Mi año en Oxford. Iain Morris.Ficha de identificación y crítica.

 


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UN FILM QUE PRETENDE SER EL ABOUT TIME ( EL YA ERA HORA)  DE ESTA GENERACIÓN Y NO ACIERTA, SEGÚN BRANDON YUN (THE NEW YORK TIMES).


Ficha de identificación:


Título original: My Oxford Year
País: Estados Unidos
Año: 2025
Duración: 115 minutos
Género: drama romántico
Plataforma: Netflix
Edad recomendada: mayores de 13 años

Dirección: Iain Morris 
Guion: Allison Burnett, Melissa Osborne, Julia Whelan, 
Casting: Olivia Scott-webb
Dirección de Fotografía: Simon Tindall
Música: Isabella Summers
Montaje: Victoria Boydell, Kristina Hetherington
Dirección artística: Jourdan McKee, Fabrice Spelta
Decoración: Jo Delo

Diseño de Vestuario: Claire Finlay Thompson
Diseño de maquillaje y peluquería: Victoria Down

Diseño de producción: Catrin Meredidd
Productores: Marty Bowen, Isaac Klausner, Laura Quicksilver
Productores ejecutivos: Laura Char Carlson, Sofia Carson, Pete Harris, Helmunt Hutter, Jelani Isaacs, Matteo Landò, Caroline Levy, Simos Manganis, Maggie Monteith,  Christopher Simon

REPARTO:


Sofia Carson: Anna de Vega
Corey Milchreest: Jamie Davenport
Dougray Scott: William Davenport
Catherine McCormack: Antonia Davenport
Harry Trevaldwyn: Charlie Butler
Esmé Kingdom: Maggie Timbs
Romina Cocca: Sra. de la Vega
Yadier Fernández: Sr. de la Vega


SINOPSIS: 


Anna de la Vega, una estudiante ambiciosa norteamericana viaja a Osxord para cumplir el sueño de su vida de estudiar poesía en la presigiosa Universidad de Oxford. Allí conoce a un profesor seductor que guarda un secreto uqe va a cambiar la vida de ambos.


LO QUE SE DICE:



La calificación de 'Mi año en Oxford' es la propia de una película apropiada para un periodo vacacional (no éste, en el que la mitad del país arde y la otra se consume a la espera de las lluvias, con una tierra recalentada). Pero defrauda, por razones que analizaremos más tarde. Imdb publica una nota media de 6,0/10, basada en el voto de tan solo 14,000 lectores. La calificación de Rotten Tomatoes hunde el film  con un índice de aceptación de la prensa del 32%, basado en 31 reseñas, y del 41%, de acuerdo con las valoraciones de 250 usuarios.

Los criterios de los profesionales dan lugar a opiniones muy frustrantes: drama romántico lacrimógeno de Netflix de narrativa vacía (Mary Kassel, Screen Rant); una película romántica que pretende ser el About Time de esta generación y no lo consigue (Brando Yu, The New York Times); un buen reclamo para estudiar en el extranjero (Monica Castillo, rogerebert.com).


CRÍTICA:

John Serba (Decider) dice que la película es tan corriente como los falsos romances  idealizados de Hollywood. No estaría mal que añadiera de qué romances habla, porque desde la Screwball Comedy, la mayoría  de los filmes norteamericanos, desde la  época clásica hasta hoy, analizan muy bien la procedencia social de sus protagonistas. Aquí tenemos algunas fallas fundamentales, que si no tenemos en cuenta nos llevan a estas aseveraciones. 

Los padres, y especialmente la madre de protagonista femenina, la 'reina del hogar,del ámbito privado de la familia',es una mujer que desarrolla una tarea profesional fuera de este ámbito, probablemente en el campo de la medicina (se deduce por lo que dice a la hija sobre sus turnos de trabajo),  que aspira a que la niña, realizado su deseo de estudiar poesía en una de las universidades más antiguas y prestigiosas del mundo occidental,  acceda a un puesto de trabajo en el banco de inversión Goldman Sachs, un futuro propio de una burguesía asentada. 

La familia de él, Jamie Davenport,  reside en un palació de la nobleza, porque su abuelo era el que aseaba al rey después de evacuar, un trabajo que, aunque escatológico ha dado estatus y esplendor a los suyos. Claro que los norteamericanos no tienen reyes, ni príncipes, ni servidores como los que aparecen en este relato. Por lo tanto ella no es una romántica de la clase trabajadora, (O si, todos trabajamos, incluso el noble hijo del servidor real), al menos en el sentido que parece darle al concepto  Brandon Yu.

El problema de esta historia es que es arrogante, pretenciosa, cuando tan solo narra una historia de amor ficticia entre una joven norteamericana desinhibida y un profesor que esconde un problema que no voy a desvelar aquí para evitar el temido spoiler. Y es precisamente esta cuestión vedada la que da paso a un final moñas, cursi, irreal y decepcionante, que ni provoca frío ni calor, y que, desgraciadamente desencadenará alguna risa abierta. Se ha querido comparar este film con 'Bajo la misma estrella' de Josh Boone, aptas para un público que gusta del amor en circunstancias extremas. El problema es que 'En mi año en Oxford' ni estos sentimientos son profundos. Probablemente a más de uno lo distraerá, pero es difícil que lo emocione.




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