El castillo de la pureza. Arturo Ripstein.

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Ficha técnica:

Título original: El castillo de la pureza.
País: México.
Año: 1972.
Duración: 110 minutos.

Dirección: Arturo Ripstein
Guión: Arturo Ripstein y Jose Emilio Pacheco.
Dirección de Fotografía: Alex Philips.
Música: Joaquín Gutierrez Heras,
Escenografía: ManuelFontanals. Arturo Carrasco
Ambientación de sets: LuceroIsaac.

Productora ejecutiva: Angélica Ortiz.
Instituto Mexicano de Cinematografía, Estudios Churuusco S.A. :::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Intérpretes:

Claudio Brook: Gabriel Lima
Rita Macedo: Beatriz,
Arturo Beristain: Porvenir, Hijo
Diana Bracho: Utopía,  Hija
Gladys Bermejo: Voluntad, Hijo ::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::
Sinopsis:
La historia de de esta familia, basada en hechos reales que se produjeron en la década de los 50, inspiró la novela de Luís Spota 'La carcajada del gato'. Cuenta la historia de Gabriel Lima (Claudio Brook), que está convencido de que el mundo exterior es dañino para su familia, razón por la que tiene encerrados durante 18 años a su esposa Beatriz (Rita Mancedo) y a sus tres hijos, un chico, Porvenir (Arturo Beristain)   y dos chicas: Utopía (Diana Bracho) y Voluntad (Gladys Bermejo).

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Comentario:
Arturo Ripstein, hijo de un productor judío, Alfredo Ripstein  Jr., tuvo la oportunidad desde niño de conocer el cine y sus entresijos y  de entrar en contacto,siendo adolescente, con Luis Buñuel, cineasta español y uno de los grandes pilares del cine europeo. Estuvo presente en el rodaje de Nazarín (1958), y participó como ayudante de producción en el rodaje de 'El Ángel Exterminador', un film que ha tenido profundas repercusiones no sólo en su filmografía, sino en la de directores consagrados hasta épocas recientes,como Roman Polanski en 'Un dios salvaje' (Carnage, 2011), o en otros jovencísimos, entre ellos el realizador griego, que ha bebido de esta fuente a través del propio Ripstein, Yorgos Lanthimos, cuyo resultado ha sido su película, fría y malsana, Canino, de la que luego hablaremos; autor muy meritorio que está saliendo adelante con un inmenso bagaje cultural, nada adanista, en la  Grecia actual, masacrada y azotada por la deuda .

El realizador mejicano,  que coloca en primer lugar entre sus películas  predilectas ea Andrei Rublev, de Andrei Tarkovski,, cuya presencia se manifiesta de forma notable en sus imágenes, en esos planos-secuencia de impresión visual matérica, que nos hace sentir las paredes y sus desconchados, las maderas envejecidas y la acumulación de viejos cacharros oxidados, entre los que se encuentran los grandes botes que coloca el padre en las puertas para advertir quién sale o entra de las habitaciones de inmediato, que contrastan con las menudas,brillantes y sonoras campanillas de algunas tiendas. Pero si algo nos recuerda al entrañable director de 'Nostalgia' es ese patio, esa especie de atrium, al que dan todas las habitaciones de la casa, y al que salen a jugar los hijos enclaustrados de Gabriel, sometidos mentalmente, siempre mojados y recibiendo el agua de una lluvia constante que moja sus cabellos y sus vestiduras, pero que parecen no percibir los inquilinos de 'El Castillo de la Pureza'. Se ha definido a Ripstein como el cantor de la soledad de las almas y de la imposibilidad de cambiar la propia naturaleza; en el título que nos ocupa hace un retrato en miniatura de la sociedad patriarcal, en la que el Pater Familias, Gabriel,  que se considera superior al resto de los mortales, que son como ratas que sólo saben procrear y multiplicarse y cuya única riqueza es la prole abundante, consecuencia de su vida entregada al bajo vientre, impide que sus hijos se mezclen con tanta inmundicia, y, para ello,  goza de la complicidad de su esposa, una mujer sumisa y atemorizada, que es incapaz de rebelarse ni tan siquiera por el bien de sus hijos.

Pero el aislamiento no cohibe el desarrollo hormonal, y, a medida que los hermanos mayores, Porvenir y Utopía,  van creciendo, van sintiendo la llamada del sexo que los abocará sin remedio al incesto. En el cine de Ripstein hay todavía algo humano, incluidos los golpes y el maltrato físico y psicológico y,en ocasiones, las caricias, y sobre todo la capacidad del hombre de reaccionar ante las injusticias. Utopía acabará denunciando y llamando a la policía a su casa, usando un mensaje escrito en un folio y arrojado a la calle por encima de la tapia, para que finalmente sea la sociedad la que juzgue al tirano, como ocurre en 'La soga' (Rope, 1948), en la que el profesor que encarna James Stewart entrega  a los criminales a la ciudadanía, tras disparar su pistola al aire desde la ventana del apartamento. Aquí, la gente acude en masa y entra en una casa en la que ignoraba que cuatro personas estaban retenidas por la fuerza, por un hombre que, aparentemente, vivía solo  y salía cada día a vender sus productos,fabricados por la familia, en una vieja maleta, dando la imagen de hombre respetable y de clase.
Muchos se podrán preguntar como alguien puede afirmar que todavía quedaba algo de humanidad en los relatos de Ripstein. Lo entenderían rápidamente si vieran 'Canino' de Yorgos Lanthimos, (es difícil creer que no conociera 'El Castillo de la Pureza), en la que se han vaciado los espacios, se les ha quitado el alma y se han transformado en algo maligno, malsano, gélido; sólo la hija mayor, que se ha arrancado un colmillo canino se escapa, mientras el resto de la familia permanece ladrando en la puerta, sin cruzar el umbral. Haneke triunfa en la fallida Europa,en la que  los mensajes perversos y desasosegantes e inquietantes se imponen en un público ilustrado que ha perdido la esperanza.

Porvenir, Utopía y Voluntad 'e su castillo'

Canino. Hijo mayor atacando a un inofensivo gatito confiado, como si fuera un monstruo