer momento. El discurrir de los acontecimientos acabará transformando al representante de la multimillonaria corporación en el defensor del medio que esta comunidad necesitaba; una transformación similar a la que sufrió Norma Rae (Matin Ritt, 1979), que en la lucha sindical pasó de ser una  joven ignorante y despreocupada, a una sindicalista comprometida y rebelde. Steve entendió por fin lo que le había querido transmitir su abuelo cuandole enseñaba a pintar con élelgranero: cuidar del patrimonio de todos.

La historia de amor entre Alice y Steve pone  la nota poética a una historia tan real y prosaica como ésta, que se resuelve en un cuerpo a cuerpo entre dos empleados de la Compañía, y otra mujer, Sue, un ser asexuado, que habla constantemente con su hijo, vía Skipe, y para la que lo que hace es sólo un trabajo que le va a permitir llevar a la Universidad a su retoño. Una secuencia curiosa junta en la misma cama, aunque en habitaciones diferentes, en una especie de pantalla partida, a Damon y Sue mientras hablan por teléfono; cuando se interrumpe la conversación la cámara nos muestra vacía la parte del lecho que aparentemente había ocupado el hombre, en una especie de ilusión visual. La relación entre ambos es exclusivamente de compañeros, aunque Frances MacDormand, filmada de forma natural, nada embellecida, con un rostro que muestra el paso del tiempo, pero que  sigue teniendo el encanto que atrajo a Joel Coen, embauca al propietario de un negocio de la localidad.

Un blog (www.lamarea.com) advierte de que "aparte de las tundas que está recibiendo el film por parte de la crítica especializada, que la tacha de excesivamente obvia, el verdadero enemigo de la película es la industria del gas norteamericana, empezando por Halliburton, el emporio que estuvo liderado hasta el año 2000 por Dick Cheney, ex vicepresidente de George W. Bush. El sector ha emprendido una campaña frontal contra la película en Canadá y EEUU, tomando medidas desesperadas como proyectar cortos a favor del fracking entre los trailers previos a Promised Land, más un sinfín de artículos, programas televisivos, y una estrategia de descalificación del filme por condescendiente y obvio, que genera sospechas en torno a la imparcialidad de parte de las críticas cinematográficas. Por si fuera poco, y en respuesta al impacto que tuvo sobre la opinión pública el documental GasLand, la industria del gas ha financiado el documental FrackNation, un panfleto sonrojante que glorifica el desarrollo local a corto plazo que ha generado el fracking en las comunidades rurales de EEUU. En la misma estela, y ya en referencia directa a la película de Matt Damon, la industria ha lanzado Realpromisedland.org , web que insiste en los beneficios económicos del asunto bajo el malicioso lema: “Americanos reales, historias reales, sin guiones” . ( Sara Brito. Fracking en el cine: Promise Land, 13 de junio de 2013).



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