Asalto al distrito 13. Jean Fracois Richet.

Ficha técnica, sinopsis, críticas, cartel y trailer. (Pinchad aquí)

Comentario:

El remake de Jean Francois Richet tiene su mayor enemigo en su referente, el film que dirigió el norteamericano John Carpenter en 1976, mucho más perturbador e inquietante  que el del francés, que genera un clima que ha sabido captar más y mejor James DeMonaco en su saga de 'La purga', con un subtexto muy diferente, si bien basado en el asedio de ciudadanos fuera o dentro de sus casas. Richet parece conectar mejor en el tratamiento de la corrupción policial y en el protagonismo de una pareja de hombres, que convierten el texto fílmico en una buddy movie, con Antoine Fuqua en su celebérrima y magnífica película, Training day, protagonizada por Denzel Washington e Ethan Hawke, un policía de un perfil muy similar al del novato Jake Hoyt, convertido por Richet en un agente traumatizado, que sigue un tratamiento psicológico, como consecuencia de una operación policial fallida.

Los policías que rodean la comisaría no evocan a los temibles zombis, van pertrechados a la manera de los soldados de cualquiera de las guerras actuales en las que han intervenido los Estados Unidos, provistos del equipo técnico más moderno, que incorpora cascos con lentes de visión nocturna, que los hace muy eficaces. Jamás se llega a sentir claustrofobia en el interior de la comisaría del distrito 13 que va a ser abandonada y sus agentes trasladados a otra que van a inaugurar al día siguiente de esta noche nefasta de Navidad. La colaboración in extremis de Bishop y Jake Roenick es coyuntural, impuesta por las circunstancias. Concluída la batalla, cada uno seguirá su camino.

Jean-François Richet creció en un HML (Casa de renta baja) en la Banlieu parisiense, lo que le permitió conocer de primera mano los conflictos de los suburbios de las grandes ciudades, no los plácidos formados por casitas rodeadas de jardín de Norteamérica, sino los sórdidos y peligrosos de la ciudad francesa.  Comienza su vida profesional trabajando en una fábrica, una experiencia que le inspiró en la creación de los escenarios de sus películas, en las que influyeron cineastas rusos de la categoría de Dziga Vertov, y, sobre todo Sergueï Eisenstein. Tras realizar tres películas en Francia intenta, como tantos otros, la aventura americana, gozando de la confianza de John Carpenter que le cede los derechos de autor de 'Asalto al Distrito 13'. El resultado es un film diferente, en el que la acción se impone al suspense del original.

A su vuelta a Francia realiza un biopic sobre Jacques Mesrine, declarado 'enemigo público número 1' en Francia, en la década de los 70 del siglo pasado, protagonizada por Vincent Cassel (2009), 'Enemigo público', que ganó  el premio a la mejor dirección en 2009. Tras su larga ausencia de las pantallas, y la realización de un film dramático, aborda una co-producción franco-norteamericana en 2016: Blood Father, interpretada por Mel Gibson. El último proyecto que se conoce del director, que fue muy bien recibido por la prensa y el público.