APP (La aplicación). Bobby Boermans






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Ficha técnica:

Tírulo original: APP.
País: Holanda.
Año: 2013
Duración: 75 minutos.

Dirección: Bobby Boermans.
Guión: Robert A.Jansen.
Casting: Kemna Casting, Betty Post, Houdijn Beekjuis.
Director de Fotografía: Ezra Reverda
Música: Herman Witkam.
Edición;Brian Ent.
Diseño de sonido: Michael Sauvage.
Coordinador especialistas.
Director artístico: Tom Van Deijne
Decorador del set: Angelique Melis.

Diseño de Vestuario: Marion Boot, Marian Kan Nieuwenhuyzen.
Maquillaje: Renee Winjhoven. Claudia Creebsburg.
Maquillaje especial: Bob Hillenbrink.

Productor: Edward Van T,Wut.
Productor ejecutivo: Edvard Van 'T.Wout.
Productor en línea: Felice Bakker.
Productor maager: Lucas Camps.
Diseño de producción: Paula Loos.
Compañías. Productoras: 2CFilms, Just Bridge Entertainment;  Justfilm Distribution.

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Intérpretes:

Hanna Hoekstra: Anna Bijnders,
Iris Cabolet: Sophie Welts,
Robert de Hook: Tim Maas,
Mark Van Eeuwven: Sim,
Patrick Martens; Henry,
HarryVan Rijthoven: Dr.Carlo,
Alex Henrickx: Stinj Bijnders,
Leonid Vlassov: Andrey,
Jeroen Spitzenberger:Jerry,
Mattijs Van De Sande Bakhuizen.
Liza Sips: Lisbeth,
...

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Sinopsis:


Una estudiante de psicología joven se introduce en el mundo oscuro y temeroso de una App diabólicoa y misteriosa que empieza a aterrorizarla, mediante la distribución de las fotografías comprometedoras, videos y mensajes de texto sobre sí misma y se adentra más y más en su vida personal, sin problemas exponiendo toda su profunda secretos.


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Comentario:

Bobby Boermans, un cineasta holandés de 34 años, es el prototipo de hombre de nuestro tiempo, un joven que nació y se desarrolló en una época de prosperidad, algo que le posibilitó, como a los de su generación que supieron aprovechar la coyuntura, acceder a una buena educación, que en su caso se vio favorecida al convivir con un padrastro que tenía un estudio de cine, lo que le permitió conocer muy pronto la profesión. En 2004 se graduó en la Academia de Cine Holandés en la dirección de montaje; en 2006 realizó en Hollywood un Master of Fine Arts (Máster en Bellas Artes) de dirección de cine en el American Film Institute. Debutó en 2011 con 'Claustrofobia', una película realizada íntegramente para internet. Trabajó para la televisión, realizó un cortometraje, Brothers en 2011, y  en 2013 hizo su primer largometraje: APP.


En la primera secuencia, previa a los títulos de crédito, que funciona a modo de preámbulo de la historia que nos va a contar, ya tiene presencia todavía inexplicable para el espectador, la sociedad del conocimiento, la era de las nuevas tecnologías, representada por un móvil, que su propietaria coloca en el interior de su coche en el accesorio ideado para poder hablar por teléfono a través del procedimiento denominado 'manos libres'. Curiosamente plantea el tema como una distopía que nos advierte del riesgo de esas aplicaciones que introducimos en nuestros aparatos informáticos con tanta alegría, una especie de virus muy poderoso realizado por un hacker, con un propósito que no queda muy claro. Una aplicación que mata y a la que nadie puede destruir.

Por medio de subtramas entra en cuestiones muy manidas, como el contacto sexual de alumnos y profesores en la Universidad, el rencor del desamor que genera despecho, odio y resentimiento en el rechazado, los accidentes de tráfico y sus consecuencias, especialmente en los motoristas, la amistad entre las chicas... Boermas hace un film aceptable, técnicamente correcto, pero carente de emoción, tan centrado en los movimientos de la protagonista, Anna (Hannah Koekstra), que apenas le queda tiempo para entrar, aunque sea superficialmente, en los temas citados, que se quedan en el simple plano de la enunciación.

Acierta en la representación del mundo en el que está inmerso el propio director, en la dependencia de los jóvenes y de quienes no lo son tanto  del teléfono móvil, por el que circulan videos, fotografías, mensajes demasiado íntimos, y otra serie de datos que permiten a un buen hacker alterar la vida de los usuarios dramáticamente. Sin embargo no ha logrado crear el clima de tensión necesaria para mantener al público en vilo, deseando conocer el fin de la historia. Es difícil saber con tan solo una película si se puede esperar algo más de este joven realizador o estamos simplemente ante un director invisible que, a diferencia de algunos directores de reconocida valía, se escondieron detrás de las cámaras deliberadamente, influyendo en muchísimos otros que les sucedieron.


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