Star Wars. Capitulo VII, algunos antecedentes en creaciones anteriores.






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Ficha técnica:

Título original: Star Wars. Episode VII: The Force Awakens.
País: Estados Unidos.
Año:  2015.
Duración: ¿?

Dirección: J.J.Abrams.
Guión: J.J. Abrams, Lawrence Kasdan, basado en los personajes de George Lucas.
Casting: Nina Gold, April Webster, Alyssa Weisberg.
Dirección de Fotografía de Daniel Mindel.
Música: John Williams.
Editores : Maryann Brandon,  Mary Jo Markey.
Directores artísticos. Senior: Gary Tomkins;  James Collins Robert Cowper Peter Dorme Jordana Finkel Kevin Jenkins Ashley Lamont Andrew Palmer Stuart Rose Hayley Easton Street Stephen Swain .
Decoradores del set: Lee Sandale.

Diseño de Vestuario: Michael Kaplan.
Diseño de maquillaje: Amy Byrne.
Diseño de peluquería: Lisa Tomblin.

Productores: J.J.Abrams, Bryan Burk, Kathlen Kennedy.
Co-Productores: Tommy Gormley, Lawrence Kasdan, Michelle Rejwan, Ben Rosenblatt, John Swartz.
Productor ejecutivo: Tommy Parker.
Diseño de producción: Rick Carter, Darren Gilford.
Compañías: The Walt Disney Company/Lucas Film, Bad Robot.

Más créditos de efectos especiales y técnicos, de gran importancia en esta saga en Imdb.

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Intérpretes:


Imdb atribuye algunos personajes a los actores que aparecen como firmes candidatos del casting de actores de la nueva entrega de la franquicia, que al parecer se ubicará temporalmente treinta años después de 'El retorno del Jedi', contará con un nuevo trío de personajes que convivirán con los ya conocidos por los cinéfilos adictos a la saga.


Oscar Isaac : Poe Dameron
Domhnall Gleeson :
Gwendoline Christie: Capitán Phasma.
Peter Mayhew :  Chewbacca,
Mark Hamill : Luke Skywalker,
Harrison Ford : Han Solo,
Carrie Fisher : Leia,
Adam Driver :Kylo Ren,
Andy Serkis : Líder Supremo Snoke,
Lupita Nyong'o Maz Kanata,
Daisy Ridley : Rey,
Warwick Davis :  
Jessica Henwick :
Max von Sydow :
Kenny Baker :
Kenny Baker: R2-D2,
Anthony Daniels: C-3PO,
John Boyega: Finn,


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Sinopsis:

J.J. Abrans entra con fuerza en el segundo decenio del siglo XXI, dispuesto a  suceder a George Lucas al frente de las franquicias de ciencia-ficción que dominaron el siglo XX: Star Wars, que se estrena en diciembre de 2015, y prepara una nueva entrega de Star Trek en  2016, sagas que han marcado a generaciones para las que, no sólo las historias y su imaginería, sino incluso su merchandising, (recordemos la secuencia con la que Ben Affleck cierra su oscarizada Argo), han pasado a tener el mismo significado que para el Ciudadano Kane su trineo 'Rosebud'. Cada generación ha jugado de una forma, y los que nacieron algunos años después de 1977, en el que 'La Guerra de las Galaxias IV- Una nueva esperanza" sorprendió al mundo y cambió el cine para siempre jugaron con representación en miniatura de sus personajes principales, sus soldados y otras especies inteligentes, todo tipo de bichos, con las maquetas de las naves más famosas, como el espectacular elefante, la 'Estrella de la Muerte' o el 'Halcón Milenario'. Muchos que en aquellos momentos fueron felices. hoy, abrumados por las obligaciones de la vida adulta, vuelven su mirada a su infancia y se preparan para disfrutar de un nuevo episodio a cuyo frente se sitúa a un realizador que de niño es fácil imaginarlo con las maquetas que hoy pone en funcionamiento en el que afortunadamente es su medio de vida: el del cineasta encargado de hacer realidad una nueva entrega. J.J.Abrams da un paso adelante en el modo de representación, cuya buena o mala fortuna será juzgada cuando se estrene.

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Comentario:

En noviembre de 2011 comentábamos la nueva franquicia de animación de Clone Wars, que nos servía de excusa para volver sobre George Lucas y la revolución que supuso su trabajo en el modo de representación cinematográfica en la década de los 70, tan subversiva en todos los aspectos que tras la trilogía de La Guerra de las Galaxias el cine cambió para siempre; sólo hay que escuchar la música original de John Williams para grandes superproducciones de Hollywood, como  'El terremoto' de Mark Robson, para entender de qué estamos hablando. La nueva saga tuvo la virtud de mostrar el valor decisivo del resentimiento para empujar a muchos hombres ambiciosos a lo que el cineasta llamó 'el lado oscuro', a todos aquellos que como, Anakin Skywalker, no sienten recompensada su valía, animados por un espíritu autocomplaciente. Día a día se nos muestra el poder de este sentimiento, en el que reside el odio más profundo de alcance insospechado.

El icono más sobresaliente de su realización fue el personaje del Jedi, de hondas raíces clásicas, especialmente el druida de La Guerra de las Galias de Julio César, cuya fuerza residía en una larga y dura ejercitación, alejado de su familia en la isla de Mona. Su gran conocimiento de la ciencia y su observación de la naturaleza son responsables de que se les hayan atribuido poderes sobrenaturales al ser trasladados a la literatura, el cómic o el cine: Panoramix hacía pociones mágicas que desarrollaban poderosamente la fuerza de los guerreros celtas; el jedi de Lucas se aproxima más al druida clasíco, pues su poder reside en el conocimiento, la ejercitación y la tecnología, simbolizada en esas espadas luminosas de rayos láser, tan atractivas para los jóvenes de diferentes generaciones. Asombra la despierta inteligencia de muchos niños que, desde la más tierna edad, se han sentido atraídos por esta saga y han entendido hasta donde llegaba su prematura capacidad de comprender el entresijo de poderes que entran en juego para hacer que las sociedades acaben desembocando en las tiranías.

