A ciegas. Susanne Bier. Ficha técnica y crítica
LA VIDA NO ES LO QUE ES, SINO LO QUE PUEDE SER
Ficha técnica:
Título original: Bird Box
País: Estados Unidos
Año:2018
Duración:124 minutos
Dirección: Susanne Bier
Guión: Eric Heisserer, basado en la novela de Josh Malerman
Casting: Mary Vernieu, CSA, Michelle Wade Bird, CSA, Jina Jay
Director de fotografía: Salvatore Totino, ASC, AIC
Música: Trent Reznor, Atticus Ross
Edición: Ben Lester
Supervisor efectos visuales: Marcus Taormina
Dirección artística: Richard L.Johnson
Decoración del set: Brana Rosenfeld
Diseño de Vestuario: Signe Sejlund
Jefe de Departamento de Peluquería: Rita Troy
Jefe de Departamento de maquillaje: Ken Diaz
Productores: Dylan Clark, p.g.a., Chris Morgan, p.g.a., Clayton Townsend, p.g.a.
Productores ejecutivos: Sandra Bullock, Susanne Bier, Ainsley Davies, Alexa Faigen, Ryan Lewis, Eric Heisserer
Productores asociados: Mark Cotone, Kelly Helstrom
Diseño de producción: Jan Roelfs
Compañías productoras: Universal Pictures, Chris Morgan Productions, Bluegrass Films; distribución: Netflix
Intérpretes:
Sandra Bullock: Malorie,Trevante Rhodes: Tom,
Jacki Weaver: Cheryl,
Rosa Salazar: Lucy,
Danielle MacDonald: Olimpia,
Lil Rel Howery: Charlie,
Tom Hollander: Gary,
Colson Baker: Hombre del río,
BD Wong: Greg,
Pruitt Taylor Vince:Rick,
Sarah Paulson: Jessica,
John Malkovich: Douglas,
Vivien Lyra Blair: Niña,
Julian Edwards: Niño,
Parminder Nagra: Doctora Lampham,
Rebecca Pidgeon: Lidya,
Amy Gumenick: Samantha,
Taylor Handley: Jason,
...
Sinopsis:
Transcurrido un lustro desde que una misteriosa presencia sobrenatural llevara a una gran parte de la sociedad a quitarse la vida, una de las supervivientes, Malorie Hayes (Sandra Bullock), y sus dos hijos buscan desesperadamente el modo de salvarse río abajo hacia un lugar seguro en una pequeña barca, atravesando un inquietante bosque.
Crítica:
Susanne Bier, la directora de un intenso drama, 'In a Better World', hace cuestionarse a más de un miembro de una ONG que se integra en estas organizaciones con el objetivo de ofrecer su ayuda a un mundo, el tercero, que se agota en medio de sus contradicciones tribales, la opresión de los señores de la guerra, mientras la población, depauperada y sin defensas, muere a causa de la escasez de agua y alimentos, presa fácil de enfermedades que, en algún caso, ya tienen curación en el mundo desarrollado, la utilidad de su esfuerzo, que choca con el mundo cruel y desalmado que dejan detrás de sí, en el que sus propios hijos están sometidos a todo tipo de riesgos vitales que hacen que descienda su esperanza de vida en un mundo cruel, dominado por la injusticia. Tanto en un mundo como en otro, los más débiles acaban acortando su existencia y aproximando sus posibilidades de llegar a una vida adulta a la de los hombres y mujeres de los tiempos en que las Hermanas Brontë, que reflexionaron profundamente sobre si en estas posiciones había una especie de escapismo, ya que mientras en los pueblos del sur, los más pobres del mundo, estos hombres y mujeres esforzados son recibidos como héroes por la labor que realizan, si realizan las mismas acciones dentro de su país, no sólo no son alabados, sino acusados de practicar una ideología antisistema, de rebeldía, denostados y despreciados por sus propios compatriotas.
