Capitana Marvel. Anna Boden, Ryan Fleck. Crítica


UN IMAGINARIO EN EL QUE LA SUPREMA INTELIGENCIA ES MUJER



Ficha técnica, sinopsis, lo que se dice (Pinchad aquí).


Crítica:


Anna Boden y Ryan Fleck son los encargados de dar relevancia a  un personaje hasta ahora secundario, una mujer, Capitana Marvel, que jugará un papel protagonista en la anunciada secuela de 'Los Vengadores', tras la aniquilación de la mitad de la población mundial, incluido el cincuenta por ciento de los superhéroes, que tenía lugar, como todos recuerdan, en Los Vengadores: Infinity War, dirigida por los Hermanos Anthony y Joe Russo. Discursivamente mucho menos compleja que otras entregas de la saga, tiene la vocación posmoderna de colaborar a la formación de un constructo femenino que se oponga al masculino imperante, dando prioridad a las mujeres que toman el poder desde la cúpula, la Suprema Inteligencia, que representa Annette Bening, pasando por la concentración del poder en una joven, Carol Danver/Vers/Capitana Marvel, que se convierte, ella misma, en una verdadera arma lumínica y mortífera, hasta llegar a la base, en la que Lashana Lynch interpreta el papel de una diestra piloto y una buena guerrera, animada por su hija prepúber a priorizar su adiestramiento profesional frente al cuidado convencional de ella misma, una tarea que pueden ejercer otras personas, con independencia de su sexo. Los hombres se encargan del cuidado de sus familias o ejercen de villanos, dependientes de quienes ejercen el poder; Jude Law representa a un villano de segundo orden, mentor y  un curioso entrenador de Carol, capaz de generar situaciones repletas de humor, en las que él sale, generalmente, perdiendo. 

Se ha dicho que Anna Boden y Ryan Fleck no han sabido trasladar al imaginario colectivo una nueva forma de ser superhéroe desde la mirada de género, sin embargo hay un rasgo fundamental que caracteriza la visión de estas mujeres: todos los avances científicos están orientados a imponer la paz en el universo y reducir la influencia de los que se imponen y humillan a los pueblos que van sometiendo. Es cierto que siguen fieles al pensamiento conservador de que hay que armarse hasta los dientes para procurar una paz efectiva y duradera, y este es el principio que rige la investigación de Suprema Inteligencia, que ha desarrollado un vector luminoso, capaz de interceptar la trayectoria de los misiles nucleares de sus enemigos. Lo nuevo es que, en esta coyuntura, la mujer se muestra empoderada, imponiéndose por la fuerza a los villanos, no sólo con intervenciones diplomáticas, y salvando a poblaciones indefensas en misiones humanitarias, lo que supone un giro fundamental. En la secuencia final su supremacía respecto al mentor  masculino queda clara.

Los realizadores recrean el universo tecnológico de la década de los 90 del siglo pasado, que provoca la sonrisa de los espectadores ante lo arcaico de los ordenadores, las pesadas máquinas de juegos, las comunicaciones obsoletas..., que contrasta con la primera secuencia y el homenaje visual de última generación al recientemente desaparecido Stan Lee, escritor y editor de cómics de la compañía Marvel, al que dedican el film, un nombre que adopta la convertida en Capitana, una representante de América,  partner del ya consolidado Capitán América, cuyo traje de superhéroe es una réplica del que lleva hombre, situando a ambos en un plano de igualdad, una nueva metáfora  visual que quiere contribuir al desarrollo del discurso transversal dominante, el feminismo. No puedo imaginar qué esperaban algunos cuando afirman que, al fin y al cabo, la película no es tan radical; las mujeres, aunque tengan menos presencia en los consejos de administración de las empresas, llevan años formándose en todas las ramas del  conocimiento, y las que pueblan el film responden a estos prototipos actuales, ya sea como investigadoras científicas, guerreras empoderadas o especialistas en diferentes tareas hasta hace poco monopolizadas por los hombres. Carol no es una mujer que haya optado por formar una familia y dedicarse al cuidado del hogar, sino que, desde que se tiene información acerca de su pasado ha sido, como mínimo, una fémina activa y nada sumisa a las reglas del patriarcado.

Comentarios

Entradas populares