A Roma con amor. Ficha técnica, críticas y comentario.
Ficha técnica:
Título original: To Rome with Love.
País: USA-Italia-España.
Año: 2012.
Duración 102 minutos.
Guión y dirección: Woody Allen.
Dirección de Fotografía: Darius Khondji. Color.
Casting: Juliet Taylor, Patricia Di Certo, Beatrice Cruger. En Roma: Veronika Mancino y Doris Von Thury; casting asociado (New York: Geoffrey Miclat.
Música:
Dirección de Fotografía; Darius Khondji a.s.c. y a.f.c.
Montaje: Alisa Lepselter.
Dirección Artística: Luca Tranchino
Decorador del set: Raffaella Giovanetti.
Diseño de Vestuario: Sonia Grande.
Diseño de maquillaje:Alessandro Bertolazzi
Diseño de peluqueria. massimo Cattabrusi.
Productores: Letty Aronson y Stephen Tenenbaum, Giampaolo Letta. Faruk Alatan.
Diseño de producción: Anne Seibel, a.d.c.
Compañías: Gravier Productions, Perdido Productions, Medusa Film, Mediapro.
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Intérpretes:
Woody Alelen: Jerry,
Alec Baldwin: John,
Roberto Beningni: Leopoldo Pisanello,,
Penélope Cruz: Anna,
Judy Davis: Phyllis, Jesse
Jesse Eisenberg: Jack,
Greta Gerwig: Sally,
Ellen Page: Monica,
Carol Alt: Carol,
Giuliano Gemma: el director del hotel,
Ornella Mutti: Pia Fusari,
Alison Pill: Hayley,
Gabrielle Rapone: Gabriele,
Camilla Pacifico: Camilla.
Ornella Mutti: Pia Fusari.
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Sinopsis:
El film que Woody Allen dedica a la Ciudad Eterna, una etapa en su recorrido por las ciudades más emblemáticas de Europa, es una película coral, constituida por una serie de pequeños relatos paralelos:
- Una joven estadounidense, Haley (Alyson Pill), se enamora de un joven abogado romano, Michelangelo (Flavio Parenti) y organiza un encuentra de sus padres respectivos y futuros suegros. Los progenitores de Hayley, Jerry (Woody Allen) y Phyllis (Judy Davis), viajan a Roma para conocer a los Michelangelo. Jerry descubre que el padre de su futuro yerno, Giancarlo (el tenor Fabio Armiliato), es un portentoso cantante de ópera sólo mientras se ducha.
- Un estudiante de arquitectura norteamericano, Jack (Jesse Eisenberg) , se siente atraído por una actriz, amiga de su novia, Mónica ( Ellen Page).
- Un hombre gris, Leopoldo (Roberto Benigni), se convierte de la noche a la mañana en alguien famoso y acosado por los medios, sin saber por qué.
- Una pareja de recién casados de provincias, Antonio (Alessandro Tiberi) y Milly (Alessandra Mastronardi), llegan a Roma para que el marido presente a su joven esposa a sus padres...(Tomás Fernández Valentí. Woody Allen en la Ciudad Eterna. Dirigido por... Julio 2012)
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Comentario.
Hay días en los que un@ necesita reconfortarse y disfrutar de una de las ciudades más hermosas del mundo y en la que ha llegado a ser más feliz, a pesar de que las historias que se nos narren sean sencillas e instrascendentes, con tal de que nos hagan reír un poco y nos acompañen por esas calles que tanto anhelamos pisar. Este es el caso de 'A Roma con Amor', la última película en la que Woody Allen fue el de siempre: director, guionista y actor; volver a oir su voz temblorosa, acercándose ya a las funerarias y proponiendo locuras, nos llena de ternura y nos permite perdonarle todas las trivilidades que se le ocurran.
'A Roma con amor', la nueva película escrita y dirigida por Woody Allen, prosigue su actual periplo por diversas grandes ciudades europeas,en este caso bajo la forma de una comedia coral que recoge, en buena parte, muchas de las obsesiones que han acabado conformando el acervo característico del cineasta neoyorkino ( Tomás Fernández Valentí. Dirigido por...).
Las dos primeras historias son, según Tomás Fernández Valentí, las mas interesantes y auténticas, porque son precisamente las que protagonizan actores norteamericanos, cuya idiosincrasia es la que mejor sabe captar el director neoyorquino, en el que subyace la caricatura de las debilidades humanas, sostenida como también suele ser habitual con él por la entrega de un espléndido grupo de actores.
Woody Allen regresa como actor, y, a pesar de las críticas que ha recibido por realizar un obra trivial, frívola, una parada turística en Roma, nadie se atreve a destruir al hombre que ha conectado con cierta clase burguesa intelectual de todo occidente, que ha sufrido con él las crisis de los 30, los 40 o los 50, las hipocondrías, las inseguridades, las depresiones de un delgaducho y aparentemente débil actor/director con el que tantos hombres y mujeres se han identificado.
Pero en este caso ha patinado. No comprende el mundo en el que le toca vivir, llegada la hora de una jubilación bien merecida, que asocia con la muerte, por lo que convierte a su futuro consuegro en el propietario de un negocio de pompas fúnebres, empeñándose en emprender negocios disparatados, que se materializan en los gags más casposos de la película. Asimila todos los tópicos: la mamma italiana, los cuchillos de Dario Argento en manos de una sanguínea representante de las féminas italianas; el padre que canta en la ducha como Caruso; la chony 'española', dignamente representada por Penélope Cruz; los mitos eróticos italianos, auténticos anti-eros, etc.
Sólo dos historias,que si bien carecen de encanto y gracia, sí tienen cierta dignidad: la que protagoniza Roberto Beningni y su sátira sobre la televisión del famoseo, carente de contenidos, en cuyos programas los famosos se hacen famosos porque son famosos y sobre todo porque alguien ha decidido que así sea. La segunda es la que protagonizan los dos norteamericanos Jesse Eisenberg y Alec Baldwin, un joven arquitecto que vive en el Trastevere y que encuentra a un veterano y afamado compañero de profesión, que siendo joven vivió en el típico barrio romano, al que acude atraído por la nostalgia, y actúa como la voz de la experiencia, apareciendo junto a Jack cada vez que está a punto de cometer un error.
Una que ama Roma, admira la valentía de Roberto Beningni y su sentido del humor,se siente defraudada ante el pequeño fiasco de Woody Allen, que parece que ya no comprende el universo que emerge, como si lo hace el personaje del italiano, y permanece aferrado a sus demonios, su amor por la magia, a la que asocia la ducha que recuerda las cajas en que se meten los compañeros del mago Splendini en Scoop (2006), sus tics intelectuales de la década de los 60, que ahora desembocan en un viejo 'tolerante' liberal, que hubiera deseado para su hija un novio del entorno de Berlusconi, con un chalet en Cerdeña. Será porque no ha estudiado latín.
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