Susanne Bier no es una cineasta fácil, y no iba a ser mas accesible cuando se introduce en el género del thriller de terror con un film oscuro , críptico y muy inquietante, que evoca, desde el primer minuto en el que presenta a los personajes y plantea el tema, en cuyo background reside las penas con que todas las religiones de cualquier latitud del mundo intimidan a sus fieles, incluidas las ateas o agnósticas, que van a ser castigados por una entidad que adopta una forma que representa nuestros miedos, nuestras fobias, y la tristeza que nos embarga producida por nuestras pérdidas. La mejor forma de evitar estas amenazas es no mirar al intruso, que emana de nosotros mismos, puesto que son un fiel reflejo de nuestros tormentos, no como ocurre en 'A quiet Place' de John Krasinski, que, aunque muchos atribuyen a este relato un análisis metalingüístico del cine dentro del cine, la amenaza es externa, y la única forma de evitarla es procurando no emitir ningún tipo de sonido (en 'A ciegas' hay que evitar a toda costa mirar, algo más difícil de encajar), para sortear el riesgo de ser devorado. El cine puede ser silente. De hecho se están haciendo muchas películas mudas en la actualidad, con el objetivo de satisfacer a quienes no soportan las actuales bandas sonoras estridentes, que se erigen como uno de los elementos narrativos y creadores de tensión más relevantes.
Es difícil inclinarse por la interpretación de si Bier estructura su relato desde el tiempo presente, intercalando en el relato breves insertos de su recorrido con dos niños por un río diabólico, que atraviesa un bosque siniestro, que jalonan la narración de unos acontecimientos que se produjeron cinco años antes y que ocupan la mayor parte del metraje, o si convierte el tiempo, que se construye en forma de un bucle que nos conduce al desenlace de la trama, que desde el presente hace incursiones constantes al pasado, y desde este se lanza al futuro mediante la reiteración de una serie flashforwards ( 6 horas, en el río, 24 horas en el rio, 36 horas...). El hilo conductor, el símbolo de la endiablada situación en que se encuentran los personajes que realizan un 'descensus ad inferos', su refugio en la casa donde se reúnen varios personajes que desean no ver, en la que no tienen escapatoria, es el canto de unos pájaros, encerrados en una caja, de ahí el título original, 'Bird Box' , sometidos a la misma oscuridad y encierro que sus propietarios.
Pronto se percibe la influencia del realismo mágico de Ernesto Sabato en su 'Informe sobre ciegos', la alusión a la pérdida de visión del más grande literato bonaerense, Jorge Luís Borges, y su formulación de un pensamiento turbio, en cierto grado inexplicable, según el cual las personas ciegas forman parte de una secta sagrada, que opera en las sombras, en medio de las cuales el protagonista de esta historia, Fernando Vidal, se lanza a una aventura e investiga qué hay más allá delas amenazas, caracterizadas por la nocturnidad y la inconsciencia*. Malorie (Sandra Bullock) no sólo desconoce lo que ha decidido no mirar, ni tan siquiera ver accidentalmente tomando para ello las medidas más extremas para tan solo sentir las amenazas de la proximidad del peligro, sino no poner nombre a sus hijos hasta que no estuviera garantizada su supervivencia. Es escalofriante comparar la ilustración que ha realizado Luís Scafati para Zorro Rojo, con los dibujos que extiende sobre una mesa un intruso que, a diferencia de los que se han refugiado en la mansión, pertenece a un grupo que mira de frente el riesgo, lo que no le augura mejor suerte que aquellos que deciden someterse a la secta sagrada de los ciegos. La docilidad, al final, tiene su recompensa.
Vivimos tiempos convulsos y no son pocos los que prefieren integrarse y mezclarse con los que no quieren ver nada de lo que ocurre a su alrededor, negándose cualquier posibilidad de vivir su vida en libertad. La mayoría acaba considerando el suicidio como una posibilidad, una tragedia que alcanza cotas muy altas en los países nórdicos, que olvidan la advertencia de Tom (Trevante Rhodes), cuando Malorie se niega a que genere las mínimas expectativas a unos niños que no tienen futuro y a los que incluso se impide soñar: "El mundo no es lo que es, sino lo que puede ser." Con frecuencia las creencias, aunque aniden en las sectas poderosas de los ciegos, interponen un hálito de esperanza entre un mundo que se derrumba y que es posible que se encamine hacia un nuevo Apocalipsis, y la necesidad del hombre, creyente, agnóstico o ateo, de aferrarse a una esperanza que le permita seguir aferrándose a la vida. Susanne Bier sabe generar tensión e incrementarla a medida que avanza el relato.
