El baile de los vampiros. Roman Polanski.





Ficha técnica:


Título original: The Fearless Vampire Killers.
País: Estados Unidos.
Año: 1967.
Duración:

Dirección: Roman Polansky
Guión: Gerard Brach y Roman Polanski.
Dirección de Fotografía: Douglas Slocombe. Filmado en Panavisión y Metrocolor
Música: Christopher Komeda.
Editor: Alastair McIntire.
Dirección artística: Fred Carter.

Diseño de Vestuario: Sophie Devine.
Maquillaje: Tom Smith.
Peluquería: Biddy Chrystal.
Sonido: George Stephenson.

Productor:Gene Gutowski.
Productor ejecutivo: Martin Ransohoff
Diseño de producción: Wilfrid Shingleton
Compañías: Metro Goldwin Mayer

Intérpretes:

Roman Polanski: Alfred, asistente del Profesor Abronsius,
Sharon Tate: Sarah, la hija del posadero,
Jack McGowran: Profesor Abronsius,
Alfie Bass: Shagal, el posadero,
Ferdy Mayne: Conde Von Krolock,
Terry Downes: Koukol, el jorobado,
Fiona Lewis: la criada,
Iain Quarrier: Herbert, el hijo del posadero,
Jessie Robins: Rebecca, la esposa del posadero,
Ronald Lacey: aldeano idiota.


Sinopsis:


El doctor Abronsius y su ayudante Alfred viajan por Transilvania para confirmar una teoría según la cual los vampiros existen.  A causa de esta teoría, tropieza con uno de sus colegas de la Universidad de Könisberg. De camino a Transilvania  se detiene en una posada, cuyas paredes y ventanas están cubiertas de ristras de ajos, pero tanto los parroquianos y el posadero afirman que no existe ningún castillo en los alrededores y justifican la presencia de los ajos como un motivo ornamental típico de la región- El rapto de la hija del posadero y la vampirización de éste proporcionan a éstos pistas suficientes para llegar al castillo.

Crítica:


Benditos los tiempos en los que las conservadoras MGM financiaba obras de culto realizadas  con recursos moderados por cineastas jóvenes como Roman Polanski , o la FOX se arriesgaba por George Lucas. Ahora se les lleva el producto más o menos acabado, en el que las que ponen toda la carne en el asador son pequeñas compañías, apasionadas por el cine y la música, mientras los grandes se dedican, generalmente, a la distribución. 'El Baile de los Vampiros' es un film digno, de ambientación gótica  en la tierra de los vampiros, Transilvania, un tópico al que se unen todos los elementos característicos del género: el profesor que busca confirmación científica de la posibilidad de que siga habiendo vida después de la muerte; el carácter aristocrático de estos muertos vivientes, unos parásitos que viven de la sangre de los demás, a los que desposeen de sus mujeres más bellas y las esclavizan,  al tiempo que las pervierten; ajos, crucifijos, ataúdes, estacas con extremos afilados para dar muerte a estos seres indeseados e indeseables, etc. Todo un imaginario muy conocido por el público de hoy.

La notoriedad de este film ha traspasado los más de cincuenta años transcurridos desde su producción y no sólo por razones diegéticas, sino por otras graves y truculentas que se produjeron apenas transcurridos dos años del estreno del film en la extradiégesis del discurso fílmico: el asesinato por parte de la Familia Manson de la esposa y partner en el film de su director Roman Polanski, un superviviente del holocausto nazi, (su madre falleció en Aushwitz), cuando tan sólo tenía 26 años y estaba embarazada de ocho meses y medio. Uno de los directores de más talento de la historia del  cine 'El cuchillo en el agua', 1962: 'Repulsión', (1965) o 'Callejón sin salida', vivió en primera persona una de las mayores tragedias que un hombre puede soportar. En este film supo combinar la comedia y el drama hasta hacerlas convivir; ignoro si en su momento la película consiguió hacer sentir aunque fuera un poco de miedo, no digo ya terror, pero si entretener a su público, gracias al papel que el mismo interpretaba junto a su compañero Jack McGowran, el Profesor Abronsius.

'El Baile de los Vampiros' no es un film ambicioso, ni intenta conectar con su público para hacerle reflexionar sobre cualquiera de los temas que preocupan al hombre de nuestra sociedad, sino, sencillamente, que no es poco, entretenerlo. Pero, por esta misma razón, cuando la técnica y la destreza de cada uno de los sectores que intervienen en la realización de un film está dando verdaderas estrellas, no sólo de la dirección, sino de la fotografía, la música, la edición o el diseño de vestuario, (Emmanuel Lubezki ha conseguido tres Óscars a la Mejor Fotografía consecutivos en Gravity, Birdman y The Revenant, en 2013, 2014 y 2015), un film con un plot pobre queda casi como la crónica de los tiempos en que el cine de género comenzaba a surgir con fuerza hasta llegar a las grandes superproducciones de finales del siglo XX y principios del XXI.

Un film que podéis adquirir en tiendas especializadas.





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