Marlow Wayans: Woke-ISH (Woke, más o menos?) . Jay Lafayette. Ficha de identificación. Crítica.

 


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CUANDO GANÓ LAS ELECCIONES BARAK OBAMA ME ALEGRÉ PORQUE ERA UN HOMBRE BUENO...PERO CUANDO SE FUE ME ALEGRÉ POR ÉL: TENÍA DERECHO AL DESCANSO


Ficha de identificación:


Título original: Marlon Wayans Woke-ISH

País: Estados Unidos

Año: 2018

Duración: 68 minutos

Género: Stand-up Comedy (Comedia de pie; monólogo)

Plataforma: Netflix

Recomendación: TV-MA : Mayores 17 años


Dirección: Jay Lafayette

Guion: Marlon Wayans

Dirección de Fotografía: Jay Lafayette

Edición: Brenda Clarson

Departamento de arte: Jeremy W. Foil


Maquillaje: Rebecca DeHerrera


Diseño de producción: Jim Kronzer

Productores en línea: Deborah Adamson, Anne Leuck

Productores ejecutivos: Rick Alvarez, Jo AnnGrigioni, Stephen C.Harris, Cisco Henson, Mitchell Marchand, Jonathan Mussman, Lisa Nishimura, Robbie Praw, Michael Rottenberg, Brian Wolk-Weiss, Marlon Wayans

Compañías productoras: Jeremy Dynamics, Wayans Alvarez Productions; distribuye Netflix


Casting:


Marlow Wayans: él mismo


SINOPSIS:


marlon Wayans hace un discurso atrevido, osado, contra todas las formas de exclusión social, ya se trate de racismo, gaycismo, edadismo, y otras muchas situaciones que pueden incidir en los hombres para sufrir el desprecio o agresión del grupo dominante, al tiempo que hace un canto al humanismo, sirviéndose del mandato de Barak Obama, y el amor y la comprensión de los padres en relación a las situaciones difíciles por las que pasan sus hijos, con anécdotas que rozan la sensiblería.


LO QUE SE DICE: 


Este producto no parece haber gustado demasiado ni en España ni en Norteamérica, según las notas medias que publican la página española Filmaffinity, 5,8, basada en 64 votos de sus lectores, una media que Imdb sube a 6,5, según las valoraciones de 1,500 de sus lectores. En Estados Unidos, más que gustar, parece que ha molestado; la página Rotten Tomatoes no da un índice de aceptación de la prensa, ya que solo han encontrado dos reseñas, mientras que el de la audiencia, un 42%, basado en la opinión de 50 usuarios, no llega n siquiera a aprobar este discurso.


CRÍTICA:

Jay Lafayette decide, en un contexto favorable para este tipo de iniciativas, filmar lo que en España llamamos 'Monólogo' o 'Comedia en vivo', y en EE.UU. Stand-up Comedy o 'Comedia de pie', en la que un comediante , se dirige de pie a un auditorio y le transmite su visión del mundo. Estamos iniciando un camino desconocido para la humanidad, entrando en la era tecnológica en la que no hay máquinas que destruir, a no ser nuestros propios dispositivos, los contenidos están en la 'nube' y los Hackers apenas hacen daño al sistema, cuyos cambios influyen en el pensamiento y en la idiosincrasia de la población. Algunos países lo han sabido ver y se han adelantado a realizar los cambios necesarios, mientras otros se están instalando en la cultura de la cancelación. En función de su ideología: unos quieren acabar con las discriminaciones y otros derogar los avances de las sociedades para eliminarlos, unos hablan de inclusión y otros de derogación de derechos adquiridos, aunque parece que no va a ser fácil para nadie, porque la sociedad no es uniforme, y la mayor división reside en la clase social a la que se pertenece; a la población que se engloba en ese 1% (no todos forman parte de este club de ricos, aunque lo crean) que controla el 99% de la riqueza, no lo va a discriminar nadie.

