Succession. Temporada 2. Crítica.

 



FICHA TÉCNICA, SINOPSIS, LO QUE SE DICE Y CRÍTICA PRIMERA TEMPORADA. (PINCHAD AQUÍ).


SE PUEDE APLICAR A LOGAN ROY LA ADVERTENCIA DE TÁCITO A UNO DE SUS RETRATADOS:"HA CREADO UN DESIERTO Y LO LLAMA IMPERIO". EL EMPRESARIO ACABA CREYENDO  LA MÁXIMA DE EMERSON DE QUE TODA INSTITUCIÓN ES OBRA DE UN SOLO HOMBRE, UNA ESPECIE DE HÉROE GRIEGO, UN SEMIDIÓS, CON SUS DEBILIDADES, SUS FLAQUEZAS, SU CRUELDAD Y SU FALTA DE HUMANIDAD.


Tras el análisis de la primera temporada, en el que rastreamos los antecedentes de esta superproducción, que ha reunido los mejores técnicos que contribuyen a dar forma a un proyecto, desde el guion, la dirección, la fotografía, la música, el diseño de vestuario, la edición, la dirección artística... y un gran elenco encabezado por Brian Cox, unos referentes que me llevaban a las Soap Opera (Series jabón), dirigidas a las amas de casa, que se impusieron en la última mitad del siglo XX, sentimos un hálito de esperanza, creyendo que el relato se iba a tornar más 'godardiano' (de Godard, muy admirado por el cine norteamericano), se iba a volver a las masas y convertirlas en su protagonista, especialmente después de la primera secuencia de la segunda temporada en la que la cámara  da la vuelta e incorpora a las protagonistas de la nueva revolución industrial, pero pronto vemos que este no va a ser el recorrido. A medida que avanzaba el relato he podido comprobar que lo mío era una mera ilusión, que la serie devolvía su mirada a una saga familiar, en la que todos los miembros de este constructo estaban embarrados, luchaban torticeros entre ellos por el poder, se 'colocaban' y eran muy infelices, defendiendo estrategias y prácticas empresariales de tiempos pretéritos ya superados, al menos en apariencia.  La historia sigue estancada en asuntos oscuros que amenazan con hundir al grupo Waystar, un imperio levantado por el patriarca Logan Roy, pero cambian los escenarios; los personajes salen de su torre de cristal y se desenvuelve por otros países. hoteles, salas de juicio, playas, y los directores de fotografía abandonan los colores fríos y buscan atmósferas luminosas y brillantes; la familia sigue sin respetar las leyes a plena luz del día, y la ira del magnate es equiparable a la furia de Aquiles. Los personajes se comportan como extraídos de los mitos y las tragedias griegas y el giro final, inspirado por las Furias, personificación del castigo y la venganza,  está a la altura de las circunstancias.

Logan, un villano a la antigua usanza, un Tántalo o un Cronos devorando a sus hijos y negándoles la posibilidad de heredar su imperio, se erige en un personaje de epopeya, de capitalismo heroico, que ha sido incapaz de criar y educar unos vástagos cultos y solventes,  tres hombres y una mujer que sólo saben utilizar las armas de los Gangs of New York, (de manera literal y literaria, sin mancharse las manos y dejando el trabajo para los sabuesos) y con más instrumentos en su poder para ocultar y desarticular la investigación de sus fechorías, que si se caracterizan por algo es por convertir su conciencia en subsidiaria del poder, aunque las adicciones acaben con ellos y escondan sus trastornos mentales. Unos arquetipos que funcionan desde que Homero escribió sus odas a Aquiles o al taimado Odiseo, que hoy no hubieran superado el algoritmo. En este tipo de relatos de héroes y villanos, hay que reconocer que el cine norteamericano es el mejor, pero quizá el hombre actual exige otras respuestas. Esto no es óbice para que los diferentes guionistas y realizadores vayan salpimentando su relato con alusiones a las víctimas que va a provocar el calentamiento de la Tierra, que algunos asocian con un cambio climático, dejando en el aire las causas de este proceso, y sin permitir que estos temas contaminen el background ocupado por un 'Señor de las Tinieblas'. Una temporada interesante, que profundiza más y más en el poder omnímodo de unos conglomerados que más que industrias parecen guaridas de gángsters, dispuestos a descargar sus responsabilidades en el primero que se cruza en su camino por muy inocente que sea, teniendo que lidiar finalmente con las consecuencias de sus acciones al margen de la Ley, el acoso de empleadas ilegales y las fake news, temas que sirven de telón de fondo a la puesta en escena del poder omnímodo de hombres que han levantado un imperio, pero que ahora gobiernan unos negocios ruinosos que la era tecnológica va a barrer, y va a hacer falta algo más que malas praxis para mantener.



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