The New Pope. Paolo Sorrentino. Ficha técnica.





PAOLO SORRENTINO, EL GRAN DESACRALIZADOR, DEFINE A SU PAÍS USANDO COMO MEDIO A  PÍO XIII, UN JOVEN, GUAPO Y CONTROVERTIDO,IDOLATRADO POR SUS FIELES, SOBREVIVIENTE DE 13 TRANSPLANTES,  QUE RIGE EL REINO TEMPORAL DE LOS CRISTIANOS, AL TIEMPO QUE RETRATA LA FORMA DE SENTIR Y VIVIR SU PAÍS, ACORRALADO POR EL TERRORISMO,  Y SOBREDOSIS DE ABUSOS SEXUALES...



Ficha técnica:

Título original: The Bew Pope (TV Series)
País: co-producción Italia/Estados Unidos
Año:2020
Duración de cada episodio: 60 minutos

Creador y director : Paolo Sorrentino
Guión:  Paolo Sorrentino, Umberto Contarello, Stefano Bises
Casting: Annamaria Sambucco U.I.D.C.
Director de Fotografía: Luca Bigazzi
Música original: Lele Marchitelli
Editor: Cristiano Travaglioli A.M.C,
Dirección artística: Rocco Ceraolo, Massimo Pauletto, Anna Sheldrake
Decoradores del set: Simonio La Mantia, Laurana Casilini, Tanya Bowd

Diseñadores de vestuario: Carlo Poggioli, Luca Canfora
Maquillaje: Elena Cippolato

Productor: Ben Jackson
Productores ejecutivos: Jaume Roures, Javier Mendez, Caroline Benjo, Carole Scotta, Simon Arnal, Jude Law, Paolo Sorrentino, Elena Recchia, Riccardo Neri, Mario Gianani, Lorenzo Mieli
Diseño de producción: Ludovica Ferrario
Compañías productoras: Sky, asociada con HBO y Canal+, The Apartment - Wilside Production con Haut et Court TV y The Mediapro Studio y l apoyo de European Regional Development Fund (Fondo Europeo de Desarrollo Nacional) - Región del Veneto

Intérpretes:



Jude Law: Lenny Belardo, Pío XIII,
John Malkovich: Sir Jon Brannox
Silvio Orlando: Cardenal Angelo Voiello/Cardenal Hernández
Cécile de France: Sofie Dubois,
Javier Cámara: Cardenal Bernardo Gutiérrez,
Ludivine Sagnier: Esther Aubry,
Maurizio Lombardo: Cardenal Mario Assente,
Marcello Romolo: Don Tomasso Viglietti,
Mark Ivanir: Bauer,
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Sinopsis:



9 episodios. El Papa Pío XIII está en coma. Tras un breve interludio de incertidumbre, Voiello logra que se elija a Sir John Brannox (John Malkovich) como su sucesor, un moderado, sofisticado y encantador aristócrata inglés que asume su nuevo rol bajo el nombre de Juan Pablo III. Aunque el nuevo Papa parece ser perfecto, sus allegados no tardan en descubrir sus debilidades y secretos. Mientras tanto, Voiello lucha por tapar los escándalos que azotan a la institución eclesiástica. De seguir así, la Iglesia corre el riesgo de desaparecer junto a todos sus altos cargos, algo de lo que dos mujeres, Sofia y Esher, parecen ser plenamente conscientes. Todo parece seguir su curso natural hasta que un día comienzan a aparecer una serie de mensajes firmados por Pío XIII, en estado de coma, desde su habitación del hospital.Pío XIII está en coma. Tras un paréntesis tan inesperado como misterioso, Voielo consigue que Sir John Brannox un moderado, encantador y sofisticado aristócrata inglés llegue al trono bajo el nombre de Pablo III. El nuevo Papa parece perfecto, pero esconde debilidades y  secretos.