En las Guerras clon, Lucas da un paso adelante y la forma y el fondo, el lenguaje de animación moderno , en el que es es pionero, y la música de John Williams como base del score de Kevin Kiner, se ponen al servicio de una interpretación del mundo actual, dirigida a los niños, adolescentes y jóvenes eternos que forman el ejército de sus seguidores, hasta el punto de que estos puedan llegar a entender, como vamos a demostrar, las ideas que conforman las relaciones económicas, políticas y sociales que nos rigen, de una complejidad demasiado opaca para unos adultos, confiados en otros formatos de divulgación excesivamente mediatizados por intereses espurios. Se acusa a su cine de ser un producto blokbuster o mainstream, por sus resultados económicos de taquilla o ventas, olvidando que en el mundo de los negocios o la política ésto es lo único que cuenta, y, como ya he dicho en otras ocasiones, no es irrelevante poder llenar los cines y trasladar al público un buen mensaje. En su saga televisiva, que lleva el entretenimiento al interior de los hogares a través del vídeo, trata temas de tanta trascendencia como el miedo, la muerte, la guerra o la paz, el universo femenino, y otras cuestiones de carácter universal, logrando personajes emblemáticos que penetran en las culturas más diversas.

"El miedo es una excelente motivación" dice uno de los episodios que va a girar en torno a dos conceptos sobre los que vale la pena pararse a reflexionar, porque van a formar parte en un futuro muy próximo de los comentarios, columnas o artículos de la prensa diaria y especializada: desregulación y creación de nuevas líneas de crédito. La república galáctica se desangra en una guerra total con la federación Separatista, que la está llevando a la bancarrota. Los poderosos se han corrompido y ven la posibilidad de hacer negocio con la violencia, y asociados con el Clan Bancario, la Federación de Sistemas Independientes y la Unión Tecnológica (bancos, empresas privadas y nuevas tecnologías) batallan dialécticamente para comprometer a los políticos en una nueva ley que de total libertad a la Banca, a cambio de créditos para fabricar miles de clones; el resultado es la subida de los intereses a niveles de usura, un 25 %, similares a los que hemos sufrido y estamos sufriendo en la primera crisis global. A este proyecto Amidala/Padme contrapone la responsabilidad no sólo económica sino moral de esta decisión. ¿Quién o qué son los clones? una metáfora de un constructo social que atañe a los trabajadores de las clases bajas, que son todos iguales, sin rostro, sin alma, fabricados para producir o para la guerra. Terminada su función, su existencia no tiene sentido. Pero Amidala los dota de alma, son seres humanos, cuya desgracia no es irrelevante.

Esta idea inspira las películas de Duncan Jones, Moon y Source Code, que pone el acento sobre la indiferencia de la colectividad ante el destino cruel que les espera. Palpatine, el presidente de la República y el Conde Dooku, el de la Confederación de Sistemas Independientes, son las dos caras de la misma moneda; Amidala y Mina Bonteri son dos mujeres que lucharán por la paz en los dos bandos enfrentados. Un atentado en un pequeño planeta que vivía en paz y despreocupado, Coruscant, supone el fin de sus aspiraciones.

Tras el atentado en Coruscant y el asesinato de Mina Bonteri, negociadora de la paz, el Senado abre la puerta a la desregulación bancaria, mediante una Ley de Emergencia, lo que supone una subida inmediata de los intereses del 10 al 25 %, en un momento en que la República está gravemente endeudada. Amidala es acusada de traidora y separatista, epítetos muy socorridos para quitarse de en medio una oradora incómoda. Como consecuencia de estas medidas se resienten los pilares del estado del bienestar, el welfare: la sanidad, la educación y las obras públicas; los senadores progresistas comienzan a sufrir ataques físicos, los clones mueren y los pobres se depauperan más aún. La senadora dice algo muy significativo: "Si empobrecen a nuestro pueblo seremos derrotados en nuestros hogares". 

Akira Kurosawa en Los siete Samuráis muestra a los campesinos atemorizados, dispuestos a darles las cosechas a los bandidos con tal de que les dejaran lo suficiente para sobrevivir. Habían sido derrotados íntimamente y moralmente sin necesidad de mancharse las manos de sangre. Todo el poder económico, político y social concentrado puede tambalearse ante un discurso honrado pronunciado por una simple mujer, aunque los fuertes saben que sólo deben esperar a que las ruedas de las instituciones que dominan hagan su trabajo. Y lo hacen, convenciendo a los más débiles intelectualmente. El universo de la república es plural y multiracial, pues en él confluyen seres de diversos planetas de la galaxia, y favorece la imaginación del creador de imágenes variopintas y de gran colorido. La violencia, la guerra, la oscuridad corresponden al mundo de los clones. Dibujo minimalista y limpio, sin planos excesivamente largos que redunden en lo que ya se ha explicitado, e imaginación en la construcción de un senado republicano moderno y funcional, con escaños que se desplazan en el espacio como las naves y fomentan la imaginación del público al que va dirigido, son de una sencillez clásica muy elocuente, como lo es la reproducción del Parlamento británico en el palacio de Westminster, para los conservadores. Sobran las palabras para interpretar estas imágenes.


Es importante conocer los derroteros por los que se desenvuelve esta saga para tener alguna idea de por dónde puede seguir desarrollándose la historia. Todo esto son elucubraciones sobre un futuro que nadie conoce todavía y que aun faltan unos meses para que quede al descubierto.







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