Quiero vivir!

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Ficha técnica:

Título original: I want to live!
País: Estados Unidos.
Año: 1958
Duración: 120 minutos.

Dirección: Robert Wise.
Guión: Nelson Gidding y Don  M. Mankiewicz, basado en artículos de Ed Montgomery y en cartas de Barbara Graham.
Casting: Lynn Stalmaster.
Dirección de Fotografía: Lionel Lindon, a.s.c.
Música, compuesta y dirigida por John Mandel.
Puesta en escena: Edward Haworth.
Edición: William Hornbeck, a.c.e.
Decorador del set: Victor Gangelin.

Vestuario: Wesley Jeffries, Angela Alexander.
Maquillaje: Tom Tunttle, Jack Stone.
Estilista de peluquería: Emmy Eckhardt, Lilliam Hokom Ugrin.

Productor: Walter Wanger.
Manager de producción: Forrest E.Johnston.
Compañías. Productoras: Metro Goldwyn Mayer, United Artists, Figaro Incorporated,

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Intérpretes:

Susan Hayward:  Barbara Graham,
Simon Oakland: Ed Montgomery, periodista,
Virginia Vincent: Peg,
Theodore Bikel: Carl Palmberg, psiquiatra,
Wesley Lau: Henry Graham,
Philip Coolidge: Emmett Perkins,
Lou Krudgman: Jack Santo,
James Philbrook: Bruce King,
Bartlett Robinson: abogado,
Gage Clark: Richard G. Tibrow,
Joe De Santis: Al Matthews,
John Marle: Padre Devers,

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Sinopsis oficial:

Quiero vivir narra la historia de Barbara Graham,  una mujer de pésima reputación que frecuentaba locales de alterne, garitos de juego y otros locales en los que se concertaba no sólo el negocio carnal entre hombres y mujeres, sino tratos ilícitos con el objetivo de delinquir y  que fue condenada por crímenes que no había cometido. Dos conocidos suyos cometen un asesinato y, cuando los atrapan, empiezan a sospechar de que Bárbara los ha delatado y con el objetivo de vengarse, deciden inculparla y es condenada a muerte. La sentencia se cumple la  mañana del 3 de junio de 1955, tras alguna suspensión de última hora, en la cámara de gas de la penitenciaria de San Quintín (California). Basada en hechos reales, la película representa un duro alegato contra la pena de muerte.

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Premios:

1958: Oscar: Mejor actriz (Hayward). 6 nominaciones, incluyendo director y guión
1958: Globos de Oro: Mejor actriz - Drama (Hayward). 3 nominaciones
1958: Círculo de Críticos de Nueva York: Mejor actriz (Susan Hayward)
1958: Premios David di Donatello: Plato dorado (Susan Hayward)
1959: BAFTA: Nominada a mejor actriz extranjera (Hayward).

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Comentario:

'Quiero vivir' es una película cuyo bacground es el tema del falso culpable. El mayor interés del film se concentra en la sensualidad y macarrismo de Barbara Graham/Susan Hayward, una femme fatale que "tiene antecedentes suficientes para parar un tren", sostienen periodistas e investigadores, situación real a la que los hombres añaden su propia inventiva que dota de atractivo a la vampiresa, "una mujer sádica con alma de tigresa, una fémina astuta", en el fondo una ingenua e ignorante que va a pagar un crimen que no ha cometido. Su mala suerte es la de ser joven, atractiva, orgullosa, amoral y culpable hasta el cuello. Ninguna de las cuatro cualidades primeras constituyen un delito, pero sirven para constatar la mirada sexista y libidinosa sobre la mujer, la pulsión escópica que provoca en los hombres, sean policías, gángsters o simples espectadores. Agresiva y fiera para las mujeres. Sin embargo no es, en absoluto, la belleza fatal de que habla Noël Simsolo, en su estudio de 'El cine negro', una mujer de sensualidad devoradora dotada de una belleza excepcional que provoca la desgracia de los hombres; la mujer fatal arribista, sino una víctima del destino y de los hombres que se cruzan en su camino, incluidos sus tres maridos. Es significativa la conversación que tiene con su amable guardiana antes de ser ejecutada en la que se inventa el marido modélico y de buenas posición económica que nunca tuvo.

El psicólogo incide en el diagnóstico:  es una mujer amoral, que creció en el seno de una familia desestructurada, planteamiento psicológico muy al uso en el thriller, una sospechosa que confiesa que no quiere a su  madre y no conoció a su padre, y que, tras sus múltiples estancias en diferentes prisiones conoce todos los cuestionarios de los psiquiatras; un embustera compulsiva, sin el menor respeto a la ley y el orden ni a las normas establecidas por la sociedad, pero que, sin embargo, tiene una positiva aversión a la violencia física, no moral. Engaños, perjurios, vicios, son delitos, pero no de violencia. Son los que, según los expertos, cometen aquellos para los que la violencia es imposible. Pero hay un dato irrefutable que el jurado no tiene en cuenta y que  imposibilita de hecho que ella sea la protagonista de los hechos por los que es condenada:  es zurda y la pistola que mato a la anciana fue disparada con una mano derecha.

El film no sólo denuncia la pena de muerte, mostrando minuciosamente los preparativos para poner en funcionamiento la cámara de gas y todo el ritual que acompaña al traslado de la condenada desde su última celda hasta el siniestro habitáculo definitivo, sino la alarma social que genera la prensa en torno a ciertos hechos luctuosos que crean una  atmósfera que exige venganza, una situación que luego se sienten incapaces de reconducir para evitar un crimen mayor que el que se imputa a la condenada: la ejecución de una inocente. El film está, por otra parte, plagado de propaganda subliminal: General Electric es la marca del reloj que marca el tiempo de vida que le resta a Barbara; Western Junior la empresa que da la hora exacta momentos antes de la ejecución...

Un film duro, en cierta medida sexista, y una exhibición del buen hacer de Susan Hayward, que se puede ver completo y doblado al español de Youtube.