Todas las mañanas del mundo. Alain Corneau




Ficha técnica:


Título original: Tous les matins du monde.
País: Francia.
Año: 1991.
Duración: 115 minutos.

Dirección: Alain Corneau.
Guión: basado en la obra de Pascal Quignard, adaptada por Alain Corneau y Pascal Quignard. Diálogos de Pascal Quignard.
Casting figuración: Pascale Beraud.
Director de Fotografía: Yves Angelo; Pierre Gamet y Gerard Lamps, Fotógrafos: .Benoit Barbier, Richard Melloul, Luc Roux.
Música: dirigida e interpretada por Jordi Savall; letras: Caroll Richert.
Montaje: Marie -Josephe Yoyotte;  Emmanuelle Lalande, Florence Ricard, Eric Legarçon.
Decorador: Bernard Vezat.

Diseño de Vestuario: Corinne Jorry.
Maquillaje: Jean-Pierre Eychenne, Marianne Collette
Peluquería: Jean-Pierre Berroyer.

Productor: Jean-Louis Livi.
Productor ejecutivo: Bernard Marescot.
Co-producción: Film Par Film, D.D.Productions, Divali Films, Sedif, Frs.Films Productions. Colaboración del Centre National de la Cinematographie, Canal  +.
Productor asociado: Panavision Internacional.
Compañías. Productoras: BAC


Intérpretes;


Jean-Pierre Marielle: Sante-Colombe
Gerard Depardieu
Anne Brochet
Guillaume Depardieu
Michel Bouquet
Jean-Claude Dreyfus
Yves Gasc
Yves Lambrecht
Jean-Marie Potrier
Myriam Boyer
Violaina Lacroix
Nadege Teron
Caroline Sihol: Fantasma de la mujer de Sante-Colombe


Sinopsis:


Francia, Siglo XVII. Narra la historia del maestro de viola más importante de todos los tiempos y su relación con un alumno en la corte de Luis XIV de Francia.


Premios:


1992: Globos de oro: Nominada Mejor película de habla no inglesa
1992: Festival de Berlín: Sección oficial de largometrajes
1991: Premios Cesar: 7 Premios incluyendo mejor película y director. 11 Nomin.


Críticas


Excelente drama de época en la que destaca la maravillosa banda sonora de Jordi Savall. Una joya para los melómanos. Pablo Kurt: (Filmaffinity)


Comentario:


Alain Corneau dota de imágenes la música de Sante-Colombe, el mejor violagambista que ha existido, según los amantes de la música clásica, uno de los cuales dice lo peor que se puede decir del discurso cinematográfico intentando convertirlo en sublime: "El film está dotado de pulcra altura literaria' (archilupo). Si en vez de sentarnos ante una pantalla para ver la película del francés leyéramos la novela de Pascal Quignard seguramente alcanzaríamos esa exquisitez, pero es difícil asumir que para conocer al personaje, una voz en off nos haya de relatar que el músico inventó la sujeción de la viola entre las piernas, la séptima cuerda, depurando la técnica del arco. Eso es, en efecto, literatura ilustrada con imágenes y el resultado no puede ser una obra notable del séptimo arte.

Marin Maraïs, (interpretado de joven por el hijo malogrado de Gerard Dupardieu, (Guillaume), es presentado como un joven sin escrúpulos, que se acerca a la hija de Sante-Colombe para estar al lado del maestro, se deja enamorar o la enamora  y luego la deja para situarse en la corte de Luis XIV en un estado depresivo que al cabo del tiempo le conduce al suicidio, logrando con su muerte el acercamiento de ambos músicos. Maraïs deja las pelucas y los tacones cortesanos y  publica algunas obras cumbres de un músico que no escribía: 'La tumba de los lamentos', 'Les Pleures' y Le retour'). Dos horas de película excesivas, de gran sobriedad y pocas sonrisas, en las que se demuestra que un hombre que es capaz de hacer la mejor música, es incapaz de relacionarse con los demás y vivie aislado con sus hijas, algún criado y sus animales.


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