Crítica Episodio 1  de la temporada 1


El primer episodio de la primera temporada sitúa al espectador ante el tema que se va a plantear y el modo en el que el brillante y peculiar cineasta italiano lo va a abordar, ahondando en las heridas que enfrentan a los italianos anticlericales contra el estado feudal incrustado en el corazón  de la Roma Antiqua, con un estilo irónico y ridiculizante de cualquier forma de poder, siguiendo el esquema de Italo Calvino en 'El Vizconde Demediado' (lo malo es malo, y lo bueno puede ser peor,  cuando el nuevo Papa Francisco II intenta levantar un muro entre el bien y el mal: la curia). Fellini, y no sólo él, irrumpe en escena enfundado en personajes irrisorios y extravagantes, como la monja enana, que ordena a unas novicias, que fuman obsesivamente, enganchadas al tabaco, tras una secuencia inicial en la que una de ellas, tras lavar al joven papa, interpretado por el guapo Jude Law, se tumba a su lado y se masturba, mostrándose indiferente a lo que piensan que, en su actitud, puede haber aspectos blasfemos o sacrilegos. Imágenes igualmente mordaces, animadas con música-disco, dotadas de un ritmo y una cadencia que caracterizan el cine sorrentiniano, especialmente en 'Il Divo', que nos acerca a la magia de la Ciudad Eterna, la tierra de los Césares, del Imperio Temporal de la Iglesia Católica, de las Mafias de todo tipo,  y de la 'dolce vita' sempiterna; y como un aditamento más, unos cives que parecen pretender comerse la vida como si fuera un flan.

Su fotografía del Vaticano no es ni amable, ni mucho menos equidistante, y se acerca a este antro de serpientes pervertidas, chantajistas y degeneradas, viciosas y corrompidas, que abusan incluso de altas funcionarias que denuncian su fealdad moral,  asediadas por el terrorismo, dentro y fuera de sus muros, acusadas de sobredosis de abusos sexuales, encabezados por un papa idolatrado, aconsejado por un Secretario de Estado artero, despótico y cruel, que quiere ganar a cualquier precio el trono. El cameo que realiza Sorrentino de la película de Zhang Jimou, 'La Casa de las dagas voladoras', especialmente las imágenes de una batalla cuerpo a cuerpo entre sus protagonistas en un campo de bumbúes gigantes, que ha reproducido incluso un anuncio de colonia de Loewe, supone una confirmación de lo que  muchos italianos perciben como real. Un mundo imponente subrayado  por el colorido de las estancias, con paredes de las que cuelgan las obras magnas del Renacimiento, desde Miguel Angel a Boticelli, pasando por 'El Divino' Rafael, reforzado por la indumentaria de cuento de la celebérrima Guardia Suiza con traje de fiesta, para las grandes ocasiones, o vestida de un azul oscuro severo para la cotidianidad. Todo un ritual solemne, neutralizado por el acoso de la secularización y, en ocasiones, vulgaridad de la gerontocracia que domina la ciudad, antiguo territorio de los Colonna, descreída y vividora, que tan certeramente ha retratado Sorrentino en películas como 'Il Divo' o 'La gran belleza'.


Nada sucede igual que en la vida real, pero se le parece bastante, con algunos cambios, no tanto de nombre de los Jefes de la Iglesias, como de orden, que convierte a sus personajes en imaginarios. Hemos elegido a un Papa que no es consciente de serlo, afirma Voielo. Un pretendido Papa de paja que pronto se revela para la curia como un gran peligro; en su intento de manipular a los cardenales, y que, confesor de los jefes de la iglesia, tiene un arma en favor de su pretensión de dar un giro a la Iglesia y convertirla en protectoras de los emigrantes y los pobres, para lo que precisa abolir a la propia curia. Pronto se verá la superficialidad de la sociedad que se mata por un trozo de bandera y prefiere la caridad, deberle algo a un protector, que la conquista de sus derechos, y deja sin apoyos a los defensores de los pobres, acosado por los nervios de los poderes financieros, que amenazan a unos 'funcionarios' corruptos, acostumbrados a acudir a las subastas de Christie. El fracaso en su intento de montar un circo que desemboque en un triunfo mediático caritativo los arrojará en manos de un 'Pope' particullar, en un país en el que 'hasta la prensa de izquierda ha perdido terreno, incluso en los centro de acogida'. Y no es el único. Este es el preámbulo de una larga historia, que ha conseguido arrancar una nota media de 7,6, a la página española Filmaffinity, basada en 2,958 votos, y un 8,2 a la norteamericana Imdbe, basada en las valoraciones de 9,384 usuarios. El primer episodio de la temporada 1 ha sido recibido por el Tomatometer de la página Rotten Tomatoes con un índice de aceptación de la prensa del 90%, basado en 49 reseñas, y del 81% de los usuarios, pulsada la opinión de 232  lectors de la página.


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