Susanne Bier no es una cineasta fácil, y no iba a ser mas accesible cuando se introduce en el género del thriller de terror con un film oscuro , críptico y muy inquietante, que evoca, desde el primer minuto en el que presenta a los personajes y plantea el tema, en cuyo background reside las penas con que todas las religiones de cualquier latitud del mundo intimidan a sus fieles, incluidas las ateas o agnósticas, que van a ser castigados por una entidad que adopta una forma que representa nuestros miedos, nuestras fobias, y la tristeza que nos embarga producida por nuestras pérdidas. La mejor forma de evitar estas amenazas es no mirar al intruso, que emana de nosotros mismos, puesto que son un fiel reflejo de nuestros tormentos, no como ocurre en 'A quiet Place' de John Krasinski, que, aunque muchos atribuyen a este relato un análisis metalingüístico del cine dentro del cine, la amenaza es externa, y la única forma de evitarla es procurando no emitir ningún tipo de sonido (en 'A ciegas' hay que evitar a toda costa mirar, algo más difícil de encajar), para sortear el riesgo de ser devorado. El cine puede ser silente. De hecho se están haciendo muchas películas mudas en la actualidad, con el objetivo de satisfacer a quienes no soportan las actuales bandas sonoras estridentes, que se erigen como uno de los elementos narrativos y creadores de tensión más relevantes.
Es difícil inclinarse por la interpretación de si Bier estructura su relato desde el tiempo presente, intercalando en el relato breves insertos de su recorrido con dos niños por un río diabólico, que atraviesa un bosque siniestro, que jalonan la narración de unos acontecimientos que se produjeron cinco años antes y que ocupan la mayor parte del metraje, o si convierte el tiempo, que se construye en forma de un bucle que nos conduce al desenlace de la trama, que desde el presente hace incursiones constantes al pasado, y desde este se lanza al futuro mediante la reiteración de una serie flashforwards ( 6 horas, en el río, 24 horas en el rio, 36 horas...). El hilo conductor, el símbolo de la endiablada situación en que se encuentran los personajes que realizan un 'descensus ad inferos', su refugio en la casa donde se reúnen varios personajes que desean no ver, en la que no tienen escapatoria, es el canto de unos pájaros, encerrados en una caja, de ahí el título original, 'Bird Box' , sometidos a la misma oscuridad y encierro que sus propietarios.
Pronto se percibe la influencia del realismo mágico de Ernesto Sabato en su 'Informe sobre ciegos', la alusión a la pérdida de visión del más grande literato bonaerense, Jorge Luís Borges, y su formulación de un pensamiento turbio, en cierto grado inexplicable, según el cual las personas ciegas forman parte de una secta sagrada, que opera en las sombras, en medio de las cuales el protagonista de esta historia, Fernando Vidal, se lanza a una aventura e investiga qué hay más allá delas amenazas, caracterizadas por la nocturnidad y la inconsciencia*. Malorie (Sandra Bullock) no sólo desconoce lo que ha decidido no mirar, ni tan siquiera ver accidentalmente tomando para ello las medidas más extremas para tan solo sentir las amenazas de la proximidad del peligro, sino no poner nombre a sus hijos hasta que no estuviera garantizada su supervivencia. Es escalofriante comparar la ilustración que ha realizado Luís Scafati para Zorro Rojo, con los dibujos que extiende sobre una mesa un intruso que, a diferencia de los que se han refugiado en la mansión, pertenece a un grupo que mira de frente el riesgo, lo que no le augura mejor suerte que aquellos que deciden someterse a la secta sagrada de los ciegos. La docilidad, al final, tiene su recompensa.
Vivimos tiempos convulsos y no son pocos los que prefieren integrarse y mezclarse con los que no quieren ver nada de lo que ocurre a su alrededor, negándose cualquier posibilidad de vivir su vida en libertad. La mayoría acaba considerando el suicidio como una posibilidad, una tragedia que alcanza cotas muy altas en los países nórdicos, que olvidan la advertencia de Tom (Trevante Rhodes), cuando Malorie se niega a que genere las mínimas expectativas a unos niños que no tienen futuro y a los que incluso se impide soñar: "El mundo no es lo que es, sino lo que puede ser." Con frecuencia las creencias, aunque aniden en las sectas poderosas de los ciegos, interponen un hálito de esperanza entre un mundo que se derrumba y que es posible que se encamine hacia un nuevo Apocalipsis, y la necesidad del hombre, creyente, agnóstico o ateo, de aferrarse a una esperanza que le permita seguir aferrándose a la vida. Susanne Bier sabe generar tensión e incrementarla a medida que avanza el relato.
*papelenblanco.com. informe-sobre-ciegos-de-ernesto-sabato
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