Un trabajo embarazoso. Lara Saphiro.

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Ficha técnica:

Título original: Labor Pains.
País: Estados Unidos.
Año: 2009.
Duración: 85 minutos.

Dirección: Lara Saphiro.
Guión: Stacy Kramer & Lara Saphiro.
Casting: Matthew Lessal.
Drirector de Fotografía: Daniel  J.Stoloff.
Música: Andrew Holander.
Edición: Anne McCabe.
Coordinador de especialistas: Keith Campbell.
Coordinador del departamento artístico: Claire Bennett.
Decorador del set: Brian Kasch.
Regidor: Scott Bruza

Diseño de Vestuario: Roemehl Hawkins.
Estilista de peluquería: Francine Shermaine.
Jefe de Departamento de maquillaje: Brooke Bell.

Productores: Rick Schwartz, Celine Tattray, Lati Grobman.
Productores ejecutivos:  Joe Gatta, Avi Lerner, Danny Dimbort, Boaz Davidson, Trevor Short., Warren T. Goz, Stewart McMichael, Galt Niederhoffer.
Productor en línea : Sabrina Ballard.
Diseño de producción: Daniel Bradford.
Millenium Films presentan una producción de Nu Images y Latitude Films, asociada con Overnight Productions y Plum Pictures.

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Intérpretes:

Lindsay Lohan: Thea Clayhill,
Luke Kirby: Nick Steinwald,
Chris Parnell: Jerry Steinwald,
Aaron Yoon: Miles,
Bridgit Mendler: Emma Clayhill,
Tracee Ellis Ross: Kristin,
Kevin Covais: Greg,
Bonnie Somerville: Suzi Cavandish,
Cheril Hynes: Lisa DePardo,
Creed Bratton: John Abbots,
...

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Sinopsis:

Thea trabaja en una importante editorial. Cuando su jefe la oye burlarse de él, decide despedirla, , pero Thea dice que está embarazada. El ardid funciona, pues se jefe se ve incapaz de despedirla.

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Críticas:

Esta semana el videoclub de Vodafone ofrece a sus clientes una comedia protagonizada por Lindsay Lohan. La crítica se ha polarizado en torno a esta película de Lara Saphiro, difícil de clasificar en todos los sentidos, y que, en realidad, es un paseo por las pantallas de la joven actriz, cuya 'ingenuidad' resulta realzada por una barriga postiza combinada con unas cortas minifaldas..

Fausto Fernández comienza datos muy interesantes del auténtico sentido de su crítica: " Ser fan de Lindsay Lohan no es fácil. Tienes que soportar que ciertos gurús de la crítica te miren por encima del hombro, pero, bueno, eso a algunos nos pone muuucho. Una chiquita (¡tiene 23 años y ya vive en el filo del abismo del trash!) (...)Con la excusa de una mentira (más que piadosa, de supervivencia laboral: simular un embarazo para no perder el trabajo), la película, suerte de trasvase transoceánico del Salir del armario de Francis Veber, funciona mejor en su terrible radiografía de un medio hostil como el de la empresa USA, que en el vodevil de tripas falsas, mareos de pega y escondidillas. ( Un trabajo embarazoso. Fotogramas) .

Alberto Bermejo se sitúa en el lado opuesto: "Los loables esfuerzos de la protagonista, la siempre prometedora Lindsay Lohan, no logran elevar el tono por encima de lo políticamente correcto ni, por supuesto, llevar al respetable al estado de abandono requerido. Aparte de ella es difícil encontrar algo que escape de la contaminación de lo ñoño." (Enredo descafeinado. Diario 'El Mundo'.

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Comentario:

Lara Saphiro (Crawl, 1994, y Second Skin, 1998), se sirve de una actriz con cierto predicamento en algunos sectores de los aficionados a la comedia adolescente de Estados Unidos, Lindsay Lohan,para realizar un film lamentable, con una historia de amor romántico entre una chica incompetente que trabaja como secretaria en una editorial, cuyo sueldo no le alcanza para mantener a su hermana (ambas son huérfanas), pagar el piso y hacer frente a sus necesidades más inmediatas, y el hijo del jefe, un joven palurdo y pusilánime al que abandonó su mujer.

Hay quien ha querido ver  en esta triste comedia "maliciosa y traviesa comedia para tiempos de crisis nos sitúa en el terreno anticapitalista de culto de la televisiva The Office" (Fausto Fernández), pero no hay nadie en el grupo de actores  que dirige Lara Saphiro con el carisma de Ricky Gervais, Steve Carrell o John Krasinski, y tampoco es una serie con la que vas familiarizándote capítulo tras capítulo. Nada es lógico ni tiene sentido en la película de Saphiro: ni la forma en la que la hermana dependiente intenta resolver el problema, ni la forma en la que al fin lo  soluciona Thea.

Es posible que al público medio americano le pueda hacer gracia este tipo de situaciones, pero la película no logra un lenguaje universal que penetre, por ejemplo, en España.