Insensibles. Juan Carlos Medina.





Ficha técnica:


Título original:Insensibles,
País: España/Francia/Portugal
Año: 2011.
Duración:  100 minutos.

Dirección: Juan Carlos Medina
Guión : Louiso Berdejo y Juan Carlos Medina, basado en un argumento de Juan Carlos Medina.
Casting: Pep Armengol y  Luci Lenox.
Director de Fotografía: Alejandro Martínez, A.M.C.
Música: Johan Soderqvist.
Sonido: Jordi Rossinyol.
Montaje: Pedro Ribeiro.
Director Artístico: Iñigo  Navarro. 

Diseño de Vestuario: Ariadna Papio.
Maquillaje: Mónica Alarcón y Lola Cañas.


Productores: Antoine Simone, François Cognard, Miguel A.Faura, Luis Galväo Teles, Adolfo Blanco y Manuel Monzón.
Productores ejecutivos: Isaac Torras y Gonzalo Galväo Teles
Les Films d'Antoine, Tobina Films, Roxbury Pictures, A Contracorriente Films. TVE, TVC, Canal  + Cine...

Intérpretes:


 Àlex Brendemühl:  David,
 Juan Diego:  Adán Martel (Mayor),
 Félix Gómez:  Adán Martel (Joven),
 Tómas Lemarquis : Berkano,
 Derek de Lint : Dr. Holzmann ,
 Irene Montalà:  Anaïs.

Sinopsis:

Historia de un brillante neurocirujano necesitado de un trasplante de médula que, para sobrevivir, se lanza a la búsqueda de sus padres biológicos. Aunque las respuestas sobre su origen parecen ocultarse tras un velo de silencio y misterio, en su búsqueda descubrirá que, en los Pirineos durante la Segunda Guerra Mundial, un grupo de niños sufría un extraño y desconocido mal: eran insensibles al dolor físico.

Críticas:


El debut de Juan Carlos Medina demuestra su buen hacer tras las cámaras, aunque la historia que firma junto a Luiso Berdejo no da para tanto. Un terror que no resulta insatisfactorio, pero tampoco notable.  ("Insensibles": Fantasmas del pasado. José Arce. La Butaca.net).

Gerard Casau (Insensibles.El dolor ajeno. Dirigido por (Julio-Agosto, 2013) parte de la misma idea: "No hay duda de que  'Insensibles' posee precisamente eso, una idea prometedora; un concepto atractivo y potente: en plena guerra civil española, los niños de un pequeño pueblo de Cataluña desarrollan una incapacidad total para sentir el dolor físico, sin que se halle una explicación para tal fenómeno. El problema es (...) que ilustra a la perfección lo que ocurre cuando la idea se malogra (...) sin ser un fracaso absoluto (menos atendiendo a sus condiciones de obra primeriza), si parece condenada a la indecisión desde el primer minuto..."


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