En cinescopia.com se hacen una pregunta : "¿La corrección política está matando el entretenimiento  o en verdad está logrando un cambio de sociedad? " Y se responde: "(...) la actualización " de ciertos productos de entretenimiento ya conocidos "para las sensibilidades actuales" han sido monumentales fracasos económicos." El antiguo refranero español diría que "Entre todos la mataron y ella sola se murió". Nadie quiere asumir la responsabilidad del desenlace que ha favorecido esta debacle. Todos los cambios se trasladan al lenguaje, con la excusa de hacerlo inclusivo, aunque finalmente caen palabras del diccionario como en 'El orden alfabético' de Juan José Millás y son sustituidas por esas palabras en las que quedan alguna consonante y alguna vocal y se complementan con asteriscos o son directamente sustituidas por alguna incomprensible metáfora, una complicada perífrasis,  para no molestar al algoritmo que obedece a quienes se quejan de millones de conceptos, expresiones, novelas, películas, cuadros y otras formas de expresión que llenan museos, bibliotecas, videotecas y otras colecciones dotadas de significado. Ahora se nos dice que cientos de películas, desde 'El cantor de Jazz', pasando por Indiana Jones, todas los filmes de Scorsese, Tarantino, Cronenberg, Carpenter... que favorecen el nacimiento del virus woke, por razones múltiples, incluida la delegación de las familias del cuidado de lo que pueden ver sus hijos en otras personas, están cayendo de las parrillas porque no se adaptan a la nueva era. Un tiempo en el que juegan un papel decisivo los jóvenes Millennials afectados por el Síndrome de Burnout, que se manifiesta en la sensación de agotamiento , y el aumento de sentimientos negativos respecto al trabajo, debido a las presiones por alcanzar el éxito y los recursos que necesitan para conseguir los bienes que desean, empezando por una casa propia, y a los que alguien ha visto representados en Barbie, el último film de Greta Gerwick.**

Marlow Wayans tiene una historia verdadera que contar, la de un pueblo que fue secuestrado en las costas africanas, siguiendo los consejos de Fray Luís de las Casas a los conquistadores del Nuevo Mundo, y tras colocarles los grilletes, algo desconocido por ellos, incluido el material de que estaban hechos, que les quitaba su libertad, llevados a las Américas, esclavizados primero y convertidos en seres inferiores tras su liberación mediante la segregación y la pérdida de derechos civiles. Aquí, el cómico tiene un relato con el que conmovernos que todos conocemos y entendemos en toda su magnitud, así como su felicidad cuando vio a un negro en la Casa Blanca, y cuando se alegró de que terminara su mandato, su sacrificio por los suyos con la ayuda de los blancos que lo votaron, porque era un hombre bueno. Cuando alerta sobre la discriminación de otros grupos no muestra la misma sensibilidad, porque este no es su discurso; incluso la parodia edadista del comienzo de su representación resulta un poco molesta, situando el listón de la vejez en los 50 años, los que él tiene, mostrando que todavía le dura la crisis personal de los 40. El propio Barak Obama advirtió a los estudiantes que comenzaron este movimiento, al que llamaron woke,  del riesgo que asumían al considerarse los 'despiertos' en un mundo adormecido, dominado por el hombre blanco, un riesgo real que ha conducido a la cultura de la cancelación, que se ha traducido en juicios, en los que el acusado estaba condenado de antemano, como el de Kevin Spacey, recientemente declarado inocente, del que el cómico se ríe abiertamente en el film.

El mundo ha perdido libertades con el algoritmo y con estas corrientes de signos ideológicos diferentes, que hacen temer que todo lo que se ha escrito, realizado o producido, puede acabar como los Budas de los talibanes, o suprimidos de las plataformas de streaming si se multiplican los fracasos económicos de que habla cinescopia.com, que ofrece un ejemplo de cinco películas que tuvieron éxito en el pasado, y que quizá hoy no pasarían por el filtro de las diferentes sensibilidades dominantes. Mientras,  triunfa ahora un blockbuster, conocido por todos y alabado por críticos que antes sólo tenían que pronunciar dos palabras para poner en fuga a los espectadores: Blockbuster y mainstream. No se puede decir mucho más, porque estamos hablando en un momento en que se producen los  cambios de mentalidad que, de momento, están fagocitando el movimiento feminista, que sacó a las mujeres del hogar, les permitió el sufragio universal, y que ahora trunca su lucha contra el techo de cristal, del que ya no se habla. Habrá mucho que decir y escribir de esto.


* Cinco películas imposibles de hacer el día de hoy: El cine vs. la Cultura Woke. cinescopia.com

** El síndrome de Burnout: la amenaza de los millennials. Fran Castillo

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