Atrapados. Max Ophüls

 

Ficha técnica:

Título original: Caught.

País: Estados Unidos.

Año: 1948.

Duración:  90 minutos aprox.

Dirección: Max Ophüls.

Guión: Arthur Laurents, basado en la novela "Wild Calendar" de Libbie Block.

Casting Director: Max Hutchinson.

Dirección de Fotografía: Lee Garmes, A.S.C.

Música: Frederick Hollander. Director: Constantin Bakaleinikoff.

Edición: Robert Parrish.

Director artístico: P. Frank Sylos.

Montajes: Michael Luciano.

Producción: Wolfgang Reinhardt.

Supervisión maquillaje: Gus Norin,

Peluquería: Larry Germain.

Metro Goldwyn Mayer y The Enterprise Studios.

Intérpretes:

James Mason: Art Smith,

Barbara Bel Geddes: Sonia Darvin,

Robert Ryan: Wilton Graff,

Frank Ferguson: Bernadine Hayes,

Curt Bois: Ann Morrison,

Ruth Brady: Jim Hawkins,

Natalie Schafer: Vicki Raw Stiener.

Sinopsis.

Leonora Eames ve colmada su ambición cuando se casa con el multimillonario Smith Olhrig, un hombre enfermo, neurótico y autoritario. El matrimonio fracasa y la joven decide separarse. Leonora encuentra trabajo como secretaria de un médico de gran vocación y pocas ambiciones económicas. El marido, sin embargo, no está dispuesto a renunciar a ella y trata por todos los medios de mantener su dominio sobre la mujer.

Comentario:

El cineasta judio emigrado a Estados Unidos, realizó este film en su  etapa americana, que se adelantó en muchos lustros a una análisis de la violencia de género, la que ejerce el hombre sobre la mujer replegada al ámbito privado del hogar, humillada, insultada, dominada y ahogada, sin posibilidad de expresarse con un mínimo de libertad. Leonora era una joven que llegó a la ciudad con la ilusión de llegar a ser modelo, como tantas otras jóvenes, y se cruzó en el camino de un millonario, que se casó con ella para satisfacer su extremado ego, como ocurría con cualquiera de sus negocios.

Ophüls mostró de la forma más sencilla cómo se tejen los hilos que someten a las mujeres a la violencia dentro su propia casa, sin que, en principio, ella misma se de cuenta. Cuando el marido llega al hogar tras una prolongada jornada de trabajo, le exige una sumisión complaciente y con apariencia de plena aceptación. Es asombroso cómo plantea esta cuestión a finales de la década de los cuarenta, aunque evita un final trágico y deja abierta la posibilidad de que la protagonista rehaga su vida. Interesante.